VI

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Harry ya se habría fumado 8 de sus cigarrillos desde su estancia en el pequeño parque al que frecuentaba seguido. Una cantidad exagerada y hasta peligrosa.

Ese lugar lograba calmarlo de alguna manera.

Aunque ese día en específico hacia 3 grados bajo cero y la neblina inundaba Doncaster Harry no quería abandonar su pedacito de tierra favorito.

Se hicieron las 7 pm Harry aún se encontraba bajo un árbol escuchando su banda favorita contemplando la noche. Luchando por quedarse sereno para que así sus Demonios no salieran aunque ya podía escuchar en su cabeza una voz llamándolo en un susurro.

Harry estaba asustado, no quería que Edward apareciera de nuevo y acabará con otra vida más en Doncaster.

El rizado se concentraba en la letra mientras fumaba su cigarrillo para mantener la mente ocupada. Harry levanto la mirada y pudo divisar a alguien sentado en una banca dándole la espalda. En la oscuridad de la noche no se distinguía nada, solo una silueta negra.

Harry se preguntó si sería otra alucinación o si sería alguien de verdad. Harry opto por la primera suposición y algo asustado empezó a caminar hasta aquella sombra, pero cuando ya se encontraba a una distancia determinada escuchó un sollozo proveniente de aquella figura que poco a poco iba tomando forma hasta convertirse en un joven, pero no cualquier joven.

Era Louis.

Harry lo reconoció de inmediato. Louis aún no había notado la presencia de Harry ya parado junto a él.

A Harry se le encogió el corazón, ver a Louis llorar no le gustaba para nada.

El más alto no sabía qué hacer, tal vez dejarlo solo un momento o sentarse junto a el para consolarlo y decirle que todo estará bien.

Desde que Harry se mudó a Doncaster a penas y mantenía una conversación por 2 minutos ya que no confiaba en nadie—Ni en su reflejo— pero Louis era distinto. A Harry le parecía fascinante en el modo de algo que era algo totalmente impredecible para él, Louis era como un sabor de helado que nunca has probado, te da miedo comprarlo porque no sabrás si te gustara y si lo compraste y no te gusto habrías malgastado tu dinero. ¿Valdría la pena malgastar su dinero-metafóricamente- por Louis?

¿Pero y si no lo recordaba?

—Louis...—susurro Harry.

Louis levanto la mirada un poco asustado por la repentina presencia de Harry dejando ver a un Louis con los ojos llorosos y rojos escondiendo los ojos azules grisáceos que harry había observado hacia un tiempo.

— ¿Harry?—Dijo Louis con la voz quebrada.

Por un lado estaba feliz de volver a ver aquel misterioso chico de cabello rizado pero por otro lado estaba avergonzada do que haya sido justo en ese mismo momento cuando Louis se encontraba indefenso y vulnerable como un cachorro en medio de la carretera.

Cuando Harry escuchó a Louis diciendo su nombre fue como si todos sus pensamientos dañinos de su cabeza se esfumaban por completo siendo acompañados con las voces que desde hace un rato Harry había empezado a escuchar.

—Louis ¿estás bien?—Dijo Harry serio pero a la vez preocupado.

Ni el mismo sabía porque se preocupaba por Louis, tal vez por el hecho de que él era el único con el que quería hablar de verdad.

—No... Solo, vete ¿sí?, no tienes que quedarte aquí y sentir lastima por mí.

Harry no podía irse y dejar a Louis allí solo, tendría que hacer algo para que esas lágrimas dejaran de caer de sus ojos azules.

Él sabía muy bien como era sentirse tan mal hasta llorar y querer apartarte del mundo entero y no quería lo mismo para Louis.

Así que solo se sentó a su lado y se dispuso a fumar un cigarrillo.

Louis hizo su mayor esfuerzo para dejar de llorar y enjuagarse las lágrimas de su rostro.

¿Que se creía Harry?, solo llegaba como si nada a observar como la capa de chico malo—que tanto le había costado crear para reflejar que no tenía miedo hacia nadie—se rompía frente a sus ojos. Louis no lo permitiría, no permitiría que Harry, ni nadie, lo viera en su faceta más frágil y menos en uno de los peores momentos de su vida.

Se tragó las lágrimas y respiro profundo.

Harry lo observaba detenidamente. Él sabía lo que tramaba hacer Louis, conocía a la perfección esa técnica, la venia aplicando casi toda su vida.

— ¿Necesitas algo? —dijo Louis seco. Como si nada hubiera pasado.

—No— sonó despreocupado— ¿Y tú?

Louis no respondió, solo suspiro fastidiado.

¿Ahora actuaras como si nada? Pensó.
—No.

—Bien.

Tu actitud me exaspera Harry. Pensó Louis

¿Quieres?— Dijo Harry mostrando su cajetilla de cigarros.

—Adelante, búrlate. — Dijo Louis ya harto de jugar ese estúpido juego de 'aquí no pasó nada' ignorando los cigarrillos que le ofreció Harry.

Harry alzo una ceja.

— ¿Porque habría de hacerlo?, no soy tan hijo de puta como para burlarme de las desgracias de los demás, eso solo me haría más miserable de lo que ya soy. — Respondió Harry tranquilo mientras encendía otro cigarrillo.

—Entonces ¿para qué te quedaste aquí a verme sufrir?

—¿Quien dijo que me quede aquí para verte sufrir?, al contrario, me quede aquí para que tu orgullo tragara tus lágrimas y lamentos al ver que estaría alguien cerca, así que más bien me quede para que dejaras de llorar. Eres muy predecible Louis.

Louis no sabía que decir.

—Además, no te juzgaría, ni me burlaría por algo que yo mismo he hecho.

Louis no respondía, sólo miraba el suelo con la cabeza gacha.

— Bien, ya es tarde. Buenas noches Louis feliz noche buena. —Dijo Harry mientras se levantaba.

—Espera...—Hablo por primera vez en un tiempo. — ¿Mañana vienes?

—Todos los días.

Louis observó como aquel joven alto se alejaba y se perdía en la oscuridad.

Se quedó un rato allí sentado mirando la fuente analizando todo lo ocurrido hoy sin evitar volver a llorar y que ese dolor en el pecho apareciera.

Feliz cumpleaños a mi—Empezo a cantar—Feliz cumpleaños a mi, feliz cumpleaños Louis—sollozo— feliz cumpleaños a mi...

...

No tenía una puta idea de cómo escribir este capítulo, lo cambie como 3 veces y sigue sin gustarme pero es lo mejorcito que pude hacer.

Si algunas palabras aparecen juntas por favor Avisen :(

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Delirious ||Larry Stylinson||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora