Amor Toxico

Seducción

Los días pasaban y Blitz intentaba comunicarse con Fizzarolli, le mandaba mensajes y hasta le hacia llamadas pero ninguna contestaba lo cual le empezó a preocupar, hasta que un día que estuvo en su oficina tomo la decisión de que tendría que cerrar su negocio por un día para ir al anillo de la lujuria para saber que estaba pasando con su amigo.

Moxxie y Millie veían que su jefe estaba bastante preocupado que incluso no les hacia bromas, ni inventaba juntas importantes solo para hacerles perder el tiempo, de hecho estaba peor que cuando los fue a espiar a Ozzie, intentaron animarle de diferentes formas pero no lograban llamar su atención hasta que cierto payaso se presento a las oficinas de I.M.P:

--disculpen...quiero ver a Blitzo...--

De inmediato Moxxie y Millie se pusieron a la defensiva:

--¡¿pero que mierda haces aquí?! ¡¿acaso no fue suficiente el que te interrumpieras la canción de mi esposo y humillaras a mi jefe y a su novio?!--

--¡exacto! ¡lo mejor que puede hacer, señor, es irse de aquí antes de que lo saquemos a patadas, porque aquí no es bienvenido!--

Fizzarolli estuvo a punto de hacer un comentario burlesco pero decidió guardárselo mostrando un rostro deprimente para decir una disculpa sincera:

--lo siento...--

Ambos diablillos se quedaron extrañados de que el egoísta payaso les dijera eso, hasta que Millie pensó que era uno de sus trucos:

--¡mira, con eso no nos vas a convencer, así que largo de aquí antes de que te rebane con un cuchillo!--

Loona decide intervenir en esas amenazas poniéndose delante de la pareja para ver a Fizzarolli por unos segundos viendo la tristeza en sus ojos:

--adelante, Blitz esta en su oficina--

--gracias...--

--oye, si lo lastimas, te las veras conmigo--

Fizzarolli ni siquiera se detuvo ante esa amenaza para abrir la puerta de la oficina de su querido amigo y cerrarla en cuanto entro provocando una leve discusión entre Millie y Loona:

--¡¿se puede saber porque lo dejaste entrar?!--

--por que te importa--

--¡¿realmente no quieres nada a Blitz a pesar de todo lo que ha hecho por ti?!--

--¡no vuelvas a decir eso, perra!--

--¡claro que lo digo porque dejaste entrar a ese infeliz como si nada después de lo que nos hizo a Moxxie y a mi en Ozzie!--

--¡a mi no me importa quien interrumpa sus estupideces!--

--¡y humillo al jefe con su novio!--

--¡ya basta, deja de juzgar tan rápido, además de que no tengo que darte explicaciones de lo que hago! ¡se muy bien lo que pasa y cual es la mejor solución!--

Las dos estuvieron a punto de pelear que incluso Moxxie trato de detenerlas hasta que de pronto escucharon un ruido dentro de la oficina de Blitz alarmándolos a los tres, de inmediato Millie abrió la puerta de golpe:

--¡maldito payaso, deja en paz a....!--

De inmediato Moxxie le tapa los ojos a su esposa mientras Loona cerraba la puerta de golpe puesto que habían visto demasiado de lo que estaba pasando dentro de esa habitación.

*Dentro de la oficina de Blitz cuando Fizzarolli entro*

A pesar de la advertencia de Loona Fizzarolli estaba seguro de lo que iba a hacer, en cuanto entro a la oficina cerro la puerta detrás de él mientras se iluminaba la cara de Blitz al verlo, de inmediato se levanta de su silla y se acerca al bufón para darle un fuerte abrazo el cual es correspondido:

--te extrañe mucho, Fizzarolli--

--yo también--

--te mande mensajes, incluso te llame y no me respondiste ¿porque?--

--lo siento, tenia mucho trabajo que hacer--

--esta bien, lo que importa es que estas aquí, tengo mucho en mente para el día de hoy, podríamos empezar por...--

Fizzarolli silencia inesperadamente a Blitz con un beso apasionado mientras lo aprisiona en un fuerte abrazo provocando en ambos diablillos una nostalgia que se revolvió con la pasión de varios años atrás que estaba siendo liberada después de tanto encierro, a tal grado que se empezaron a desvestir el uno al otro mientras tumbaban varias cosas por accidente hasta que el payaso levanta al diablillo y lo coloca encima de su escritorio tirando todo lo que había encima de golpe mientras se seguían besando sin percatarse que Millie había abierto la puerta de forma agresiva, ni mucho menos se dieron cuenta cuando Moxxie le cubrió los ojos para sacarla de ahí mientras Loona cerraba la puerta para que siguieran con su intimo momento.

Fizzarolli no dejaba de saborear esos deliciosos labios, mucho menos de estar acariciando esa piel pigmentada y suave que recorría con sus manos provocando que su amante soltara pequeños gemidos, sobre todo cuando sus besos se concentraban en su cuello provocandole pequeños chupetes, que delicia y deleite fue para Blitz al ver como el payaso se colocaba entre sus piernas para hacerle un oral, un oral que nadie lograba igualar ya que esa lengua tan experta además de hacer que su miembro se pusiera de inmediato duro como una roca también lo llevaba hasta la cima del extasis mientras entre gemidos decía el nombre de Fizzarolli una y otra vez como si estuviera a punto de volverse loco, en ese momento la cola de Blitz se enrosco alrededor del miembro del payaso para masturbarlo ya que no quería ser el único que disfrutara de ese lujurioso momento.

Toda la tarde, incluyendo la noche se la pasaron disfrutando el hacer el amor en diferentes formas y posiciones dándose placer mutuo hasta quedar ambos rendidos y satisfechos tal cual fieras en celo.