El Penitente

PARTE UNO: EL ABUSO

Eran las doce menos quince minutos de un viernes como cualquier otro, pero para los involucrados en esta historia tendría un desenlace diferente a los viernes cotidianos que solían vivir, pues en exactamente un cuarto de hora habrían cinco chicos abusando de una joven de 18 años que salía de su última clase en la universidad con dirección a casa.

Rachel era una joven de clase media alta, estudiaba psicología en la universidad del distrito, aplicada, inteligente, bondadosa, el tipo de chica que a todos les cae bien y ni hablar de su aspecto físico, pues era hermosa, no muy alta realmente, medía 1.58 cm. De piel blanca como la nieve, cabello rubio y largo digno de Rapunzel, ojos azules como zafiros y unos labios grandes y llamativos. Era una muñeca que muchos deseaban pero nadie tenía, hasta esa noche desgraciadamente.

Ahora hablemos de Leo, un tipo bastante promedio, 1.81 cm. De altura, estudiante de derecho penal en la misma universidad que la bella Rachel, cabello rizado pero corto al estilo casi militar, ojos oscuros, facciones fuertes y musculatura definida pues era un tipo que se ejercitaba periódicamente. Personalmente hablando es un chico callado, inteligente pero fácilmente influenciable, de carácter más bien endeble, de esas personas que se dejan llevar para donde digan las multitudes, rasgo que le costará caro pues esto lo llevará a cometer el peor error de su vida.

Leo conformaba un grupo de cinco amigos. Brian: El deportista galán. Carl: Un otaku y friki perdedor que nunca ha tenido suerte con las mujeres. Eric: La mala influencia del grupo pues es dealer de drogas y tiene conexiones en los bajos mundos de la sociedad. Y Jamal: Mejor amigo de la infancia de Eric y el que lo defendía siempre que alguno de sus trabajos salía mal.

Estos chicos llevaban un par de semanas observando a Rachel y su rutina, a qué hora entraba y a qué hora salía, qué ruta de autobús tomaba, sí iba a acompañada, que calles cruzaba, etc. Esta noche era la definitoria, pues ya conocían cada uno de los movimientos de la joven universitaria como la palma de sus propias manos. El grupo se reunió en el auto de Jamal en una de las esquinas que debía transitar la chica, ahí dialogaron sobre el plan y como sería llevado a cabo, ninguno titubeo, el joven Leo estaba especialmente entusiasmado dado que hace meses no tenía relaciones con nadie ya que su ex había cortado con él.

Llegó el momento y vieron caminar a la jovencita con cierto apuro, pareciera que ella sabía que algo andaba mal. Los amigos tenían todo calculado pues a esa hora dicha calle era poco transitada, es decir, no había nadie ahí en ese momento más que ellos y Rachel. Jamal y Brian salieron del auto y corrieron cruzando y casi tacleando a la chica que cayó sobre unos arbustos, el deportista le tapó la boca impidiendo que los gritos salieran de ella, Jamal le hizo señas a los del auto de donde salió Leo rápidamente y les ayudó a cargarla de vuelta al vehículo, subieron los tres en la parte de atrás con Rachel, inmovilizándola por completo todo listo para que Eric pisara el acelerador.

Todo iba acorde al plan, condujeron hasta la casa de Eric, quien vivía solo en uno de los barrios bajos de la ciudad. Era tarde en la noche y dicha zona solo era concurrida por drogadictos y vagabundos así que nadie notó que se bajaron del auto con una chica en los brazos forcejeando y luchando por su vida. Entraron a la vivienda donde tiraron fuerte contra el suelo a Rachel quien inmediatamente intentó gritar pero Jamal de un solo puñetazo la calló.

A continuación lo que hicieron fue poner música a un volumen muy alto, sin decirse una palabra entre ellos prosiguieron con su plan. Le dieron media vuelta a la jovencita quedando boca abajo, la desnudaron con poca delicadeza pero evitando dañar su ropa, acto seguido la subieron en una mesa de centro, dos de ellos sujetaban sus piernas flexionadas para que su cola quedara parada a una altura cómoda para los violadores, otro sostenía los brazos de la chica flexionados contra su espalda quedando totalmente dominada. Y en ese instante empezó la faena.

Los bastardos se turnaron uno a uno, tomándose su tiempo penetrando y luego terminando por completo dentro de la joven, quien solo lloraba al sentir tal ultraje, pero que al ver como se turnaban no solo para violarla, sino también para sujetarla pudo vislumbrar los rostros de todos y cada uno de ellos, grabándoselos por completo en su memoria.

Una vez todos pasaron por Rachel, Jamal se paró frente a ella apuntando con un revolver calibre 38 y le advirtió.

JAMAL – Sabemos exactamente dónde vives, dónde estudias, con quien sales, quienes son tus padres y amigos, si llegas a poner una denuncia en contra de alguno de nosotros maldita perra, no quedará un alma para que te llore porque te juro que antes de que los policías hagan algo, yo te masacro con toda tu familia incluida ¿Entendiste?

Rachel asintió entre lágrimas, en ese momento Jamal puso una tela sobre la boca y nariz de la chica quien quedó inconsciente. Los chicos la volvieron a vestir tal y como estaba. Al acabar, ya siendo aproximadamente la una y media de la mañana, Eric subió la chica inmóvil al auto y condujo hasta el lugar donde la encontraron. Rápidamente y con mucho cuidado de que nadie lo viera, la dejó tirada en unos arbustos y se largó de ahí sin dejar el mínimo rastro.

Leo y los demás se dispersaron, cada uno volvió a sus casas como si nada hubiera ocurrido, el joven estudiante de derecho llegó a su hogar, se quitó la ropa y se acostó a dormir completamente relajado sin nada que perturbara su mente.

A las tres de la mañana, la hora maldita para muchos, fue la hora en que dos policías que se encontraban patrullando se detuvieron cerca de donde estaba la inconsciente Rachel, uno de ellos se bajó de la motocicleta para orinar pero cuando se acercó a los arbustos y vio una figura humana se alarmó inmediatamente y llamó a su compañero.

POLICIA PARKER – ¡Ey! Connors ven aquí, creo que hay algo en estos arbustos.

POLICIA CONNORS – No me estés jodiendo, no quiero ver tu horrible pene otra vez Parker.

POLICIA PARKER – ¡Esto es serio hombre! Apunta tu maldita linterna aquí rápido.

El otro policía entiende que su compañero habla en serio y rápidamente saca su linterna para ver que hay en los arbustos. Ambos hombres se sorprenden al ver la chica y la herida en su boca.

POLICIA CONNORS – ¿Está muerta?

POLICIA PARKER – No, aún respira, llama una ambulancia rápido. Dijo el policía.

Así que llaman una ambulancia y se quedan con Rachel hasta que esta llegue y pueda auxiliarla.

Rachel despierta a la mañana siguiente en el hospital junto a sus padres quienes están extremadamente angustiados. El doctor le pregunta a Rachel.

DOCTOR – ¿Recuerdas que pasó anoche?

RACHEL – Si señor. Exclama la joven y le cuenta todo lo que recuerda a detalle.

Sus padres le insisten en que debe poner una demanda pero la chica está traumatizada por las palabras de Jamal así que les ruega a sus padres que por favor no hagan nada. Ambos entienden que la situación ya fue suficientemente traumática y deciden respetar su decisión.

El doctor le da orden de salida a la joven no sin antes dejarle revisiones por psicología periódicamente.

Con lo que no contaban Rachel ni sus padres es que los policías interrogarían al doctor y este les contaría absolutamente todo y estos a su vez llevarían la información a su jefatura de policía de donde migraría a los noticiarios de la ciudad. Convirtiéndose en la primicia del fin de semana.

– "CHICA ES VIOLADA Y ULTRAJADA POR BANDA DE CINCO HOMBRES QUE SIGUEN A LA FUGA". Titulaban las noticias del medio día que eran vistas en todos los hogares de la ciudad, incluido el de Leo quien veía la tv junto a sus padres. Al ver esta noticia la piel del joven palideció y gotas de sudor empezaron a recorrer desde su frente, su padre lo miró y le preguntó.

PADRE DE LEO – ¿Pasa algo Leo?