Salvando al Protagonista Temp 2

Cap 15 - Un sueño, un sacrificio ³

Afortunadamente los superiores de la academia teniendo en cuenta la situación de la familia del joven estudiante, accedieron a dividir las ganancias del chico, siendo una parte enviada a su familia y otra a él. Sintiendo una ligereza en el alma, el cuerpo sentía todo lo contrario, pues trabajaba jornadas extras para obtener más ganancias y dirigirlas a casa.

Durante 350 días fue lo mismo, tan monótono y exhausto, finalmente le otorgaron un permiso especial de regresar a casa y volver hasta que sintiera que las cosas en el hogar estuvieran en orden. Los rasgos de lo que quedaba de niño se habían perdido, regresando a casa un joven adulto de edad; lleno de temor tocó la puerta de su casa, nadie abría, tocó nuevamente y seguía sin respuesta.
El alumno más tranquilo de la clase, había caído en un pánico total al no ser recibido, corriendo a la ventana de su hermana para asomarse, la encontraría completamente vacía...su cuerpo de paralizó, quedando unos segundos en blanco.

Una mudanza sonaba casi imposible, habían vivido en esa casa por generaciones hasta ellos; tiro sus maletas en la entrada corriendo a los lugares donde solía trabajar su madre, cantinas, bares, lugares de apuestas o zonas oscuras. Las pupilas pequeñas de Nicolás y su rostro pálido demostraban cuantas justificaciones le daba su cabeza de posibles sucesos.
Llegando a una cantina, entro sin pensar buscando a su madre quien a lo lejos estaba atendiendo una mesa, caminando hacia ella la sujeto de los hombros levantando la voz.

Nic: ¡¿Dónde está? ¿Dónde está Amary?!

– Podemos hablar de esto cuando termine de trabajar, estas asustando a los clientes, Nicolás.

Nic: Madre, estoy asustado, Amary no estaba en casa, ¿cómo se supone que me quede de brazos cruzados si no encuentro a mi hermana?

– ...vayamos afuera para hablar.

Ambos salieron al callejón a un costado del lugar para dialogar, más manos del chico temblaban mirando a su madre ansioso por saber de su pequeña hermana. Su madre sacó una pipa, encendiendo la y comenzando a fumar, calmando sus nervios.

– Hace unos meses los contactos de tu padre vinieron a recoger más dinero, lo que juntamos no parecía ser suficiente, pensé en entregarles la casa pero esa casa solo puede pasar a las personas que tengan el nombre familiar...me comentaron de otra forma pagar la deuda, entregando a Amary. Con esto la deuda ya ha sido terminada, Nicolás, no se nada de tu hermana pero ve esto como una oportunidad para tener una buena vida desde cero.

Nic: ¡¿Hiciste qué?! Todo nuestro esfuerzo por años por mantenerla viva, el sacrificio de mi padre y el nuestro lo acabas de hacer en vano.

– Estaba cansada, agotada de tener que lidiar con todo sobre mis hombros, esa niña ni siquiera hacía nada por nosotros, debe valerse por si misma.

Nic: Entregaba las mejores sonrisas, no eres la única cansada pero Amary era nuestra fuerza. Y lo dices como si no fuera tu hija.

– Estaba feliz por tener una niña, sin embargo, cuando me dieron su condición quería deshacerme de ella, tu padre y su terquedad fue lo que hizo que siguiera con nosotros.

Nic: Es suficiente, iré a buscarla. Lo que pase de ahora en adelante con nosotros ya no te incluye a ti, así que a partir de ahora somos desconocidos.
Solo contesta algo, ¿a quiénes la entregaste?

– Fueron tres hombres de familias distintas, sus nombres los desconozco pero son los encargados del mercado negro. Se ubican en la parte trasera del teatro, ahí hacen subastas, ni pienses en reportar los ya que tienen influencias en los guardias.

Nic: Gracias por la información, aunque no tenía las intenciones de reportar los ni reportar a mi hermana como desaparecida.

Nicolás partió a la zona del teatro ocultando su identidad, realmente en la parte trasera todos ocultaban su identidad para evitar ser localizados. Buscando rastros de su hermana a los alrededores, parecía todo tan complicado, sin embargo fue pagando por información a aquellos que llevaran tiempo ahí, preguntando si nunca habían visto a una niña de cabellera verde y ojos amarillos.
Las primeras personas negaron, al igual que las segundas, las terceras mencionaban haber escuchado gritos en el almacén donde se guardaban las cosas, ubicado en el sótano. Llegando así hasta un hombre viejo en particular, quien había sido un cómplice lejano aquel día.

– Una joven, ¿verdad? Trabajo de distribuidor, una persona me habla, voy a donde me piden y subimos cosas pesadas para llevarlas a otro lugar. Hace 5 semanas me hablaron de aquí, querían mover unos muebles viejos, pero había uno que desprendía un olor extraño, venía con clavos sellado. Me pidieron deshacerme de ellos a las afueras del reino, cuando llegué al destino decidí quitarme las intrigas y abrirlo estaba el cuerpo de una jovencita con la misma descripción, me dio tristeza pero desconocía quien era, la dejé ahí.
Te puedo llevar para que puedas verificar si es ella, como te digo salió de aquí, tengo amigos trabajadores de aquí que te pueden dar más detalles pero primero tendrías que saber si es a quien buscas.

El chico decidió aceptar, esperaba que fuera otra persona y su hermana siguiera con vida en alguna parte tan siquiera encerrada. Ambos partieron en un carruaje de madera hasta las afueras donde había dejado los muebles aquel hombre, al llegar abrió dejando salir un olor insoportable que revolvía el estómago a cualquiera, no obstante, adentro estaba el cuerpo de la pequeña Amary, con signos de abuso físico y una expresión de dolor con los ojos secos abiertos, ese brillo hermoso de su rostro se había perdido por completo, así como una parte dentro de Nicolás se apagó.

– Lo lamento chico, soy incapaz de comprender tu dolor pero mis mayores fuerzas van para ti ahora.

Nic: Sabes el nombre de los responsables, necesito que me los des...

– Chico, entiendo que estés devastado pero ceder a la venganza no te traerá nada bueno, ellos son monstruos con apariencia humana que hacen toda clase de atrocidades por dinero y poder. Pondrás tu vida en peligro.

Nic: Mi razón de vivir se fue hace 5 semanas, ya no me queda nada que pueda perder. Si ellos son monstruos, con mayor razón me niego a permitirles andar libres por donde se les antoje, ¿quiénes serán los próximos? ¿Cuantas familias más tendrán que ser destruidas por dinero?

–  Si eso es lo que quieres, te ayudaré a crear una venganza contra ellos. Solo ten en cuenta que si cometes el mínimo error o dejas algún rastro, tu cabeza terminará rodando (este chico tiene una aura bastante pesada, casi a la de un asesino, sediento de sangre).

Nic: Aceptare las consecuencias de mis acciones, por ahora concentrémonos en planear como hacerlos sufrir, matarlos rápido no es opción. Por cierto, me llamo Nicolás, sin apellido, soy indigno de tenerlo.

– Ja, un gusto Nicolás, llámame Brucks, el humilde bastardo.

Así fue como inició una amistad con personalidades diferentes pero un objetivo en común, deshacerse de toda basura que pudiera dañar la imagen del reino, pudiera llamarse venganza o justicia a mano sucia.

— Pude haberle hecho caso a mi madre en ese entonces, dejar todo atrás y comenzar una nueva vida llena de gozo; desafortunadamente en ese momento estaba ciego de impotencia, odio, venganza, quería hacer justicia por mi mano aunque en la academia se me había enseñado que iba en contra de las leyes del reino. Si...para destruir monstruos se necesita de otro monstruo, me convertiría en algo mucho peor que ellos, sacrificando lo único que tenía para dar, mi humanidad.

Estaba consciente que Amary moriría a temprana edad debido a su enfermedad, como si este mundo fuera falso e injusto, pisoteo a la flor más pura que pudo tener y eso jamás lo perdonaré ni dejaré pasar por alto.

Fin del capítulo...