No Me Sueltes ~~( Jun y Tú)

JeongHan

Mi humor no podía estar peor, luego de enterarme que mí único amigo en esta condenada escuela iba hacer el "Encargado" de nuestro salón, (encargado de cagarme toda) que mí novio prácticamente me regaño por malcriada, también que tenía que compartir habitación con otras 3 chicas que no soporto (como todo en el salón). En realidad no me gusta estarme quejando, ya que no es culpa mía este tipo de cosas y realmente no tiene porque ser algo malo en sí, pero no estoy de mi mejor humor, así que odio todo en este momento.

Después de dejar las cosas en las habitaciones, y hacernos usar el uniforme de educación física, nos reunimos todos las clases en el patio, ya que empezarían esas actividades infernales que me fastidian, supongo que igual nos tienen que obligar hacer algo ¿No? Sí no, no sería un viaje de una escuela como la nuestra.  Nos dividieron por salón y empezaron con juegos competitivos tontos, que la mayoría parecía disfrutar, cómo hacerse una colita y evitar que el otro equipo tocará al último de la otra cola, no sé cómo se llama ese juego en realidad, de hacerse grupitos de un determinado número, el semáforo, y ese tipo de juegos para jugar en equipos, cosa que me aburría, aunque hubo uno que sí disfrute, bueno era como charadas pero tomando el tiempo, se suponía que el equipo que contestarás más en menos tiempo ganaba, sorprendentemente nuestra clase ganó, sólo ese juego por cierto.

Cuando al fin terminó, lo cual nos había tomado todo lo quedaba de la mañana, nos dieron un pequeño descanso antes del almuerzo, el cual aproveche para pasear con Jun por el lugar, esperando poder despejar un poco la mente.

No podíamos ir por allí a donde sea que quisiéramos, así que le pregunté a unos de los trabajadores del recinto un lugar seguro por dónde ir a caminar y luego lo pude confirmar con un encargado de otra clase, no iba a hablar con Jeonghan por el momento. Al final nos fuimos por un sendero que dirigía hacia un lago; caminábamos tranquilamente, le pedí a Jun que me hablará de un tema random sin relación a nada de lo que estaba pasando, y mientras más absurdo mejor, al final me habló sobre el por qué tenemos esa idea de los alienígenas eran verdes con forma humanoide y con cabezas enormes, solté una risa ligeramente ruidosa, seguido de una dulce mirada, no pudo ser mejor el tema de conversación.
Para mi sorpresa, fue una conversación animada, lanzamos ideas locas y yo tratando de hacerme la lista, diciendo que capaz fue en una película de ciencia ficción o algo así, pero realmente no tenía idea, me había tomado por sorpresa de lo que quería hablar.

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Bueno, no le voy a aburrir con lo que pasó el resto del día, así que les digo rápidamente que, luego de pasear con Jun un rato y divertirme con sus ocurrencias, fuimos a almorzar a un hermoso salón, con una gran variedad de comida, y luego seguimos haciendo actividades en competencia, como escalar un muro, saltando en piedras para pasar un río, jugar fútbol y voleibol, (en estás no participé) y otras más. Nos habían hecho hacer ejercicio todo el día prácticamente, así que naturalmente estábamos exhausto, nos dieron un refrigerio y luego nos ducharnos para la cena.

Debo mencionar de nuevo, que las instalaciones eran muy bonitas, como dije era como una combinación de una posada tradicional coreana y una más moderna. Me gustaba el hecho de que eran edificios de varios pisos con pasillos con decoración más tradicional, ascensores, y balcones en cada piso, también que las habitaciones eran para 4 personas, que no tenían camas y las puertas eran corredizas con un lindo diseño, lo que le daba ese lado tradicional y por el lado moderno, tenía aire acondicionado, calefacción en el suelo televisor y armarios. Había varios edificios y obviamente nos habían separado, chica en un lado y chico en otros, ya saben para evitar situaciones.

Nos estaban llamando para ir a cenar, y bueno no nos obligaron a usar el uniforme, por obvias razones, estaba haciendo calor así que para la cena, use un lindo vestido largo y ligero de flores, con unas mangas abultadas y sandalias. Como todos teníamos que ir a cenar a ese salón, decidí esperar a Jun en una banca cercana al edificio donde estaba su habitación; eran tan lindo, eran de montón de piedritas, con barreras de concretó en los costados, postes que iluminaban y árboles que enmarcaban.