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Días después de que el azabache hubiera visto a su hermano adoptivo retrocedió en su salud, los ataques de pánico se estaban volviendo frecuentes y estubo, varias veces, a punto de tener desmayos.

Bokuto estaba realmente preocupado por la salud de Akaashi, el menor no parecía mejorar, al contrario. Últimamente Akaashi no conseguía el sueño y cuando lo hacía no dormía más de dos o tres horas; Akaashi había bajado mucho de peso, se negaba a comer y cunado lo hacía lo terminaba vomitando.

Takeda había insistido a Keiji para que viera un terapeuta, pero Akaashi se negaba, eso podría perjudicar en su trabajo.

Bokuto intento averiguar la razón de porqué Keiji estaba tan mal, pero indagó de  más, sabía que Keiji padecía un fuerte trauma sí se encontraba en esas condiciones.

Takeda debía ir a ver al azabache dos veces al día cada tres días de la semana de manera intercalada. De esa forma se había logrado un mínimo avance con el chico, al menos dormía de corrido con las pastillas para el sueño.

Los días avanzaban, Keiji mejoró en cuanto al dormír se trataba, pero su alimentación era otra historia. Cómo recién estaba dirigiendo sus alimentos sin tener que vomitar, solo podía acceder a comer líquidos o cosas bastantes livianas, gracias a eso estaba con un poco más de fuerza, pero aún así le costaba mantener el ánimo y la concentración en clases (aún que Bokuto le insistía que no se esforzará tanto)

Dos semanas más habían pasado, Takeda se impresionó al ver que Keiji logro mejorar, ya no tenía ataques de pánico durante las noches, sus ciclos de sueño se había establecido bien y sobretodo, ya estaba comiendo de una manera más estable. Era un gran alivio para Takeda ver qué Keiji realmente mejoró, sin embargo, no dejo de aclarar que la terapia era necesaria, pero Keiji seguía firme en su decisión.

Las mañanas en casa de Bokuto se volvieron más tranquilas, cuando estuvo enfermo las mañanas eran las molestas, ya que debía tomar mucha medicación y su estómago quedaba sensible a la comida. Por suerte ya no tenía que tomar más medicamentos que para el sueño, así que su estómago estaba cada vez mejor.

Nyoko estaba comiendo algún muffin que había preparado con Bokuto la noche anterior, mientras que el albino y él tomaban un café.

Akaashi no sabía por qué, pero jamás había disfrutado tanto un café como esa mañana.

Al cabo de un rato Nyoko tuvo que ir a clases y Bokuto a su trabajo, el día de hoy Keiji no tenía clases y su licencia de salud aún se terminaba para el trabajo, así que no tenía nada que hacer.

Su teléfono vibró, pensó que sería algún mensaje de la universidad o trabajo, pero no.

[ Akaashi ¿Dónde estás? Anoche fuí al departamento y no estabas]
11:24 a.m

[Tuve problemas de salud...
Ya sabes, nada nuevo]
11:25 a.m

[Eso no responde mi pregunta]
11:25 a.m

[Estoy quedando me en
casa de Bokuto-san]
11:26 a.m

Pasó un rato, el mensaje parecía leído, pero el semi rubio no constataba. Akaashi sabía bien que Kenma no confiaba en desconocidos.

[... Solo cuídate]
11:48 a.m

Akaashi suspiró, sabía que Kenma se estaba preocupado de más. Bokuto era alguien bastante decente en comparación a sus ex novios o cualquier otra persona que hubiera conocido en el trabajo o universidad.

Por lo general las personas trataban de ligar con él, pero solo para cosa de una noche. Akaashi no es de los que solo tengan sexo casual ya que no le agrada la penetración, le parecía mejor el sexo oral ya que no era tan doloroso.

Adicción [CANCELADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora