𝐈𝐧𝐞𝐱𝐩𝐥𝐢𝐜𝐚𝐛𝐥𝐞 𝐉𝐚𝐞𝐠𝐞𝐫 [𝓔𝓻𝓮𝓷 𝔁 𝓻𝓮𝓪𝓭𝓮𝓻]

12. 𝘊𝘰𝘮𝘱𝘢𝘳𝘵𝘪𝘳 𝘭𝘢𝘴 𝘮𝘦𝘭𝘰𝘥í𝘢𝘴

Voy andando junto a Ymir, Historia y Pieck por el campus de la universidad, esa brisa fría de Febrero se siente ligera, aunque de todas maneras tengo las mejillas enrojecidas del frío y las puntas de los dedos congeladas. Pongo las manos sobre mis brazos sintiendo la tela de algodón tan suave de mi sudadera, intentando buscar algo de calor corporal, cuando de repente, Ymir, que va andando a mi lado, se queda parada por un momento en seco, tensa y con los ojos abiertos como platos; en un solo instante, sale corriendo a la farola junto con una papelera que hay a escasos metros de nosotras puesta por ahí y se agacha tratando de esconderse.

Me quedo completamente descolocada viendo esa imagen de Ymir, ¿A qué se supone que puede temerle esta mujer? Me giro para observar a Historia y Pieck, que me miran con el mismo desconcierto que yo; decido acercarme dando pequeños pasos hasta Ymir e intento aguantar la risa mientras hablo:

-Ymir, ¿Qué estás haciendo?

-Shhh, ¡Habla más bajito!

-Vale, pero dime qué es lo que pasa- Le sigo la corriente y comienzo a susurrar yo también, mientras noto como se acercan las otras dos por mi espalda, para así poder escuchar.

-Pues que he visto a la chica que tanto me gusta caminando por allí, y me he puesto nerviosa joder...- No puedo evitar una expresión de ternura después de escucharla, pero Ymir reacciona con esa cara de asco y continúa hablando- Está muy cerca, ¿Y si me mira? ¿A dónde irá? ¿Qué se supone que hago ahora?

En una ocasión así, ¿Qué se supone que deberíamos hacer nosotras como amigas? ¿Cómo podemos reaccionar a su problema? Teniendo en cuenta como somos, de alguna manera se nos alinearon los pensamientos a todas y en pocos segundos, ya estábamos escondidas junto a Ymir tras el cubo de basura, de rodillas y pensando alguna táctica; creo que somos las peores personas para aconsejar que existen:

-¿Y qué quieres hacer? No puedes esconderte cada vez que la veas

-¡Eso ya lo sé! Pero tampoco sé si acercarme

-Algún día vas a tener que hacerlo Ymir, no podemos estar siempre detrás de un cubo hablando- Historia habla con sarcasmo, aunque la parte de que fuera a hablar con ella la decía completamente en serio.

-A ver, primero, dinos quién es- Pieck pone una mano sobre el hombro de Ymir y esta asiente sin ni si quiera pestañear; todas nos damos la vuelta corriendo y asomamos la cabeza unas por encima de otras observando a la gente que pasa no muy lejos por el campus; vaya espectáculo debemos estar dando ahora mismo, pero tratándose de ellas no me importa.

Ymir pasea la mirada entre toda la gente intentando localizarla, hasta que vuelve a verla paseando algo más alejada hacia uno de los caminos que parece llevar a la cafetería:

-¡Esa, es esa de allí!- Señala con el dedo muy sutilmente, sin separar mucho su mano de ella para que no se vea casi por encima del cubo, e intento escudriñar más con la mirada a toda la gente, pero sigo sin tenerlo claro.

-¿La castaña de la coleta alta?

-¡Sí!- En cuanto Historia da esa pequeña descripción, consigo verla perfectamente entre todas las personas; es una chica con un aspecto dulce, alta pero no tanto como Ymir, desde lejos puedo notar que tiene los pómulos algo marcados y juraría que hasta tiene pecas.