《22.

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—¿Y a ti te gusta?

—Sí, está interesante, realmente no sabía que alguien tan pequeño como Hinata podía ser jugador de vóleibol.

—¿Qué? No, no hablo de eso, tonto.

—¿Eh? ¿Entonces de qué?

Ten rueda los ojos con diversión y golpea su frente con la palma de la mano.

—Hablo de Lucas.

—Ah, lo siento, estoy un poco distraído.

Responde Kun mientras coloca el cereal sobre el carrito de compras, tratando de evadir aquella pregunta.

—¿Pensando en Lucas?

—No, aunque ahora que lo mencionas, creo que debería comprar biberones nuevos para Xyān...

—¿Ahora eres oficial su padre sustituto? Vaya que no pierdes el tiempo en amarrarlo... ¡Toro, fiera, tigre, tsunami, terremoto, maremoto, mi ídolo, mi campeón!

Kun mira con extrañeza al tailandés que alardea tonterías en medio del pasillo de cereales y avena.

—¿Qué estupideces dices? Claro que no, Lucas y yo somos amigos y como su amigo, no dejaré que su hijo tenga necesidades más allá del bolsillo de su padre.

—Entones sí te gusta.

Ten alza una ceja una vez visualiza las mejillas sonrojadas de su amigo.

—¿Qué? No. No me gusta, somos amigos y ya. Me gusta como amigos, es divertido.

—No tiene nada de malo que te guste Lucas, ¿lo sabes verdad?

—Lo sé, pero no me gusta.

Ambos chicos avanzan al área de bebés y Kun opta por ver biberones coloridos y chupones con lindas figuras.

—Ay por favor Kun, te conozco desde que tenemos quince. Sé cuando alguien te gusta y cada vez que hablamos de él tus ojos brillan como si estuvieras viendo a Brad Pitt, tartamudeas y actúas más torpe de lo que eres. Además tus mejillas se sonrojan cada vez que hablamos de él, si no te gustara no tendrías aquellas reacciones... No tiene nada de malo, al contrario, es lindo y creo que es un chico adorable.

El mayor de ambos se queda en silencio al escuchar las palabras de su amigo, cree que es estúpido, dado que él sabe que no gusta de Yukhei, piensa que su análisis tiene partes que son verdad y no se sabe explicar bien porqué.

—Sé que no tendría nada de malo que él me guste; es lindo, amable, sumamente inteligente y con una responsabilidad impresionante, lo admiro mucho... Además es tierno.

—¿Ves? Te gusta.

A ese punto, Kun rueda los ojos irritado dado que, conociendo a Ten, no le dejaría en paz hasta que aceptar su idea, por lo que solamente suspira y asiente.

—Sí Ten, me gusta, ya ya cállate y vamos a pagar.

Ten sonríe con diversión y salta suavemente siguiendo al mayor.

—A mí no me engañas, loser. Lo dijiste para callarme pero la realidad es cierta.

El resto de aquella mañana se la pasa escuchando a Ten alardeando sobre Yukhei, su hijo y el puesto de padrastro, que según él, había tomado.

No se calla hasta llegar a su departamento y comenzar  ver juntos el anime que tanto le había recomendado ver el tailandés.

—¿Es en serio Yukh?

Liu Yangyang mira su amigo con una mueca y notable tristeza en su voz.

—Ya no tengo quién cuide a Xy mientras estudio, el siguiente departamental tenemos prácticas y con lo que necesita Xy no va a alcanzar mi dinero y tampoco tiempo, no quiero ser un médico mediocre, así que me iré... Pero será temporal, no te preocupes por mí, mientras tanto tú dalo todo, eres brillante.

—Pero, pero... Mi hermana puede cuidar al bebé... Ella tiene un hijo y bueno... No nos dejes, sin ti no podré pasar genética, ¡por favor!

Lucas ríe suavemente, sabía que le costaría un poco alejarse momentáneamente de su sueño y sobre todo, de sus amigos.

—No te preocupes Yang, puedes pedirme ayuda por skype o puedes visitarme de vez en cuando, para ayudarte a estudiar.

El chico, sabiendo que Lucas no cambiaría de opinión ni porque le ayudara a formar una guardería en la facultad, se limita a abrazar con fuerza al chico.

—Te estaré esperando en la meta, Yukhei. Quiero hacer mi primer internado contigo, te voy a esperar, ¿de acuerdo? No te tardes.

El moreno corresponde aquél cálido abrazo y afirma, que será solamente momentáneo y no va pasar hasta hacer el internado con él.

Después de despedirse del resto se sus amigos y compañeros, camina hasta control escolar dónde solicitó una baja temporal por un semestre, el motivo era muy sencillo: paternidad.

A pesar de las constantes miradas de sorpresa por parte de las secretarias y comentarios relacionados a su temprana edad para aquél cargo, no hacía más que reír sin gracia y afirmar lo que decían, muchas ganas para dialogar con ellas para defender su temprana y extraña paternidad no tenía; por lo que solamente firmo los papeles necesarios y una vez tomada su baja temporal, salió de aquél edificio.

—Listo, terminé.

—¿Tan pronto? Creí que necesitarías un juzgado o que tus padres vinieran.

Lucas ríe y niega, mientras toma al pequeño bebé de los brazos de su amigo.

—Ya soy mayor de edad, no necesito a nadie para mis papeleos, pero bueno. Gracias por acompañarme, sé que tienes una agenda apretada.

Xiao Dejun niega mientras se levanta de aquella banca y comienzan a caminar fuera de la facultad.

—Mis llamados son muy temprano pero mis llamados para grabar son mucho más tarde, no te preocupes. Además me gusta estar contigo y el bebé, apenas tengo tiempo para saludar y verlo.

El moreno sonríe ante las palabras de Dejun y le empuja amistosamente.

—Si tienes tiempo, ¿quieres comer con nosotros? Aún sobró mucha comida que hizo Kun ayer.

—Sí claro, me encantaría... Espera, ¿Kun? Uy, ¿ya son novios? Felicidades y felicidades Xy, te tocaron unos padres increíbles.

Yukhei abre los ojos con sorpresa y sus mejillas arden.

—¡No! No somos novios, nada de eso...

—¿No? Que lástima... Pero, ¿a ti te gusta no?

—¿Kun? Uhm... No lo sé. Estoy confundido, me gusta pasar tiempo con él y es muy lindo, amable y me ha rendido muchísimo la mano, es todo lo que he soñado pero bueno, uh, creo que él tiene novio o algo así, no quiero meterme dónde no.

Dejun puede ver los ojos desilusionados de Lucas, a pesar de decir que estaba confundido, podía decir que Lucas gustaba fuertemente de Kun.

Y sabía de más que era mutuo.

single dad;「lukun。」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora