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Bogdan Gnatovich.

Comencé a reír cuando Ivan se quito la olla de la cabeza. Dayker voto a alguna parte de la cocina la cuchara con la que lo habia golpeado.

—¡Idiotas!—Sostuvo su cabeza intentando quitar el sumbido—¿Porque?

—¡Feliz cumpleaños!—Stiven llegó con un pedazo de papel lleno de crema batida y se lo estampó en la cara—¡ERES UN ANCIANO!

—Que les den por el culo—Lamio del dulce—Menos tu Boggi.

Hablo cuando ya podía ver, Emilio le sonrió mientras también terminaba de lamer de la crema de su cabello.

—¿También te...

—Son unos odiosos, pero por hoy es aceptable que estén jodiendo desde temprano.—Dijo con burla.

—Supongo—Se alzo de hombros—¿Que estas asiendo?

—Termine de grabarlos.—Me alze de hombros mientras apagaba la cámara

—Que cabron...—Sonrió divertido

—¡Claro! ¡Como te gusta Boggi a él no le dices nada!—Dijo Stiven con una sonrisa sacarrona.

—A mi no me gusta Boggi—Giro los ojos—Pero si me agrada más que ustedes.

Abrazo mis hombros sacándoles la lengua.

—Si claro—Hablo Emilio aun viendo su teléfono—Todos te creemos.

Reí bajito al ver como Ivan le mostraba su dedo medio.

—Vengan—Sujete sus manos.

Camine con ambos hasta la cocina, los ojos de Emilio brillaron al ver el pastel que estaba en la encimera; se safo de mi mano para caminar hasta el.

—¿Es para nosotros?—Me dijo Ivan algo cerca de mi oído.

—Sip—Le sonreí—Lo hice con los chicos en la mañana.

—Gracias—Jalo de mi brazo para poder abrazarme—Dale las gracias a los chicos por mi.

—Claro.

Caminamos hasta ellos, Emilio sonreía mientras jalaba dos sillas enfrente de la mesa para sentarse con Ivan. Luego Dayker les puso unos gorritos fiesteros haciendo sonreír en exceso a Emilio.

—¿Tenemos que cantar?—Pregunto Stiven con una pequeña mueca—Podríamos poner la canción desde el teléfono de Boggi.

—¿Porque desde el mío?

—Porque Ivan es tu novio, dahh—Comenzo a reír cuando Ivan le alzo una ceja—Solo bromeaba.

—Ten—Le extendi el teléfono.

—¿A donde vas?—Sonrei al ver el ceño levemente fruncido de Emilio—¿No partiras el pastel con nosotros?

—Claro que si, pero necesito una nueva memoria para la cámara y tengo algunas en mi habitación—Alze los hombros—Ya vuelvo.

Salí de ahí escuchando como regañaban a Ivan por haber metido el dedo en el pastel, mordi mis labios para no suspirar.

Llegue a mi habitación y tome alguna memoria alazar de las que estaban en el cajón.

—¡Idiota!—Me puse una mano en el pecho intentando regularizar mi respiración—Aprende a tocar o me matarás algún día.

—Lo siento crei que me habías escuchado entrar—Rió bajito

—¿Que pasa? ¿Porque no estas partiendo el pastel?

—Dijiste que te esperáramos—Emilio alzo los hombros sentándose en la cama—Ven aqui

—¿Que pasa? Comienzas a asustarme.

—Te conozco desde hace 3 años mucho tiempo, ¿No crees?

—Si me haces algo voy a gritar, primer aviso—Me senté con el en la cama.

—Llegaste siendo un crío a esta casa y ahora creo que inconsientemente e aprendido a saber que es lo que te pasa con solo verte—Tomo una almohada.

—¿Okey?—Lo vi extrañado.

—Ivan a veces dice demasiadas estupideces cuando esta nervioso, ¿Sabias?

—¿A donde quieres llegar?—Mis manos sudaron cuando menciono a su hermano.

—¿Yo? A ningun lado, ¿Tu en que pensaste?

—¿Q-Que?

—Boggi, Boggi, Boggi.—Negó riendo.

Se levantó de la cama para irse a la puerta, me levante tomando su brazo.

—¿Que es lo que sabes?

—Más de lo que Ivan y tu saben, al parecer.—Me sonrio—Vamos de una vez por ese trozo de pastel.

—Claro.

Agradecia que mencionara la escuela de manejo mientras bajábamos para amenizar el ambiente. Llegamos y el volvió a sentarse junto a Iván para empezar a cantarles las mañanitas.

Ivan llego a mi lado con un pedazo de pastel en un plato.

—Aqui tienes—Canturreo—Olvide la cuchara.

—Oh no pasa nada.

—¿Encerio? ¿Como lo vas a comer?

—Así—Tome un poco con la mano para llevarlo a mi boca.

—Que asco Gnatovich.

Ambos reimos, luego terminé mi pastel con Ivan viendo las felicitaciones que le hacían las fans.

—Te quedo un poco aqui—Se señaló la parte baja de su boca

Saque la lengua intentando limpiarme.

—¿Ya?

—Nop es más a lado—Saco su lengua para mostrarme—Aqui

Repetí su acto y el negó.

—Dejame hacerlo—Susurro pasando muy lentamente su dedo por mi labio inferior—Y....¡Listo!

Sonrió y metió su dedo en su boca para limpiar el dulce.

—Que asco Martinez—Imite su voz haciéndonos reir

Mi risa paro en seco cuando voltee a ver a Emilio quien me veía sin expresión alguna, parecía que analizaba algo, sonrio un poco antes de volver a ver a Stiven.

Suspire intentando convencerme de que solo estaba alucinando. Bueno, al menos tendría inspiración para el capítulo de hoy.

3:33 a.m.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora