Capitulo 13

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    Las llamas prontamente comenzaron a devorar la habitación en la que nos encontrábamos, y aquí la duda era: ¿cómo pasó esto?, no tenía idea, y cuando le iba a preguntar a Mar mientras buscábamos con que apagar el fuego, una fuerte explosión nos sacude haciéndonos caer al suelo. Pronto escuchamos voces desesperantes de las personas que vivían en nuestro 3er piso; intentamos salir a toda marcha, pero las llamas no nos permitía avanzar más.

— ¡MAR ES INÚTIL!, ¡Debemos salir de aquí pero YA!

Miré a mi entorno en busca de una salida ya que la entrada de la habitación  estaba bloqueada por el mismo incendio, entonces pensé en las ventanas, una de ellas aún estaba estable, por lo que sin más llamé a mi mejor amiga para escapar. Sin embargo, en ese instante, otra explosión nos sacude de nuevo y las personas que no podíamos ver, pero si oír, estaban gritando y pidiendo ayuda desde el pasillo. Nosotras no podíamos hacer nada, solamente huir de ahí.

Tras salir y aterrizar en las escaleras exteriores del edificio, en el, vimos a varias personas tratando de bajar por estas, y, obviamente nosotras no nos íbamos a quedar atrás. Esta vez, un 3er estallido, hace que las escaleras se tambalee provocando que me tropezara y cayera por la baranda no sin antes sujetarme con fuerza.

— ¡BRIELL! -intenta ayudarme a subir- ¡Resiste.!

Una vez que vuelvo a estar fuera del peligro (más o menos), terminamos de bajar justamente cuando el edificio estaba a punto de derrumbarse después de varias explosiones. Los bomberos no tardaron en llegar para apagar el desastre que fué causado sin razón alguna.

— ¡ALÉJENSE DEL EDIFICIO! -exclama uno de ellos tras bajar del vehículo.-

— ¡PROTEJAN A LOS HERIDOS.! -decía otro mientras que al mismo tiempo llega una ambulancia-

Las personas que lograron salir, estaban atemorizadas, mientras que yo me encontraba en shock, sin poder digerir la situación. Fué todo muy fugaz, Mar, por otro lado, observaba sin tampoco comprender bien; de repente, cómo si no lo esperábamos, el camión de bomberos y la ambulancia estallaron frente a nuestros propios ojos, eso hizo que ambas, saliéramos disparadas hacía atrás, dejándonos casi inconscientes.

Las personas, todas las que presenciaron el momento, estaban en shock; el edificio termina cayéndose a pedazos, todas las personas que habían sobrevivido al incendio, murieron junto con todos los que se encontraban cerca de ambos vehículos, fué una doble tragedia.

— Bri...

Fué lo ultimo que escuché antes de cerrar los ojos...

*Dos horas después...*

08:12 pm

Abrí mis ojos lentamente, mi vista estaba un tanto borrosa, pero esta no demora en aclararse y ver que el lugar en el que me encontraba, era un hospital.

— ¿Cómo se siente...? -oí una voz masculina-

Giré mi cabeza a la derecha para darme cuenta de la presencia de un hombre no muy alto de ropas blancas, tez morena de cabello y ojos oscuros, delgado, aproximadamente aparentaba un sujeto de 33 años que sostenía una tabla de información de sus pacientes en su brazo izquierdo.

— Es...toy... -No podía hablar muy bien, estaba débil-

El hombre no dijo nada más, solamente pude notar en su rostro un cambio de serenidad por un semblante serio y preocupado antes de abandonar la habitación. ¿Qué está pasando...? me pregunté de nuevo, no era normal esto. De pronto, suena el teléfono de la habitación que se encontraba a mi lado sobre una mesita de madera y hierro. Cuando estaba a punto de contestar, entra sin previo aviso una mujer que al parecer se trataba de una enfermera que traía consigo un medicamento para suministrarmelo en la vía que conectaba con una bolsa de suero.

❇La llamada❇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora