TRAITOR (COMPLETA)

Capítulo 9

Zach.

Lo había dicho. No tenía marcha atrás. Marsh dejo de abrazarme y me miro. No pude descifrar que trataba de decir.

— ¿Qué le dijiste?

— ¿Qué hiciste con Michael?

—Te pregunte primero.

La rueda seguía dando vueltas muy lento. Hasta cuando acabaría. Nadie lo sabe. Agarre ambas manos y las puse en mi cabeza.

—Le dije que no.

—Eso era lo que querías.

—Ahora yo no quiero a esa persona.

—Michael me masturbo.

Fue un gran golpe de emociones, mi cara cambio. Mierda ¿Cómo dejo de sentir esto? Era un sentimiento de tristeza, no como el que habías perdido algún familiar. Este sentimiento que decían en los libros. Donde todas tus ilusiones se rompen.

Me aleje de Marsh y ella trataba de tomar mis manos. Yo no dejaba que las tomara.

No seremos nada, pero todo lo que pasamos fue algo. Lo sabía por cómo era conmigo.

Quedamos debajo de la rueda de la fortuna y un joven nos abrió la puerta. Fui el primero en salir, dejando atrás a Marsh.

Había una pequeña montaña de pasto. Ya no habitaban niños revolcándose así que fui ahí para sentarme.

Tengo que asumir lo que siento. Ella quiere a Michael y yo quería una oportunidad con ella.

Vi que se acercó y se sentó a un lado mío. Realmente la quería pero por mis sentimientos no quería perder mi única amistad.

—Lo siento.

—Entiendo, también a mí me gustaría que me masturbara Michael—Dije con sarcasmo aunque sentía dolor por decirlo.

Ella sonrió y recargo su cabeza en mi hombro.

— ¿Todo bien?

Asentí con la cabeza aunque ella no me veía. Todo tiene que estar bien. Mire sus manos y solo habían cicatrices. Suspire de alivio.

¿Sería el momento de confesarle lo que había visto?

—Marsh...

—No arruines el momento Zach.

Me quede callado hasta que ella quedo completamente dormida recargada aun en mi hombro. Puse mi mano en su cabeza. Me levante para tomarla por la parte baja de la espalda y en las rodillas para cargarla.

Llegue al auto cargando a Marsh. Abrí la puerta y la metí adentro del auto. Cerré su puerta para yo subirme en mi lado del piloto.

No entiendo cómo es que no se despertó.

Que hermosa se ve.

Encendí el auto y empecé a manejar. No dejaba de ver las calles para llegar al instituto.

—Zach.

Se despertó.

— ¿Qué ocurre pimpollina?

No escuche respuestas hasta que llegue al instituto. Se volvió a dormir.

Me estacione y mire de nuevo a Marsh. Empecé a sacudirla lentamente.

— ¿Qué ocurre?

—Llegamos al instituto.

Se levantó de golpe y bajo del vehículo. Yo también me baje para cerrar la puerta.