– Supuse que estarías aquí.
– Sana... – murmuró Chaeyoung al sentir la voz de la japonesa – ¿Cómo supiste que estaba aquí?
– No eres la única que busca la altura cuando se siente triste – aclaró – ¿Puedo?
– Adelante – permitió y entonces la mayor se sentó a su lado.
Ambas sentadas en el borde de la azotea del edificio de MSM Entertaiment.
– ¿Cómo es eso de que buscas altura cuando te sientes triste? – preguntó la rubia – ¿Lo has estado?
– Un millón de veces – respondió con nostalgia – Incluso llegué a pensar en saltar.
– ¿Por qué? Tu vida parece perfecta – murmuró y la mayor rió – Lo siento, sé que es englobarte en un estereotipo, pero...
– Sé a qué te refieres, Chae – sonrió Sana – No he tenido una historia tan cruda como la tuya, eso está claro, pero no por el hecho de tener dinero y un trabajo bueno, quiere decir que uno sea feliz.
– ¿Cómo sabes de mi historia?
– Tzuyu me lo contó – se encogió de hombros – No es muy buena guardando secretos, supe su identidad real la primera vez que estuve con ella.
– Tú... ¿Conoces a Tzuyu?
– Más de lo que puedas imaginar – rió sonrojada – Tzuyu me contó la verdad el día que Jeongsin te golpeó por llegar tarde, aunque su revelación sólo fue una confirmación a mis sospechas – comentó – Siempre supe que tú eres Katharina.
– ¿C-Cómo?
– La voz, el cabello, los tatuajes, el lunar – fue enumerando – Me sorprende que Mina siendo la inteligente de la familia no se haya dado cuenta.
– Wow – respondió la menor – Resultaste ser muy intuitiva y Tzuyu una jodida perra traicionera, voy a tener que cambiar de confidente.
– Bueno, puede que yo la haya presionado un poco – adjuntó la japonesa y ambas chicas rieron.
– Lo siento, Sana – habló Chaeyoung luego de un breve silencio.
– ¿Por qué lo sientes? – frunció el ceño.
– Por lo de Mina – bajó la cabeza – Yo...
– No debes disculparte por haberte enamorado de ella – la interrumpió – El amor no debería ser un arrepentimiento, sino que un aprendizaje y algo bonito, sobretodo cuando es recíproco.
– Lamentablemente el amor que siento, duele como la mierda – murmuró con amargura – Y no es recíproco.
– Ahí te estás equivocado – negó la mayor – Tu amor es 100% recíproco, el hecho que tú no quieras darte cuenta y Mina, a su vez, tampoco, es algo diferente.
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PROSTITUTE || MiChaeng
FanfictionUna aventura alocada entre antifaces y sábanas blancas.