La soledad se aproxima...

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Bartley paso algún tiempo en el hospital, al parecer no tuvo heridas graves y pudo salir de allí...

- Doctor, ¿sabe dónde están mis tíos y mi primo?

- Bartley lamento decirle que ellos murieron, su casa fue vendida...

- Que, ¿cómo que murieron?.- Decía Bartley con lágrimas en los ojos.

Sin importar como se portaron con Bartley, el les tenía un cariño muy grande.

De inmediato, Bartley pensó que tendría que buscar algún lugar donde quedarse. Decidió ir a casa y sacar sus ahorros.

Estuvo todo el día paseando por la ciudad un buscando algún tipo de apartamento para que el se quedará allí. Cuando estaba perdiendo las esperanzas, por fin encontró un lugar. Sin pensarlo entro a preguntar el precio de alguno de los departamentos.

Después de un rato de charla sobre el precio, decidió comprarlo. Ahora tendría que pensar como traer sus cosas.

Entro a el departamento, al parecer es muy grande el lugar, algo que le alegraba. Se sentó en una silla que había allí mientras miraba hacia afuera, y de repente le entró un mensaje de Aily.

Hola Bartley, venía a preguntarte si ya sabías dónde podrías quedarte.

Emm si, ya encontré un lugar. No es muy lejos de tu casa creo, me queda más cerca de tu casa y de la escuela.

Está bien... ¿y ya llevaste tus cosas?

Estaba pensando como podría traerlas, o buscar ayuda.

Mi padre dijo que si quieres el podría ayudarte, no te cobrará nada.

¿Enserio? Si pueden si, me harían un gran favor

Está bien, nos vemos en tu casa anterior.

Dale, ya voy para allá

Cuando terminaron de hablar, de inmediato a Bartley le dió una gran alegría. Por fin alguien estaría ahí para ayudarle.

- Bueno, creo que voy a ir a casa y traer lo más importante.- se decía Bartley en un tono de voz alta.

Cuando estaba llegando a casa recordó como fue el accidente, lágrimas cayeron por su mejilla reflejando el dolor que le hizo sentir ese momento.

Llegó a casa, empezó a empacar su ropa y tratar de llevar lo más importante dentro de una sola mochila.

De inmediato cuando estaba por levantar lo de su cuarto, escucho sonar el timbre de la casa.

- ¡Ya voy!.- Grito Bartley desde su cuarto con alegría

Al abrir la puerta, vio al padre de Aily.

- Emm buenas tardes, mi nombre es Bartley.

- Un gusto Bartley, mi nombre es Kenzie.- decía el padre de Aily.

Bartley les pidió que entrarán, al parecer habían traído una camioneta la cual parece que es en la que le ayudarían a llevar todo.

Aquel inviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora