Runaway | 𝐒𝐮𝐧𝐠𝐫𝐞𝐧

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—Seguro que no quieres que te lleve?—Preguntó.

—Me gusta caminar, recuerdas?

—Gracias Jisung, realmente necesitaba..

—Solo no digas nada..—Dijo poniendo una mano en su hombro y dando un apretón.

Renjun sonrió y asintió.

—Después de todo pasamos una buena tarde no crees? Incluso comiste galletas, me siento felíz. ¿Quieres que te diga algo? Cuando te traje aquí lo hice con otra mentalidad, tenía en mente otras cosas...—Deshacerse de él, por supuesto—pero, realmente eres increíble..

—Qué dices—Sonrió.

Y ese silencio incómodo una vez más llegó, tal cuál en la pista de hielo.

—Bueno.—Dijeron ambos al unísono y Jisung sorbió su nariz inquieto.

—Eh... me voy, ahora sí. Cuídate Renjun.

—Lo mismo.

Y se fué.

Renjun cerró la puerta y se recargó contra ella un momento. Puso una mano en su frente levantando su cabello y suspiró.

—Por Dios del cielo Renjun que hiciste.—Murmuró.

La puerta sonó contra él y de un brinco se apartó, tomó aire y acomodó de nuevo su cabello para abrir.

—Te dejaste...

No terminó de hablar al ver a Jaemin ahí parado. Mirándolo serio masticando algún chicle.

—No me dejé nada, y al parecer este tampoco.—Dijo entrando—Se acaba de ir.—Giró para mirarlo—Dime algo Renjun, tienes algo con ese? No confías en mi para decirlo? Es eso?

—¿Qué? No—Respondió ofendido y cerró la puerta—Qué estas diciendo, no me gustan los hombres.

—No me gustan los hombres, no me gustan los hombres—Se burló.—Siempre es lo mismo, estos días has estado muy extraño, qué tienes en la cabeza eh? Te conozco bien.

—No es nada..

—Y una vez más, lo mismo. ¿No me vas a decir? Prefieres que lo adivine yo, es eso.—Tomó aire y asintió poniendo sus manos en su cintura—Muy bien, entonces dime, te estás dejando follar por ese?

—¡No! ¡No Jaemin! Mira lo que estás diciendo, debes haber enloquecido. Juro que no es nada de eso, no tengo que ver con él en ese sentido, yo solo...

—¡Pero vuelves a quedarte en silencio! Solo dime, es que ya no confías en mi?

Renjun caminó hasta el otro y tomó sus manos.

—No juegues con eso.—Su tono cambió a uno más tranquilo—Sabes que solo confío en ti en este mundo. Eres el único que sabe todo...

—Pero eso era antes, no? Que te pasa en esa cabecita que no me quieres decir.—Utilizó el mismo tono—Renjun... yo te acepto como seas, no tengas vergüenza.

—Na Jaemin en serio no es eso—Se comenzó a reír y soltó sus manos para ir a sentarse en el sofá, seguido por el coreano.

—Me vas a explicar o no?

Renjun sonrió.

—Vamos.. no te dije que hoy quería dormir contigo? Vamos a tu casa, te lo contaré en el camino.

🐛

—Es que es bastante obvio, pero eres bruto, ¿cómo puedes saberlo?