Capítulo IX

778 73 81
                                    

Aniversario

Draco Malfoy

Trágame tierra y escupeme cuando aún tenía mis ahorros.

En dos semanas cumplía dos meses de novios con Hemet.

¿El problema? Qué no sabía que darle.

Bueno, por mí le daría el mundo, pero papá se enojaría por gastar la mitad de la fortuna en un regalo de aniversario.

Tampoco tenía mucho dinero. Pues apenas mi mesada serviría para sobrevivir.

Hemet y Cachetitos eran muy caros.

Sí, "Cachetitos" era calabaza, no sé porque pero empecé a decirle así, volviendo al tema...

Ambos me hacían gastar mucho dinero. No sé si Hemet pidiendo un montón de cosas para Cachetitos, o Cachetitos por existir y hacer que su madre pidiera demasiado.

O tal vez tú que no les puedes decir que no.

No, ¿cómo crees, consciencia? Yo soy una víctima aquí. Una víctima feliz, pero víctima y al fin y al cabo.

Tengo dos semanas para buscar un regalo de aniversario.

Pero aún es temprano, recién están sirviendo el desayuno...

Bueno, en eso tenía razón mi consciencia, recién estaban sirviendo...

¡Un momento!

¡Recién estaban sirviendo el desayuno!

¡Demonios!

Salí de mi cómoda cama y fui rápidamente a ese mueble que estaba bajo muchos hechizos protectores.

Casi me olvido...

Suspiré de alivio mientras sacaba una botellita.

Hoy tocaba darle a Hemet su dosis semanal de Amortentia, los efectos duraban 7 días y yo le daba la poción cada 6 días.

Salí rápidamente de mi habitación ignorando a Blaise que roncaba y murmuraba el nombre de la mejor amiga de mi novia.

(...)

Llegué al Gran Comedor e inmediatamente agarré una taza que contenía chocolate caliente, sin que nadie me viera vertí el contenido de la botellita. Sonreí triunfante.

Después de todo...

Todo estaba saliendo justo como lo tenía planeado.

(...)

Hoy era mi aniversario con Hemet.

¿Cuál era su regalo?

Pues... Mandé a construir un invernadero en mi mansión. ¿Por qué en mi mansión? Porque nos íbamos a casar y ella vivirá conmigo, obvio

El invernadero estaba lleno de muchas flores, mi madre se encargará de ellas mientras hemet y yo no podamos.

Por cierto, mamá se emocionó mucho cuando le dije que tenía novia.

(...)

Me encontraba yendo a ver a Hemet con un ramo de girasoles y chocolates.

La había citado en una zona un poco alejada del castillo, pero no era el bosque prohibido, mientras pasaba por un pasillo no pude evitar escuchar una conversación.

—... gracias por la belladona, Theo  —decía... ¿Hemet? ¿Por que demonios MI novia hablaba con ese idiota?

o una mejor pregunta.

Amortentia | D.MDonde viven las historias. Descúbrelo ahora