Caminaba de la mano junto a mí novio para ir al piso de su hermano, era navidad y el hermano de mí novio había dicho que nos invitaba a cenar a su piso, luego de que Mike me insistiera por toda la semana acepté, así que aquí estábamos.
Milagros: Ahg, sabes que odio socializar, podríamos quedarnos en nuestro departamento y ver películas. —me queje hacia mí novio.
Mike: Lo sé, pero quiero que conozcas a mí hermano, llevamos más de un año y jamás has conocido a mí familia. —se defendió mientras paraba frente a mí y agarraba mí cara entre sus manos.
Milagros: Pero no es obligatorio conocer a la familia de tu pareja. —susurre viéndolo a los ojos.
Mike: ¿Qué te asusta?. —pregunto analizando bien mí actitud.
Milagros: Que no les caiga bien, se que solo estará tu hermano, pero... no lo sé, solo me da terror que no le vaya a caer bien. —respondí con sinceridad.
Mike: Imposible, le caerás muy bien, es más sé que serán grandes amigos, tienen los mismos gustos y estudian lo mismo. —dijo sonriéndome con tranquilidad.
Eso me gustaba de él, podría ponerse serio si el momento lo ameritaba o podría bromear en otros momentos.
Milagros: Está bien. —murmure en voz baja.
Mike: Esa es mí chica. —dijo con una sonrisa para luego dejar un corto beso sobre mis labios.
Continuamos nuestro camino hacia el que sería el departamento de mí cuñado, esperaba que todo salga bien.
[...]
Y si salió bien, Jack era muy buena onda y gracioso, me había hecho sentir cómoda en todo momento, también estaban su novia Jennifer y otros inquilinos con quienes me lleve muy bien.
Jack: ¿Película favorita?. —preguntó mientras bebía un trago de cerveza.
Milagros: El extraño mundo de Jack y Harry Potter las reliquias de la muerte parte 2. —respondí sin pensarlo dos veces. —Ahora las tuyas.
Jack: Tu si sabes que son buenas películas. —sonrió antes de contestar. —El rey león, sin pensarlo.
Milagros: Es buena, pero no más que El extraño mundo de Jack. —dije haciendo que se ofrenda.
Jack: Oh no es por ahí, Milena. —dijo cambiándome el nombre nuevamente.
Milagros: Que es Milagros, Jason, pensé que ya te lo acordabas. —dije con diversión.
Ambos compartimos una mirada antes de empezar a reírnos como si hubiésemos contado el mejor chiste del mundo.
Mike: Creo que ya es hora de irnos, haz tomado un poco de más. —dijo levantándose del sillón.
Milagros: Solo he tomado dos cervezas, no es mucho y me la estoy pasando bien. —dije confundida por su actitud.
Mike: Ya es tarde, Milagros. —dijo haciéndome sentir rara al decir mí nombre completo y no alguno de sus apodos
Jack: Déjala, la estamos pasando bien. —dijo igual de confundido que yo.
Jennifer: Creo que nosotros debemos ir a dormir ya, Ross. —dijo haciendo que el nombrado la mire con confusión.
Jack: ¿Ross? ¿Por qué me llamas así?. —ladeo la cabeza ante la actitud de la chica.
Todos quedamos en silencio, solo se escuchaban los autos pasando por afuera en la calle y los fuegos artificiales anunciando la navidad.
Milagros: Creo que es mejor que nosotros nos vayamos yendo, la pasé muy bien, gracias por hacerme sentir cómoda. —dije agarrando mí bolso
Will: Gracias por haber aceptado, espero volver a verte. —sonrió con amabilidad.
Sonreí hacia todos y mire alrededor, Mike ya había abandonado el piso, suspiré y salí de la sala hacia la salida.
[...]
Llegué al departamento que compartía con mí novio pero no estaba por ningún lado.
No entendía su comportamiento, primero parecía querer que me lleve bien con su hermano y luego se enojaba porque me llevo bien con él ,¿Qué le pasaba? .
No me iba a comer la cabeza por eso, así que me cambié y me acosté con la laptop a ver una película, empecé a buscar clásicos de navidad y luego me hice unas palomitas de maíz.
A las horas se escuchó la puerta del departamento siendo abierta, me levanté para ir a ver si Mike había llegado, si era él, estaba tambaleante caminando hacia nuestra habitación.
Milagros: Joder, ¿Qué haz tomado?. —pregunté caminando hacia él para poder ayudarlo.
Mike: No me toques. —dijo arrastrando la voz, cuando intenté tocar su brazo.
Milagros: ¿Qué pasa?, Te comportas como un idiota. —preguntó harta de su actitud.
Mike: Sorpresa, así soy, me conociste así. —dijo algo alterado.
Milagros: No sé porque carajos te comportas así, pero no estoy para aguantar estos comportamientos. —dije dándome vuelta para ir a la habitación.
Mike: ¡No me des la espalda!. —grito haciendo que me asusté.
Milagros: No te quiero ver por el resto de lo que quedan de las festividades. —dije yendo hacia la habitación para hacer mí maleta.
Amaba a Mike, pero no dejaría que nuestra relación se volviera tóxica por algo que no sabía que lo causaba.
Al salir él estaba acostado sobre el sillón de la sala, deje una carta frente a él y salí de ahí.
No podía ser una peor navidad que está.
