《44.

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—Kim Jungwoo, ¿jura usted decir toda la verdad y nada más que la verdad ante el juzgado siendo consciente de su posición y de la situación en la que está?

—Lo juro.

Jungwoo baja la mano con la que juro y se acomoda una vez más en su asiento. Claramente está nervioso.

—¿Qué relación tiene con mi cliente?

—Soy doctor de su hijo y últimamente podría decirse que somos cercanos, no tenemos mucho contacto por mi apretada agenda y viceversa, pero ocasionalmente hablamos.

—¿Desde cuando atiende a Xyān Wong?

—La primera vez que lo atendí tenía tres meses y a partir de ahí yo me hago cargo de sus citas mensuales y las veces que enferma. Todo esto tiene siete meses.

—¿Usted es un médico certificado?

—Sí, mi cédula profesional está escrita en la parte superior izquierda de los reportes médicos.

Jungwoo señala el folder que el abogado de Yukhei tiene en las manos.

Se le ve nervioso, pero al mismo tiempo, se le ve con determinación.

—¿Podría decirnos en qué situación se encontraba Xyān la primera vez que le atendió y a qué se debió?

—Bueno, eso fue hace siete meses, eran alrededor de las cuatro de la madrugada y Yukhei llegó con el bebé en brazos alegando que tenía mucha fiebre y vómito. En el expediente que le di, puede ver que se anotó todo lo que Xyān presentó; el bebé llegó con una infección vírica, estaba muy bajo de peso para un bebé de su edad por tres kilogramos, sus defensas eran muy bajas. Ésto fue debido a la exposición a cambio de temperaturas tan bruscas, la exposición tan continúa al brusco ambiente de ese momento y sin cuidados.

Por el monitor, se mostró el expediente médico de la primera visita y lo que había contado el médico, en efecto, era verídico.

—Así mismo, en el siguiente expediente indiqué sobre la vacunas del bebé. El niño no tenía ni siquiera la primer vacuna que se debe colocar al recién nacido, tampoco las dos siguientes y por esta misma razón, el pequeño tenía defensas demasiado bajas y su infección vírica fue tan fuerte. Una completa irresponsabilidad de sus padres biológicos, pero bueno.

Jungwoo mira altanero a Shuhua y Jackson, quiénes le regresan la mirada con rabia y auras oscuras.

—Y si era así, ¿por qué el encargado Yukhei no se encargó de vacunarlo? Mis clientes, en su situación económica no se podían permitir comprar esas vacunas para el bebé.

—Las vacunas son gratuitas, no necesitaban gastar nada, es por eso que esa misma noche le coloque la primera dosis, la siguiente semana fueron las dos más importantes. Además, cabe aclarar, que el pequeño no contaba con un carnet médico, ¿por qué sería? —Jungwoo aclara e invalida de inmediato la argumentación del abogado defensor y para suerte o maldición de Lucas, el médico remata

—Porque ni siquiera tuvieron la decencia de registrarlo en la autoría ciudadana. —responde el abogado de Yukhei, mostrando el carnet médico de la criatura.

El carnet médico indica la fecha de siete meses antes con el apellido del atolondrado padre soltero.

Los expedientes del hospital que registraron su cita como pendiente a falta de un carnet médico.

—Señor juez y personas del juzgado, ¿de qué vamos hablando? Éstos pseudo padres vienen a éste juzgado para reclamar la custodia de un bebé, al que ni siquiera tuvieron decencia de registrarlo como un ciudadano chino y al mismo tiempo, no vacunarlo ni protegerlo.

Shuhua codea con fuerza a su abogado para buscar un contra ataque, quién nada más suspira y mira a su fiscal con nervios.

—No tengo preguntas para el testigo en cuestión y en cambio, llamo al demandado Wong Yukhei al estrado.

Exclama luego de un silencio abrumador.

Yukhei, asustado, se levanta y camina hasta el estrado, Jungwoo baja el mismo y se miran momentáneamente, el médico le sonríe con la misma calidez de siempre antes de palmear con suavidad su hombro y dirigirse a su lugar.

El joven padre se ve obligado a jurar por la verdad y tratar de calmarse, todas las miradas de los presentes le causan náuseas y le inspiran terror.

—Tengo entendido, que usted ha registrado al niño como suyo, ¿es ésto verdad?

Yukhei se asusta.

Recuerda las palabras de Hendery sobre que no se supiera que Xyān no estaba registrado como suyo, sino bajo su tutoría.

Su mirada se dirige a su abogado, quién tiene ojos de advertencia, casi rogando porque diga "no" y Hendery, le mira con determinación, dirigiéndose a un "sí".

—¡Objeción su señoría! ¿A qué viene esa pregunta? —su abogado irrumpe el cuestionario al moreno, quién suspira con alivio.

—Viene a que no es ningún secreto que Yukhei no es el padre biológico, por lo que él no tiene acceso al registro hospitalario del nacimiento del niño y en nuestra nación, para el registro de un bebé es necesario tanto la presencia de al menos uno de los padres como éste registro hospitalario y por ende, la cantaleta sobre su registro en ciudadanía y el carnet médico del niño quedan invalidados por no ser verídicos.

El monitor muestra el registro hospitalario de Xyān.

"Hospital materno infantil Xin Huei.

Fecha de nacimiento: 22 de Mayo del 202X.

Sexo del recién nacido: Masculino.

Padres: Jiaer y Shuhua Wang.

Nombre del recién nacido: Wang Xyān."

No puede ser, ¿dónde demonios había estado ese registro? Lo busco entre todos los papeles de ellos, ¿en dónde estaba?

—Si su "registro" fue hecho, entonces debió ser como tutor. Y recordamos que un tutor es una persona designada al cuidado y custodia de un menor por un determinado tiempo, siendo que ahora sus padres están aquí, su tutoría no tendría más valor.

No, eso no es así.
Cállate, Xyān es mi hijo, no de ellos.

El comentario inicial un debate nuevamente y el juez manda a callar a todos. Pide el registro hospitalario del pequeño y el registro en ciudadanía bajo tutoría.

El descanso es de veinte minutos

—Imbécil, hubieras dicho que sí lo habías registrado como tu hijo. —reclama Hendery con molestia.

—No. Finalmente, se habría descubierto, era obvio. —responde el abogado mientras habla con el fiscal y separan los documentos de pruebas.

Por otro lado, Yukhei busca controlar su ansiedad y nervios, Sicheng masajeaba sus hombros a órdenes de su pareja Kun, quién había ido a comprarle un café.

Jungwoo hablaba por teléfono con sus médicos aprendices a quiénes había dejado, momentáneamente, atendiendo sus responsabilidades en el hospital.

—Bueno, siendo sinceros, la tutoría de Yukhei en este caso y con los padres ya presentes, no tiene tanta validez y fuerza... Son los padres biológicos de la criatura, así que... Por ahora, solamente nos queda usar la carta de la economía y sustento para una calidad de vida eficiente al pequeño.

Bingo, esos imbéciles están quebrados.

—Necesito que llames a Mei Cai, tus padres y el registro de tus finanzas de los últimos diez meses.

single dad;「lukun。」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora