Capítulo 14 (No hay sueños tontos, solo personas tontas con miedo a vivirlos)

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- ¿Duele en algún lugar? 

-Nop- contesto Saku secando su cabello

-Me alegra oírlo- contesto Mezuki en un tono un poco más tranquilo.

En el televisor de la habitación de Mezuki estaban dando un maratón de las aventuras de Billy y Mandy, en una de las escenas hablaban sobre sus sueños antes de que morir debían de cumplir sus sueños dijo unos de los personajes conocido como puro hueso.

- ¿Cuál es tu mayor sueño? – pregunto Saku mientras estaba de pie y frente a la televisión

-Mi sueño es casarme con un hermoso omega de cabello rosa y llenarlo de muchos hijos- guardo silencio un segundo –creo que mi sueño suena un poco tonto de mi parte- dejo salir un suspiro, sería difícil tener una familia con Saku y ni siquiera sabía y Saku realmente quería algo como eso.

-Digo, personas como tu y yo, en un mundo como este, tener hijos sería algo preocupante para ambos, el saber que podríamos perderlos en algún momento-

Saku apretó su puño con fuerza –idiota, para iniciar no existen los sueños tontos, solo las personas tontas que tienen miedo vivirlos, eso fue lo que dijo Mandy y puro hueso- Saku se ve hermoso haciendo puchero.

Mezuki dejo salir una sonrisa –te justan mucho tus caricaturas- Saku se lanzó rápidamente sobre Mezuki y escondió su rostro en sobre su pecho, en realidad no le justaban mucho ese tipo de caricaturas, eran cómicas, pero eso no le quitaba su toque de terror.

-En segundo lugar, eso es algo que deben hacer los padres, amar a sus hijos sabiendo que en cualquier momento pueden perderlos, además que te hace creer que nuestro hijo será alguien débil que pueda ser lastimado- al escuchar salir esas palabras de los pequeños labios de Saku hizo que todo el cuerpo de Mezuki se estremeciera de la emoción, sabía que sería más peligroso, no solo porque el mundo ya era un caos si no por que los niños serian parte del clan Haru, muchos codiciarían tenerlos.

Mezuki nunca pensó en tener hijos con Saku por su clan, en realidad solo quería ver a un par de pies descalzos corretear por toda la casa, unos pequeños que sin duda serian igual de lindos que su Saku, pero no quería ser codicioso, dirán, aún falta mucho tiempo, pero para la edad que tienen Saku y Mezuki ahora, los emperadores ya esperaban la llegada de Mezuki, vaya que no perdieron el tiempo.

-Está bien, tendremos al menos unos diez hijos- dijo Mezuki con una sonrisa orgullosa sabiendo que podía hacerle diez bebés a Saku.

Saku se sonrojo y le pego en el cabeza con su puño –estás loco si crees que tendremos diez hijos, padres solo tuvieron uno y nosotros también-

-ohh fui codicioso lo siento cariño, pero lo menos que puede bajar mi cifra es a cinco-

El omega rio junto a Mezuki –idiota, ni creas que me llenaras de niños- ambos empezaron una guerra de cosquillas que termino en un par de besos y sin darse cuenta ya era de madrugada, alrededor de las 4 am, no tenían nada en particular preparado para el día siguiente, solo la llegada de los abuelos de Mezuki, cosa que no tenía en absoluto su interés, así que decidieron dormir asta tarde. 

Mezuki respeta a sus abuelos por ser quienes ayudan a sus padres a gobernar Inglaterra mientras ellos viven y gobiernan Japón, pero nunca tuvieron una buena relación, Vivian lejos y de vez en cuando los visitaban pero las visitas se redujeron con ...

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Mezuki respeta a sus abuelos por ser quienes ayudan a sus padres a gobernar Inglaterra mientras ellos viven y gobiernan Japón, pero nunca tuvieron una buena relación, Vivian lejos y de vez en cuando los visitaban pero las visitas se redujeron con la llegada de Saku a su familia.

Al inicio no aprobaron la idea de que su nieto se relacionara con "esa clase de omega", al parecer no era digno, un niño sin nombre que no pertenecía a ningún clan, en otras palabras, un bastardo destinado a ser esclavo de alguna familia adinerada.

Era más que claro el interés de Mezuki hacia aquel niño, así como era casi obvio de predecir que esos dos serian pareja en el futuro, y no se equivocaron, en la actualidad Saku y Mezuki eran la pareja más conocida de Japón, sus abuelos no presionaron más, después de todo la última palabra la tenía Naruki, ellos podían mandar en Mezuki, pero nadie tendría más poder en el que su propio padre, y si su felicidad era ese pequeño niño inofensivo y el pequeño también quería la compañía de Mezuki ¿Quién era el para negarse? Además, a su esposo la emperatriz le gustaba el niño, siempre quiso tener un segundo hijo y que tal vez este sería más tierno que Mezuki, Mezuki desde sus primeros años de nacimiento tenía una expresión imponente y seria.

Los emperadores no pudieron tener un segundo hijo, pero todo cambio desde la llegada de Saku, además Saku desde el comienzo se adaptó muy bien a ellos, en especial a Mezuki.

Los abuelos intentaron acercarse más a aquel pequeño que acompañaba a su nieto todo el tiempo, pero por aquellas frías palabras el niño los rechazaba, por esa razón Mezuki corto lazos con ellos desde muy joven y así mismo los emperadores, llevan años sin ver la cara de su nieto, fue entonces cuando comprendieron que ese misterioso huérfano de ojos morados tenía el poder en sus manos, el poder de usar a Mezuki a su antojo, si era bueno o malo, eso aún no lo sabían, solo lo vieron unas cuatro veces, y la última vez no era más alto que sus rodillas, ahora debía ser un joven hermoso, tanto como la emperatriz, y su nieto debía ser un alfa alto como su padre. 

Nota: así se veía Saku de pequeño 

Nota: así se veía Saku de pequeño 

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