༺Capítulo 4༻

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Mientras me autoestresaba sentí una voz a mi espalda, inmediatamente me volteé esperando encontrarme con XiChen, a alguno de los discípulos o incluso a WangJi, pero me encontré con el mismísimo QiRen. Juro que casi me da un paro cardíaco cuando lo ví, habló mientras yo llevaba una mano a mi pecho intentando calmarme...

—A la derecha —dijo.

Yo, saliendo de mi trance, asentí, hice una reverencia, volteé y comencé a caminar cuando el Lan volvió a hablar.

—La derecha esta del otro lado.

«Mierda. O sea, que oso conmigo? Que me pasa we?»

Asentí y camine en dirección contraria a la inicial. Después de recorrer unos metros, sentí unos pasos detrás de mi así que supuse que se estaba marchando. El sonido de pasos no disminuía y me di cuenta de que me estaba siguiendo, al parecer, cuidando de que no me volviera a extraviar. Aguante mi curiosidad de ver si me seguía y me centré en el camino. Me di cuenta de que ya había pasado por ese lugar antes en el día, hasta que pude divisar mi habitación. Apresure mi paso hasta llegar a la entrada. Fue entonces que me percaté que ya no se escuchaban los pasos así que miré hacia atrás, encontrandome en absoluta soledad, el Maestro QiRen ya no estaba.

«Seguramente no me estaba siguiendo, quizás solo iba en una dirección parecida a la mia, o quizás solo fuera una mala jugada de mi cabeza... Si debe haber sido eso, los Lan son muy silenciosos...»

Haciendo mis teorías de lo que quizás pasó, estaba apuntó de entrar cuando escuche una voz familiar.

—Señorita Lin.

—Eh? —giré hacia atrás y pude ver al Primer Jade viniendo en mi dirección. Al llegar a mi lado me sonrió y preguntó.

—Que le pareció su primera comida aquí?

«Renormal, suelo comer comida insípida y amarga todos los días :') gracias por preocuparte»

—Nice —dije y sonreí.

«—No mientas ridícula—»

«Agh cállate»

—Que?

—Que de que?

XiChen me miro con cara de confusión para luego volver a hablar— Dijiste: nice, que es eso?

«*inserta 'a' chiquita (ª)* yo y mi mala costumbre jaja»

—Que me pareció bien. —dije y sonreí para ocultar la pequeña mentira. El Jade también sonrió pero, obviamente, se percató de mi pequeña mentira.

«Por esto es que no miento, que vergüenza jajaja»

—No lo pareció así que decidí traerle esto.

Cuando terminó de hablar sacó de su túnica una pequeña bolsa y me la entregó. Con un gesto de la mano me instó a que la abriera, lo cual hice. Adentro había una manzana y algunas bayas.

«Comida!!!»

Miré a las frutas y luego al Jade con mis ojos brillantes, no quería que fuera tan obvia mi felicidad pero era imposible ocultarla al ver cosas dulces.

Cuando estaba a punto de darle las gracias, llegó una chica casi corriendo hasta nosotros, hizo una reverencia y se dirigió al Lan.

—Joven Maestro Lan, las demás chicas despertaron —dijo trastabillando por la falta de aire.

Apenas la escuche olvidé que tenía las frutas en mis manos y pregunté.

—Donde están?

—En la enfermería aún, no han salido ni tampoco dejado que nadie se acerque, construyeron una especie de muralla con las camas.

༺Nuevo Destino༻ 『Mo Dao Zu Shi』〖En edición〗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora