Había tantas preguntas sin respuestas en su mente, pasando una tras otra como si estuvieran unidas por un hilo. Siempre había una nueva duda, una nueva inquietud. Desde que Jeno había dicho aquellas palabras, sentía que su mente se había convertido en un huracán que arrasaba con todo lo que había conocido hasta ahora. Y entre esos escombros, solo se conseguía alzar la duda, la culpa, el miedo, la inseguridad. Suspiró, tratando de despejar sus pensamientos por un momento. Llevaba noches sin dormir bien, y días enteros donde lo único que veía era su imagen cada vez más desgastada.
Los chicos se habían preocupado por él, pero todo se resumía siempre a una mala racha. Nunca era nada importante, nunca permitía que nadie lo ayudase. ¿No era acaso una batalla que debía luchar solo? Su constante pelea contra sí mismo.
- Tenemos que hablar.
Alzó la mirada, encontrándose con los oscuros ojos de Lee. Llevaba toda esa semana siguiéndole como un cachorro a su dueño. Solo que él nunca respondía a nada de lo que Jeno decía, ni siquiera recordaba las palabras que habían salido de sus labios.
- No tengo nada que hablar contigo, Lee - murmuró, antes de agachar de nuevo su mirada.
Sentía todas las miradas de sus compañeros clavadas en su persona. Desde que su "relación" con Lucas había terminado, los rumores habían comenzado a crecer y expandirse por toda la institución. Pese a las especulaciones y a los supuestos, nadie se había molestado en preguntarle directamente.
La compasión parecía atravesar cada una de las murallas que tanto se había molestado en crear a su alrededor. Lo taladraba como si quisieran convertirlo en el ser más desgraciado. Jaemin no necesitaba la compasión de sus compañeros, mucho menos por algo que no era cierto.
- Jaemin, llevas una semana así por lo que dije en una estúpida fiesta - gruñó Jeno.
- ¿Y?
- No puedes seguir así. Te estás comportando como un niño chico.
- Pues mírame seguir así - repuso.
Guardó sus cosas desordenadamente. Las metía en su mochila sin siquiera mirar si todo se estaba manteniendo intacto. Era muy probable que luego se arrepintiera de sus acciones, pero ese sería un problema para el futuro. Ahora, lo único que le importaba era salir de allí. Se sentía atrapado, estudiado. No quería que Jeno estuviera allí, no quería sentir cómo Renjun lo ignoraba.
Creía que una vez él dejase de estar con Lucas, él volvería. Había albergado la ridícula esperanza de que su mejor amigo volviera, que le diera un abrazo y le explicase todo. Era Renjun. Él le hubiera perdonado cualquier estúpida decisión, porque eran jóvenes e imprudentes, porque no pensaban las cosas, eran impulsivos y muchas veces actuar suponía menos esfuerzo que hablar. Comunicar los deseos más íntimos, los pensamientos que uno se guarda con mayor recelo, siempre queda en un segundo plano cuando no se tiene la fuerza suficiente como para enfrentarse a ellos.
Se levantó y salió del aula con paso decidido, aunque sin una dirección definida. Solo quería desaparecer. ¿Era tan difícil?
Al parecer sí. Lo supo cuando una mano envolvió su muñeca con un gesto amable. Detuvo su paso, pero no se giró. Su corazón latía con fuerza, su cerebro le gritaba que se girase, que comprobase si aquello era real. Mientras tanto, todo su cuerpo pedía que se soltase de aquel agarre y huyera, que no era el momento de enfrentarse a ello. Que no podía, no ahora.
- ¿Podemos hablar, por favor?
La suave voz de Renjun llenó los pasillos. Sentía como sus ojos se llenaban de lágrimas que él se negaba a dejar caer. No. Esa conversación llegaba un mes tarde. Él había necesitado a su mejor amigo hacía mucho tiempo, ¿pero cómo iba a venir cuando era él mismo la causa de todo? No, no quería hablar con él. Pero se giró.
Renjun tenía el pelo más claro que la última vez que hablaron. Rozaba un dorado muy cercano al rubio. Sabía que Huang quería teñírselo, probar diferentes colores, pero en su familia aquello no se veía demasiado bien. Así que Renjun estaba en un proceso de decoloración que poco a poco se iba acercando a un color que pudiera aceptar tintes fantasía. Se suponía que lo estaban haciendo juntos, pero ahora su cabello era cada vez más oscuro mientras que el de Renjun brillaba bajo la tenue luz artificial de los pasillos.
Y eso era realmente todo lo que podía ver, ya que Renjun mantenía su cabeza baja.
- ¿Por qué ahora? - susurró Jaemin.
- Yo... tengo muchas cosas de las que disculparme, Minnie - murmuró -. Y tengo otras que explicar.
Jaemin asintió, aunque sabía que el otro no lo vería, pero no dijo nada. Era incapaz de decir nada.
- ¿Podemos ir a un sitio más privado? No quiero que nadie escuche...
Ambos caminaron uno al lado del otro en silencio. Ahora, Renjun los guiaba a ambos hacia un lugar del patio exterior donde ningún profesor pudiera seguirles el paso. Era su pequeño lugar. No solían saltarse ninguna clase, pero las pocas veces que lo habían hecho, siempre acababan en aquel pequeño oasis. Un simple lugar lleno de tranquilidad donde podían hablar, reír, o simplemente disfrutar de la compañía del contrario sin necesidad de nada más.
Cuando llegaron, Jaemin se sentó, dejando su mochila al lado y apoyando la espalda contra el tronco de uno de los árboles que ahora les daban cobijo. Los únicos espectadores de aquel intercambio. Renjun se mantuvo de pie delante de él, aunque evitando su mirada.
El silencio entre ellos se había convertido en una densa nube de incomodidad.
- Lo siento - susurró Renjun por fin. La respiración de Jaemin se cortó -. Todo lo que he hecho, ha sido lo más estúpido que he hecho hasta ahora. No estoy orgulloso de ello, pero tenía tanto miedo de ver cómo te robaban frente a mí, sin poder hacer nada. No quería perderte, no quería que pasase en mi cara. No podía, Jaemin.
- ¿Y pretendías evitarlo alejándote? - ironizó Jaemin.
- Creía que sería lo mejor para mí.
Por unos segundos, solo se escuchó la respiración de ambos. Renjun trataba de controlarla, intentando calmarse. La de Jaemin era errática, queriendo estrangular la risa que amenazaba con salir. Él había dicho que sí a escucharlo, lo había seguido hasta allí. Pero todo aquello se había convertido en un revoltijo de sentimientos y emociones que hacían que quisiera vomitar, y reír, y llorar, y gritar.
- ¿Y yo qué?
- ¿Qué? - preguntó Renjun confundido.
- ¿Qué era lo mejor para mí, Renjun? Decidiste de un día para otro ignorarme. Estábamos bien y de repente, ya no estábamos. ¿Cómo crees que me sentí? Mi mejor amigo, de la noche a la mañana, se había convertido en un extraño que ni siquiera parecía capaz de mirarme - repuso -. ¿Cómo crees que fue para mí eso? Todo el tiempo las mismas preguntas, todo el tiempo pensando que había hecho algo malo. Cuando en realidad... ¡Ni siquiera entiendo por qué lo hiciste!
- Ya te lo he dicho. Tenía miedo...
- Miedo de verte enamorarte, Jaemin. ¿Es que no lo entiendes? Estoy enamorado de ti. Te quiero y no como un amigo debe querer a otro. Siempre he estado enamorado de ti, pero siempre hemos sido solo los dos. ¡Ya no es así! Ibas a conocer a nuevas personas y yo... ¿Y si ya no era suficiente para ti? ¿Y si te enamorabas de alguno de ellos? No podía, Jaemin. No soportaba esa idea.
Ahora, ambos chicos estaban con sus rostros empapados por lágrimas, pero ninguno se atrevió a decir nada más. Solo se quedaron allí, en una pequeña danza de sollozos ahogados. Al menos, hasta que Jaemin se levantó.
Secó las lágrimas con una de las mangas de su sudadera. Recogió su mochila del suelo y le dio la espalda a Renjun. Había tantas cosas que su mente no comprendía, que no conseguía enlazar. Pero sabía algo con seguridad...
- Yo también estaba enamorado de ti - confesó Jaemin, sin siquiera mirarlo -. No me busques de nuevo, Renjun.
Y se fue de allí sin mirar atrás. Renjun le había roto el corazón, había despreciado sus sentimientos. Lo mejor que había podido hacer durante ese mes, había sido darse cuenta de que la persona que él amaba, era una simple idealización de su mejor amigo.
Suspiró. Aunque no podía negar que lo seguía queriendo, ni que su corazón dolía en aquel momento.
ESTÁS LEYENDO
The couples game [NoMin]
Fanfiction[Vamos, juguemos al juego de las parejas... ...y la última pareja de este mes será entonces, ¡Jaemin y Jeno!] PROXIMAMENTE. Actualizaciones cortas. Mención de muchos ships (sobre todo NCT y SKZ). Pareja principal: Jaemin y Jeno.