Ambos eran extremadamente altos y fornidos, el uno tenía pinta de matón, mientras que el otro parecía sacado de equipo de fútbol americano.
En cualquier caso, la pérdida era segura.
Mis ojos recorrieron el lugar buscando algo con que defenderme, pero solo habían casilleros, bancos y duchas, nada con lo que podría golpearlos.
–Es una pena que te hayas metido con ella, parecías un chico bueno –Sonrió el rubio tronándose los dedos.
–¿Por qué la obedecen? No hay necesidad que esto acabe así. –retrocedí un par de pasos al ver que se acercaban. –¿Los está amenazando?
–Diversión.
–¿Que?
–Simplemente es divertido –Dijo el Moreno riéndose.
Me quede unos segundos en silencio mirándolos –Son iguales a ella. –Susurré y de pronto el rubio alzó su puño e intentó pegarme, pero inmediatamente lo esquivé.
–Vaya ¿Sabes pelear? –me miro divertido.
Los miré con rabia esperando el siguiente golpe, pero de pronto el moreno me agarró de los brazos por detrás y me inmovilizó. Rápidamente el rubio aprovechó la jugada y estaba a punto de darme un golpe en el abdomen, pero enseguida levanté mis piernas apoyándome en el moreno para darle una patada y mandarlo al suelo.
Aproveche el desconcierto del moreno para golpear mi cabeza contra su cara. Él con dolor se hizo para atrás rápidamente y se tapó la nariz la cual empezó a chorrear sangre.
–¿¡Pero que mierda!? –Furioso el moreno intento volver a pegarme, pero lo esquivé enseguida. –¡Te voy a matar, enano te mierda!
Con furia empezó a correr donde mí, sin saber qué hacer me acerqué a los casilleros y cómo pude le di una patada para después abrir uno de estos y estrellárselo en la cara.
Tomé su cabeza y volví a estrellárselo en el castillero hasta que cayó a dolorido al piso. –¡Mocoso...! –Agitado volteé a ver y vi como el rubio apareció a mis espaldas y me propinó un puñetazo en la mejilla mandándome al suelo directamente. –No puedo creer que alguien como tú nos haya hecho esto, nos las vas a pagar –Se acercó rápidamente y se sentó en mí tomándome de la camisa.
Algo ido por el golpe intente zafarme, pero inmediatamente alzó su puño y empezó a darme puñetazo tras puñetazo.
Levante mis brazos para intentar cubrir mi rostro, pero él como pudo siguió pegándome con ira.
Después de unos segundos ya cansándose se alejó dejándome tendido en el suelo con dolor. Note con la poca noción que me quedaba que el moreno se acercó, su ceño estaba fruncido –No puedo creer que lograrás haberme tirado al suelo ¿Quién te enseño a pelear? –Dijo seriamente, pero al verme casi inconsciente se empezó a reír –Da igual, aun que sepas pelear o no somos los más fuertes del instituto... jamás nos ganarías. –se acercó y me dio una patada en el abdomen que me saco un jadeo de dolor y me obligó a abrazarme en posición fetal.
No podía estar pasándome esto...
Yo no había hecho nada a nadie ¿Por qué a mí?
–Es una lástima, después de todo eres un chico en verdad lindo... –El rubio comenzó a acariciar mi cabello –No me extraña porque Ashley tiene tanto miedo que le quites a Dante. –De pronto sentí como me volteó cabeza abajo, estaba tan a dolorido que no podía moverme.
–¿Qué haces Mattheus? ¿Eres gay? –Pregunto el moreno parado a su lado.
–Vamos Ronan, dime que no es lindo –Empezó a acariciar mis piernas, como pude intente alejarme, pero era imposible, sentía un dolor indescriptible en las costillas. –Si Dante lo probó ¿Es por algo no?
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Tus Ojos Grises (GAY)
RomanceCuando ese misterioso chico de ojos grises es en lo único que puedes pensar. Solo ahí sabrás que estás perdido. 📚Historia completamente mía. 📚Contenido sexual entre hombres. 📚Si no te gusta por favor evita comentarios ofensivos.