56. Mason Stevens

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Mamá estaba muerta, papá estaba muerto... Camille estaba muerta, los habíamos matado y no había vuelta atrás.

Lydie: Lo hemos matado... hemos matado a Camille. —dije anonadada viendo el pequeño cuerpo de mí hermana menor.

Fleur: Lydie, necesito que no pierdas el control de tus emociones ahora. —pidió con voz firme y sin una pizca de empatía.

...: ¿Qué le pasa?. —escuché que le preguntaba uno de los chicos que nos habían ayudado.

Fleur: Pierde el sentido de sus emociones entrando a una especie de shock dónde no es consciente de lo que hace. —explicó con voz serena como si hubiera practicado eso por años.

...: Interesante. —susurró el chico de ojos diferentes.

Mí vista seguía perdida sobre la sangre de mis manos y el cuerpo de nuestra familia, sabía que se lo merecían, nuestro padre había abusado de nosotras desde pequeñas,Fleur había desarrollado un trastorno que impedía que recordará, pero yo no, luego de un abuso los recuerdos quedaban en mí mente junto a la sensación de asquerosidad en mí cuerpo.

También recibía abusos cuando evitaba la mayor veces posibles que no le hiciera lo mismo a Fleur y su otra personalidad no aguante lo que ella evitaba.

Desarrollé un extraño trastorno que hacía que mis emociones se descontrolan y pierda el sentido de ellas, por eso nunca había logrado entenderlas y preferí ignorarlas.

Lydie: Llegarán aquí en pocos minutos, debes hacer que Fleur regresé. —dije despejando mí mente.

Fleur: ¿Qué hay de ti?, ¿Puedes con esto?. —cuestiono dudosa.

Sabía que no dudaría en asesinarme si dudaba de esto y quedar ella como la única sobreviviente.

Lydie: Claro que puedo, ahora quiero a mí hermana devuelta, princesa roja. —dije de forma amenazante.

Tenía una gran influencia sobre Fleur y su otra personalidad, creo que era porque más de una vez había salvado a la princesa roja de un abusó de mí padre.

Fleur: Iré a la habitación. —dije asintiendo con la cabeza, yéndose hacia la habitación de arriba.

Cuando ella desapareció por el pasillo me quedé sola con los tres hombres, conocía a Adam, era el ex novio obsesionado con mí hermana, a los otros dos no los conocía

Lydie: ¿Quién carajos son ustedes?. —pregunte viendo al de ojos grises y el otro de heterocromía.

...: Pierce Ferguson, ya me tengo que ir a la comisaría para hacerme cargo del caso. —se presentó antes de irse

...: Mason Stevens, para servirte bonita. —dijo mordiéndose el labio inferior viéndome de arriba a abajo.

Lydie: Necesito que me apuñales dónde no pueda morirme, solo una lastimada. —dije pasándole el cuchillo.

Adam: ¡¿Qué?! ¡¿Estás loca?!. —exclamó el castaño.

Lydie: Acabó de asesinar a mis padres y hermana, ¿Tú qué crees?. —ironice, sacando una carcajada del otro chico

Mason: ¿En serio quieres que lo haga?. —pregunto viéndome con una sonrisa de lado.

Lydie: Si —afirme convencida —Tu Adam harás como si llegaste antes de la segunda puñalada y cálculo que en unos minutos vendrá la policía así que rápido.

Mason me miró con cierto brillo de diversión en sus ojos y se acercó hacia mí.

Mason: Esto dolerá, bonita. —susurro a mí oído.

Lydie: Entonces hazme pensar en otra cosa. —dije en voz baja con los ojos cerrados.

Al instante sentí sus labios sobre los míos y un dolor agudo en el estómago, abrí los ojos y solté un jadeo en sus labios, me separé de él y lo mire a los ojos, en ellos cierto brillo crecieron al verme adolorida.

Lydie: Carajo. —susurré en sus labios.

Mason: Te dije que dolería. —susurro con una sonrisa.

Adam: Ya vienen y Fleur está por bajar de las escaleras. —aviso el castaño haciendo que nos separemos.

El chico quitó el cuchillo de forma lenta haciéndome jadear del dolor, y empezamos el show, me desmayé por el dolor, pero antes de mí cuerpo tocar el suelo mí golpe fue amortiguado.

[...]

El plan salió a la perfección aunque no contaba con que mis abuelos internen a Fleur en un centro psiquiátrico.
Mí manipulación y ayuda de Pierce habían hecho que me dejaran fuera del caso y solo declaré una vez.

Soy una persona que no controla sus emociones y eso hizo que no me preocupe demasiado por Fleur, pero cuando Pierce vino a mí contándome su plan, sentía que le debía algo por hacer que me dejen fuera de toda la mierda de la investigación, así que acepte mí parte y ahora aquí estaba intentando convencer a Mason que ayude a los chicos a sacar a mí hermana del psiquiátrico.

Mason: Bonita, que sorpresa verte por aquí. —dijo viéndome con una sonrisa de lado que me hizo rodar los ojos.

Lydie: Te llamé y no contestaste. —reclame con el ceño fruncido entrando sin invitación.

Mason: Por algo será, no quieras convencerme de entrar a eso del plan de mí hermano adoptivo. —dijo cerrando la puerta.

Lydie: ¿Por qué no? Será divertido, al final habrá una masacre y un viaje, ¿Qué más quieres?. —pregunté caminando hacia él de forma lenta.

Mason: ¿Estás de acuerdo con todo eso?. —pregunto analizando mí comportamiento.

Lydie: Claro, no me importan esas personas y solo quiero pagarle un favor a Pierce. —respondí encogiéndome de hombros

Mason: Pero yo no gano nada ahí. —dijo de forma obvia.

Lydie: ¿Quién dijo que no?. —alce las cejas.

Me acerque a él besándolo rápidamente sin dejar que diga algo, intentaba manipularlo desde el punto del sexo, quizás con un psicópata no funciona, pero no pierdo nada en intentarlo.

Lydie: Puedes tener lo que desees. —susurre separándome de él, baje mis besos hacia su mandíbula y cuello. —Solo tienes que ayudar a Adam y Pierce. —susurre a su oído mordiendo el lóbulo de su oreja.

Mason: No intentes manipularme, no puedes. —dijo alejándose de mí.

Lydie: ¿Quién dijo que quiero manipularte?. —cuestione haciéndome la inocente.

Mason: Soy un psicópata, bonita, conozco tu comportamiento. —dijo sonriendo con orgullo de el mismo

Lydie: ¿Sabes?, Para ser un psicópata no eres tan listo. —dije caminando al rededor de él. —¿Crees que no he notado que me sigues desde hace unos meses? No eres muy discreto, te vi el día que acompañé a Fleur al psicólogo y luego te seguí viendo cuando iba al parque con Camille, en la tienda donde compramos las cosas para matar a mis padres y muchas veces más.

»Se que no aceptaste ayudar a tu hermano y Pierce por nada, igual que se que aceptarás ayudarlos ahora, ¿Sabes por qué Mason?. —cuestione con una sonrisa frenando frente a él.

Mason: Ilumíname. —dijo con el semejante serio.

Lydie: Porque yo entraré al psiquiátrico y podría pasarme algo, se que no quieres eso, porque vi tu mirada aquella noche, no dejas que nada me pase. —sonreí al ver su reacción tensa al mencionar que estaría dentro.

Mason: No te confundas, bonita, que no deje que te pase algo no significa que te esté cuidando, significa que es porque yo quiero hacerlo. —dijo poniendo su mano en mí estómago y apretando los puntos de la cirugía que había tenido.

Lydie: Entonces hazlo, sabes que no me importará morir y me gusta el dolor. —dije haciendo una mueca al sentir como mí remera se empezaba a ensuciar con sangre porque se habían abierto los puntos.

Mason: Linda, no te mataré, ¿De que me servirías muerta?. —preguntó agarrando mí cara con sus manos —Dime, Lydie, ¿Cómo es el plan de Adam?.

Sonreí al lograr mí cometido y saber que aunque él no lo acepte había caído en mí trampa, y lo tenía bajo mí poder.

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