16. ¿Qué demonios pasó?

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–El me toco... –dijo Ashley con lágrimas en sus ojos –Me dijo que si gritaba me iba a golpear, pero yo... no podía dejar que me haga eso.

–Eso no fue-

–¡Señor Angel! Es la última vez que se lo digo, cállese y déjela hablar. –Cerré mi boca lentamente mirando a todos en el salón, que me miraban con enojo. 

Su actuación era perfecta.

–Esto paso después que lo rechace, tenía mucho miedo –Comenzó a llorar más fuerte abrazando a uno de sus amigos a su lado, que parecía ser miembro del equipo de futbol americano.

–Ángel ¿En que estabas pensando? ¿Por qué lo hiciste? –Baje mi mirada sin decir nada, cualquier cosa que dijera sería una mentira para ellos de todos modos.

–¿Piensa poner cargos contra Ángel, señorita Ashley? –Pregunto el profesor.

–No, no... no quiero más problemas, por favor. – Dijo desahuciada – solo quiero que lo castiguen, nada más...

Todos la miraron con lastima y el director volvió a mirarme furioso –Claro que esto no puedo dejar pasar ¡Esto es expulsión!

Ashley volvió a llorar –No... sí lo expulsa, todos sabrán que intento abusar de mí, por favor, no quiero más problemas.

La quede mirando desconcertado ¿No quería que me expulsen?

El director la miro con lastima –Esto no depende de usted señorita, en cuanto a usted, llamare a su representante y se verá que mismo se hace, los demás salgan y vayan a sus salones. Señorita Ashley, vaya a casa y descanse.

–Gracias director... –Se dio la vuelta para irse, sin antes darme una sonrisa e irse abrazada con su amigo.

Me sentía tan impotente que apreté los puños con toda la fuerza que pude sacándome un jadeo de dolor.

–Señor Ángel, su comportamiento ha sido realmente repulsivo e intolerable –Empezó a caminar de un lado a otro –Esto claro que no permito en mi instituto ¡jamás! Esto es una expulsión segura. 

Miraba mis pies sin saber que decir, esperando ya que acabara y poder salir de allí.

–Pero –Continuo –Usted ha sido uno de los mejores oradores que hemos tenido, sin contar que represento la última vez al instituto y participara en el concurso que viene. Y también contando que no he tenido llamados de atención de usted –Se sentó en la silla giratoria y me miro de arriba a abajo –Le daré otra oportunidad señor Ángel, pero no quiero volver a oír otra cosa de usted a menos que sea buena ¿Escucho?

Asentí lentamente, no podía hacer más.

–A cambio cada día acabando las clases se quedará limpiando las aulas del edificio B por un mes ¿Bien?

Mordí mis labios con impotencia y volví a asentir lentamente.

–Bien, puedes retirarte. –Dijo girándose hacia su ordenador en el escritorio.

Suspiré y salí del salón 

Afuera estaba Erwin, Alexa y Catia sentados en la sala de espera. Al verme Alexa y Erwin se acercaron corriendo hacia mí.

–¿Qué demonios pasó Ángel? –Llego Erwin a invadirme de preguntas –Hay todo tipo de rumores por todas partes.

–¿De verdad hiciste eso? –Dijo Alexa con lágrimas en sus ojos.

–No yo- –Me calle al caer en cuenta –Espera ¿Rumores?

–Dicen que intentaste abusar de Ashley –Llego Catia detrás de Alexa mirándome neutral.

Tus Ojos Grises (GAY)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora