No Me Sueltes ~~( Jun y Tú)

¿Cómo terminó? Pues...

Nos apartamos, él tomo uno de los anillos, mi mano y lo puso en mi dedo y enseguida tomo el otro y se lo colocó.

Yo sólo podía ver mi mano, no quiero ser presumida, pero realmente me gustaba mucho como se me veía.

— ¿Te gusta? Quería comprar un collar, porqué creí que los anillos eran demasiado —anuncio Jun, nervioso.

Lancé una pequeña risa— No, es perfecto, me encanta, se ven muy bien.

—Jeje, pero sucedió lo que pensé... Que te estaba pidiendo matrimonio.

— Bueno, realmente pensé eso, por un momento.

Me lanzó una sonrisa pícara.

Y me hizo sonrojar.

¡Dios! ¿Qué me estás haciendo este chico?

...~*...*~*...*~...

Estuvimos un rato más en el lugar, comimos los aperitivos que había preparado Jun, tomamos té y estuvimos caminando por el lugar. Tenía hermosas secciones llenas de flores, plantas hornamentales y un sin fin de especies de plantas hermosas e interesantes. Era un hermoso jardín, pero no más hermoso que estar con Jun (que cursi que se puso ¿No?) Luego de un tiempo tuvimos que irnos ya que, ya iban a cerrar.

— Entonces, ¿Te gustó lo que hice? — preguntó él, mientras salíamos del lugar tomados de la manos

— Pues claro que sí, fue perfecto — en realidad quería decir más que eso, pero sólo salió eso.

— Pues, tengo algo más, para que sea aún más perfecto.

— ¿Qué es? — le inquirir.

— No has comido hoy ¿Cierto?

— Comí eso pastelitos que me diste.

— ¿Y no quieres cenar? ¿Cenar conmigo? — sólo nos miramos y seguimos hasta que tomamos un taxi.

Yo sinceramente estaba algo cansada, y los tacones me estaban matando, pero quería ir con él así que solo lo seguí.

Tomamos un taxi y fuimos hasta un restaurante cercanos al jardín botánico.

Desde el exterior se podía ver, tenía esa pinta de ser lujoso, exclusivo y caro, pero muy caro. Y solo me basto con dar un paso dentro de el, para confirmar, se veía realmente bonito, su interior era impresionante, a pesar de ser como las 8 pm, adentro parecía medio día, de lo iluminado que estaba por dentro, tenia candelabros que parecían de cristal, y solo uno bastaba para iluminar perfectamente una sección del restaurante, pero, habían como 3 en el mismo lugar, que realmente me estaban cegando y muchos más ya que afuera no estaba tan iluminado, pero aún así, se sentía muy elegante, tenía una hermosa decoración, las sillas, las mesas, los manteles, todo era espectacular.
No soy mucho de juzgar o de simplemente opinar de los lugares como estos, a pesar que sí quisiera pude haber venido a un restaurante así, las veces que quisiera, ya saben por mí familia, y claro, sí lo hice, cuando aún vivían mis padres y... Bueno mi familia en general, sin embargo nunca me gustaron, realmente estaba agradecida de que Jun me trajera aquí, pero si me hubieran preguntado, le habría dicho que me llevará a un lugar más... Simple.

Como sea, de todas formas no le iba a pedir que nos fuéramos por qué no me estaba gustando, así que, aguante todo lo que tenía que decir y lo que pensaba (muy díficil) y sólo seguí a Jun, que su vez estaba siguiendo al recepcionista que nos dirigía a nuestra mesa.

...

Toda la noche fue una situación incómoda, sentía que no podía ser yo misma, que cualquier cosa que hiciera o dijera iba hacer juzgado por las otras personas del lugar, porque, enserio, les estaría escondiendo información, si no les dijera que todo en el lugar, veían lo que estaban haciendo los demás, y les estaría mintiendo, si les dijera que no nos voltearon a ver en nuestra dirección cada vez que dejaba la copa en la mesa y hacía un ruido, ¡ES ENSERIO!
Me sentía como en esa fiesta de la compañía, pero peor... ¡Mucho Peor! ¿Y Jun?

Pues, él estaba de los más normal, como si todo el tiempo lo hiciera, y lo peor es que tenía una sonrisa pegada en su rostro de los más feliz, y lo entiendo que se sintiera feliz, pero... ¿Acaso no se podía dar cuenta de mi situación? Tal vez no lo hizo, ya bueno..., Para ser tan ingenioso, no capta bien las indirectas, y tampoco podía captar la sonrisa incómoda que tuve todo el tiempo.
Sólo quería terminar de comer, e irme, ya no quería estar en ese lugar.

Después de un rato, muy insoportable por cierto, al fin, al fin pudimos irnos, ¿Pueden creer que nos quedamos una hora allí? ¡Una Hora! Ya me quería ir a los 15 minutos, sé que puedo parecer peor que una niña, pero enserio, si no le gusta ese tipo de atención, no soportaría ese tipo de ambiente. Y lo Jun se quería quedar más tiempo, pero pude convencerlo y nos fuimos rápidamente.

...

Debimos caminar unos centímetros hasta llegar hasta a una avenida para tomar un taxi, quería llegar desesperadamente a casa, quitarme estos tacones y este vestido.

Estaba caminando rápido y dejando desinteresadamente que mis zapatos emitieran sonido cada que daba un paso, dando a entender que ya me dolían mucho, me estaba adelantado y dejando a Jun, atrás.

— _______, ¡espérame! — Me reclamaba Jun.

Me di cuenta y me detuve para que me alcanzará— Lo siento — suspiré— es que ya quiero llegar a casa — dije fastidiada.

— Lo sé, yo también quiero ir a casa, ¿Estás bien?

¿Bien? Estaré bien cuando esté tomando ese dichoso taxi, ¿Por qué no podían pasar por donde nos encontramos? ¿Por qué teníamos que caminar hasta una avenida?
Estaba cansada, solo quería irme ¡Por Dios!

— Estoy bien, solo quiero irme Jun— dije entre dientes

— ¿Estás enojada? — se inclinó hacia a mí — ¿Qué pasa? — indagó preocupado.

— S-sólo, estoy cansada — balbucí y  en seguido, falló mi pies y se torció levemente, pero tanto como para romper mi postura y casi me caía.

Jun se percató rápidamente y me sostuvo, al igual que yo me aferre a él.
Ladeó la cabeza para mirarme, luego fijo su vista en mis zapatos.

— ¿Te duelen, verdad? — preguntó apenado

Asentí con la cabeza—No suelo usar y estuve parte del día con ellos, me duelen, sí — pensé que iba a llorar estúpidamente

— ¿Por qué no me dijiste antes?

— Está bien, Jun, puedo aguantar hasta que lleguemos.

— No, ¿Crees que voy a dejarte así? — lo mire con ojos comprensivos y tome su mano.

— Estoy bien — enfatizé — sólo vámonos ¿Sí? — le lancé una mirada suplicante

— Está bien, nos vamos. Pero...

Casi de inmediato que anunció, su cuerpo bajo, sentí como sus manos  pasaban por mis piernas y por mí cintura, ya no sentía el peso de mi cuerpo, sobre mis pies, y me estaba elevando. Me estaba cargando en sus brazos, fue tan repentino, que pude percatarme cuando ya tenía su rostro tan cerca del mío, como para besarlo.

— Ahora sí, vámonos.

💙🌙💙