BOYS OVER FLOWERS «Season2»

Capítulo 8

Seul,Corea del Sur 2035

SeungHyun llegó a tiempo al almuerzo semanal con su padre Junpyo. Una tradición, pensó, mientras entraba en el restaurante. JunPyo ya estaba allí, en la mesa de siempre, con un café en la mano.

—Buen trabajo. El artículo es muy positivo. Pero has dicho que no cerrarías las instalaciones de Seúl hasta después de las navidades y ahora no puedes cambiar de opinión.

Junpyo dijo , señalando la carpeta que había sobre la mesa.

—No lo haré.

—Esa chica parece interesante. ¿Cómo se llama?

—SunMi.

—¿De verdad es universitaria ?

—Sí . Es exactamente lo que tú me pediste que buscara : buena chica, guapa, preocupada por su familia, inteligente.

SeungHyun suspiro

—El periodista parece haberse quedado enamorado . ¿Cuánto tiempo vas a salir con ella?

Junpyo volvió a tomar su café americano

—Hasta Navidad.

—¿Y es sólo una relación... profesional?

SeungHyun pensó en el beso e hizo todo lo posible para convencerse a sí mismo de que sólo lo había hecho para que lo vieran los demás.

—No estamos saliendo, si eso es lo que quieres saber. La he contratado para hacer un trabajo, nada más.

—Me gustaría conocerla.

—Eres demasiado curioso para ella.

JunPyo sonrió.

—Bueno, dejemos que eso lo decida SunMi.

Pidieron el almuerzo y charlaron de trabajo mientras comían, como era su costumbre. De camino a su coche, SeungHyun marco a SunMi.

—¿Sí?

—Hola, soy SeungHyun.

—¿Algún problema?

SunMi le preguntó . Tenían que acudir a una cena al día siguiente...

—No, pero es que voy a comprar un árbol de Navidad esta tarde y he pensado que a lo mejor querrías venir conmigo.

SeungHyun miró el teléfono durante un segundo antes de volver a ponerlo en su oreja.

—¿Por qué?

—Porque es divertido y porque necesito un poco de Navidad en mi vida. Pero si no quieres, no importa.

SunMi no quería. Y, sin embargo, se encontró SeungHyun preguntándole:

—¿A qué hora?

—A las cuatro. Supongo que vas a venir con tu Jeep .

—Tengo una flota de camiones, SunMi. Me dedico a eso.

—Ah, es verdad.

SeungHyun se cambió el teléfono de oreja.

—Ah, entonces eso es lo que querías. Yo no te intereso nada.

—No, bueno, debo reconocer que tu Jeep es parte del interés, pero me gustaría que vinieras, aunque no me la prestases.

—No sé si creerte.

—Yo no miento nunca.

—Bueno, está bien, nos vemos a las cuatro.

SeungHyun guardó el celular en el bolsillo de su chaqueta, sacudiendo la cabeza. Las mujeres le habían mentido muchas veces. Mentían para conseguir lo que querían. Incluso juraría que a veces mentían por costumbre. KimKwanYu había sido la más mentirosa de todas. Le había dicho que lo quería y después lo había abandonado.