1.- Conversación

852 68 32
                                    

Un pensamiento, solo eso se necesito para que todo empezará, después de todo para crear una situación se necesitaba a una sola persona ¿verdad?
 
Era una madrugada en los dormitorios de UA, más específicamente en la habitación de izuku midoriya que en este preciso momento tiene insomnio y como norma de vida se puso analizar su existencia y de paso la de los demás.
 
Un recuerdo paso por su mente y de ese recuerdo nació un pensamiento, luego otro y otro y así sucesivamente.

La cuestión del momento o la razón de su insomnio era tan absurda que ni él mismo se creía que no podía dormir por eso, era ridículo ¿cierto?

Intentando eliminar sus pensamientos agobiantes, se intentaba decir así mismo que no era importante, pero ¡Dios como eso no iba a ser importante! Por más que intentará no sobrepasar las cosas menos lo lograba, ¿Como rayos no pensar en lo que dijo? cada segundo se lamenta más haber escuchado esa conversación.

No lo juzguen no lo había hecho apropósito, solo pasaba por ahí y sin querer escucho más de lo debido.

¿Tal vez escucho mal? muy poco probable, pero igual tenia esperanza que fuera eso o ¿Tal vez malinterpreto lo que dijeron? si, si, si, seguro fue eso, siempre pasa ¿verdad? ¡¿verdad?! cada segundo se estresa más, sintió como sus ojos se humedecían, se negaba a llora, no, él no podía llorar por eso, era una tontería, bueno quería convencerse a si mismo de eso.

Sin embargo eso no quitaba el dolor de esa noticia, él podía perfectamente preguntar y sacarse las dudas de la mente, pero tenia miedo ¿irónico no? él izuku midoriya que no duda ni tiembla en salvar alguien de un villano o situación peligrosa tenia miedo de una situación social, era patético, pero estaba pasando lamentablemente.

El agobio y ansiedad que sentía solo crecía, quería parar ¡¿Maldita sea como no puedo controlar ni sus pensamientos?! ¡¿por qué no puede parar?! Él quiere parar, él quiere dormí, él quiere no sobre pensar, él no quiere tener inseguridades, pero lamentablemente el mundo es injusto y casi nunca te da lo que quieres.

Sin poder evitarlo ni retrasarlo más una gota salada fue expulsada de sus preciosos ojos esmeralda, a veces odiaba lo fácil que era hacerlo llorar.

Lloro, lloro hasta ya no poder más, lloro hasta sacar todo el agobio por sus ojos, lloro hasta sentir que no había más agua dentro de él.

Callo rendido ante el cansancio sin poder dar más, mas bien sin querer dar más.

Al día siguiente despertó con unas grandes bolsas oscuras debajo de sus ojos, denominadas ojeras, además de eso los tenía inflamados y levemente rojos por las lágrimas perdidas en la noche anterior

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al día siguiente despertó con unas grandes bolsas oscuras debajo de sus ojos, denominadas ojeras, además de eso los tenía inflamados y levemente rojos por las lágrimas perdidas en la noche anterior.

Se baño, vistió y desayuno, el día lamentablemente acababa de empezar.

Se dispuso a ir a su salón y ese sentimiento volvió, volvió al ver a esas dos personas enfrente de él, la ansiedad y el agobio regreso a su interior y creció, creció y abarco todo su cuerpo en menos tiempo del que le gustaría admitir.

AgobioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora