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"Mamá iré a dormir temprano, mañana hablamos si? Todo está bien así que no te tienes que preocupar, Dios te bendiga"
  
Y listo.

Renjun envió el mensaje exitosamente mientras iba en el auto, se sentía culpable, pero ya que iba a ir no quería tener problemas.

Jaemin estaba sentado en el asiento junto a Jeno, quién manejaba aquella camioneta desgastada. Pero que sin embargo andaba bastante bien y rápido.

Y Renjun... bueno. El no tenía asiento alguno, iba en la parte de atrás de la camioneta solo. El pequeño espacio no estaba sucio, y eso era un alivio porque él odiaba la suciedad.

Ah, tan cómodo..

Pensó cerrando los ojos con tranquilidad y respirando aquel aire puro de plena noche. Antes de apagar su celular eran sólo las 10:34 p.m.

Nunca pensó que podría disfrutar de esto. De este tipo de cosas. Jaemin había pasado años invitándolo a salir con sus amigos y a todas las actividades. Pero siempre se mantuvo firme y negó a toda costa.

Al llegar a esta etapa en la de tu vida donde solo tienes 20 años y no tienes ninguna anécdota graciosa que contar, o de alguna salida con tus amigos. Bueno eso es lamentable.

La vida de Renjun lo era. ¿Por cuánto tiempo se iba a mentir?

Ahora no importaba eso, de cualquier forma, solo escuchaba la risita de Jaemin desde dentro y el sonido del viento.

Muy calmante.

Solo eran él, y este momento, si no contamos la caja de cervezas vacías que tenía frente a él pero con olor a alcohol, de verdad lo estaba disfrutando.

Y vaya nunca se montó tras una camioneta, vió eso en una película, los jóvenes ahí parecían divertirse y gritaban cosas de la emoción.

Pero ah, ¿cuántas personas podían subirse aquí atrás? Cómo unas seis, si solo se sentaban en tres de un lado y tres de otro, pero en el centro también había espacio.

El auto se detuvo, y sus pensamientos también. Jeno y Jaemin se bajaron del auto y dieron la vuelta para llegar hasta el chino.

—Caminaremos desde aquí, solo es un poco.—Dijo el querido acompañante de Jae.

—¿Porqué no podemos ir en la camioneta hasta la fiesta?

—Renjun esta clase de fiestas suelen estar llenos de carros y también muchas personas.. por precaución de algún robo o algo así lo dejaremos aquí si? Y bueno ahora Jeno y yo iremos un momento a hacer una cosa pero solo tienes que esperar aquí.

—¿Porqué siento que no es nada de eso? Será porque no soy estúpido—Se bajó de la camioneta también—Estamos en el medio de la carretera y falta al menos un kilómetro para ver casas de nuevo, por lo que la fiesta no es por aquí aún, así que... Jaemin, y compañía—Miró al más alto de ellos—Qué pasa aquí?

Jaemin miró a Jeno con pena y dejó caer sus hombros.

—Ven con nosotros—Renjun sonrió—¡Pero escúchame mocoso! No hagas preguntas, si no quería que vinieras es porque sé perfectamente cómo eres.

El chino torció los ojos y los siguió un poco más adelante hasta que se detuvieron.

—A veces, por aquí pasan patrullas, ya que las mejores fiestas se dan por acá, pero también los mejores problemas. Por eso mejor tomamos la precaución de hacer esto aquí.

Habló el chico con aquel resaltante lunar bajo su ojo derecho.

—¿Qué es exactamente lo que van a hacer? ¿Droga?—Dijo sarcásticamente con una risita. Porque seguro no era nada tan malo, pero tampoco tenía nada en mente.

Runaway | 𝐒𝐮𝐧𝐠𝐫𝐞𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora