Capitulo 7

595 94 2
                                    

Parpadeé cuando Off desapareció por la acera. No sabía nada de volver a coser un botón en un pantalón. ¿Quizás mi hermana sabía? Mire alrededor del vestíbulo en el escritorio, el guardia de seguridad me dio un encogimiento de hombros.

¿Qué es lo que acaba de pasar? Me frote la cara cuando el usual resplandor después del orgasmo se desvaneció, dejándome extrañamente ansioso.

Volvió a mirar hacia el elevador el botón que había quitado de los pantalones de Off estaba en la esquina me agache y lo agarre no parecía gran cosa era el botón gris de un pantalón de vestir, pero por alguna razón, se sintió pesado como una piedra cuando lo meti en el bolsillo.

A la mañana siguiente me encontraba en casa me en encontraba sentado en el pequeño comedor del apartamento de mis padres en Bangkok, me encontraba con mi hermana Pim, ella estaba haciendo unos crepe para desayunar.

—Vale, ¿qué pasa, Gun? Has estado deprimido desde que llegaste a casa esta mañana —dijo Pim, deslizando un crepe perfectamente enrollado frente a mi— Hice esto para animarte. Cómetelo y dime si es basura.

—No los hiciste para animarme. Los hiciste porque te harán la prueba el lunes. —Mi estómago retumbó, pero no tenía ganas de comer.

Siempre venia los sábados, cuando Pim no tenía clases. Hoy mis padres estaban visitando a sus parientes en Chiang Mai, así que sólo estábamos Pim y yo gire el botón que había salvado del encuentro en el elevador entre mis dedos, luego me forcé a detenerme y saque la mano de mi bolsillo. Era sólo un botón estúpido, ¿verdad?.

—Come —dijo ella, dándome una mirada de muerte que me daba cuando quería sacar información.

—Está bien, está bien se ve delicioso —dije, levantando el tenedor.

Sabía que no debía negarme a probar la última creación de mi hermana le gustaba probar su trabajo en la familia antes de tener que recrear las recetas en la escuela culinaria.

Normalmente me gustaba ser su conejillo de indias, pero hoy no estaba de humor cortó el crepe, y luego gemí cuando la dulce confección golpeó mis papilas gustativas.

—Vale, wow.

—¿Wow bueno, o wow malo? —preguntó Pim.

—¿Estás bromeando? Está delicioso —dije metiéndome otro bocado en la boca.

Tal vez si siguiera masticando no tendría que responder a sus preguntas sobre por qué estaba tan malhumorado.

—Bien con suerte esta vez sacaré una A —dijo deslizando una silla y sentándose cruzó las manos y apoyó los codos sobre la mesa —Ahora, dime qué tiene tus bragas en un giro tan grande.

La mire con enojo y me baje mi vista al plato

—No sé de qué estás hablando solo uso calzoncillos. — Meti otro mordisco grande en mi boca.

—¡Demasiada información! No necesitaba saber eso. —Ella me miró con ira —Has estado suspirando todo el tiempo que he estado cocinando, Gun. Es molesto. —Se recostó en su silla —Ya suéltalo ¿Qué está pasando?

Agite la cabeza, aún masticando. Señale a mi boca, imitando una incapacidad para hablar.

—Oh, por favor. Como si nunca hubieras hablado con la boca llena —dijo Pim burlonamente
—Normalmente cuando no me hablas es porque estás avergonzado.

Mi cara se calentó mientras pensaba en Off, otra vez no había podido dormir anoche hasta que me masturbe con el recuerdo de la deliciosa polla del hombre alto en mi boca.

—No —dije, cortando otro trozo de crepe —No estoy hablando de eso.

—¡Oh, oh! ¿Tuviste sexo, hermano mayor? —cantó Pin dando saltitos en la silla —¡Tu cara está positivamente resplandeciente!

Senti que como se me arrugaban las pelotas al pensar en que mi hermana sabía algo sobre mi vida sexual.

—¡No es asunto tuyo! —La apunte con el tenedor.

—Es asunto mío si vas a venir aquí y actuar como si alguien hubiera atropellado a tu cachorro. —Ella me sonrió —Sabes que seguiré regañándote hasta que me cuentes todo.

Termine de masticar el último bocado de crepe, y luego aparte el plato resignado.

—Bien tu te lo buscaste. —Movi los hombros, tratando de desechar la tensión acumulada en mi cuello— Conocí a este tipo en el elevador anoche nos quedamos atascados juntos cuando se cortó la luz. — me encogí de hombros —Hablamos y Fin. —Miró hacia otro lado para que mi hermana no viera que le ocultaba información.

—¿Hablaste? Sí, no. No te creo —dijo Pim, frunciendo los labios —No estarías tan retorcido si todo lo que hubieras hecho fuera hablar —Se inclinó hacia delante acedándose a mi rostro —¿Te enrollaste? ¿Conseguiste su número?

—Pim, por favor. Sólo déjalo, ¿de acuerdo? —Gemi teatralmente mientras ponía los ojos en blanco, Pim agitó la cabeza.

—Uh... ¿Por qué estás siendo tan raro al respecto? Tienes 25 años. Ya era hora que conocieras a alguien.

—Tiene 32 años, ¿vale? Y rico. Y caliente. Y no conseguí su número —dije finalmente podía decir por su expresión que ella no iba a dejarlo pasar
— Dijo que estaría en contacto, pero nuestros dos teléfonos estaban muertos, así que no podíamos intercambiar números. Ugh. —Me meti las manos por el pelo— Y luego su asistente lo arrastró a una reunión para cenar fue incómodo y raro. —Hice una pausa recordando el momento —¿He mencionado incómodo? —suspire— No sé si quiero perseguir algo con él no nos movemos exactamente en los mismos círculos.

—Espera, ¿te enrollaste con un hombre mayor y rico? Wow. —Los ojos de Pim brillaron— No lo vi venir.

—Sí, bueno, no importa probablemente nunca lo volveré a ver — murmure asi era como solían ser mis contactos.

Nunca había conocido a un tipo que estuviera interesado en algo más que una paja tan pronto como se enteraban que era un ingeniero empollón, la mayoría de los chicos iban en la dirección opuesta.

—¿Por qué dirías eso? Tienes mucho que ofrecer a un hombre. Eres inteligente, tienes un buen trabajo —comenzó Pim, pero se detuvo cuando me rei

—Pim, es el dueño del edificio en el que trabajo. —No sabía cómo decirlo sin rodeos. Off Jumpol estaba fuera de mi alcance— No es que le importe si tengo un buen trabajo o no.

—Espera. —Mi hermana le guiñó el ojo —Sé que dijiste que era rico, pero creí que te referías a que era una persona rica normal, no un millonario.

—Sí, bueno. —Hice una mueca pensando en mis siguientes palabras —Es un millonario y caliente como el infierno es una combinación perturbadora.

Después de una larga pausa, mi hermana agitó la cabeza.

—Bueno, al menos puedes decir que una vez te enganchaste en un elevador en esas tontas encuestas en línea. Eso tiene que contar para algo. —Se levantó y empezó a recoger los platos sucios
—Quiero decir, obtuve 30 puntos en uno de esos concursos porque una vez me enganché en un avión.

—¡Dios, Pim! No. Sólo detente ahora mismo —dije, poniendo las manos sobre mis oídos —No quiero oír hablar de tus contactos y también, ¿qué haces teniendo conexiones? Eres demasiado joven para salir con alguien.

—Hermano, tengo 22, no 12. —Mi hermana se rió mientras ponía los platos en el fregadero, luego se acercó y me dio un abrazo de esos que te decían que todo estaría bien —Ten un poco de fe Gun. No tienes idea de lo que podría pasar.

—Eres muy optimista, hermanita. —Pim solo sonrio.

—Porque sé que eres un gran tipo tal vez el Sr. Amigo Rico te sorprenda.

—Mmm... —dije, no quería contradecirla, pero no pude reunir las mismas esperanzas que ella tenía para mi futuro amoroso.

Tenía una historia demasiado larga de rarezas y falta de citas como para creer que Off Jumpol me buscara.

O que simplemente de verdad estuviera un poco interesado en mi...

---------------------------------------------------------
Hola, espero les gustara este episodio, sentir el apoyo y esperanzas de Pim...

Amor, dentro de un cubo - OffGunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora