Cassie Smith trabaja como Agente de policía y ayudaba de vez en cuando al célebre pintor Carl Manfred en su mansión con sus obras de arte y comprándole ciertos colores de pintura, ganándose la confianza de este último y sobre todo de aquél androide...
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—Perdón el retraso, se cruzó una abuelita y tenía que hacerla cruzar la calle.
Cassie se mostró agitada ante Connor quien soltó una pequeña mueca de gracia ante los dichos de su compañera. Esta recobró el aliento y se dirigieron a la puerta de la casa, haciendo que el androide tocase la puerta reiteradas veces como también tocaron el timbre, Cassie se mostró extrañada y buscó entre las ventanas alguna respuesta, Connor en una de las ventanas miró a Hank tirado en el suelo sin reaccionar, a lo que procedió a romper la ventana llamando la atención de Cassie, este entró y vio al enorme San Bernardo acechándolo.
—Quieto..Sumo. —Connor se mostró algo miedoso ante el comportamiento del animal. —Yo soy tu amigo, ¿ves? —Connor acercó su mano hacia él.
—Primero mi ventana con la pelota, ahora la de Hank con tu codo, bien hecho, Connor. —Cassie cruzó y notó el cuerpo de Hank en el suelo. —Dios santo....
Connor se acercó al cuerpo de Hank mientras que Cassie se acercó al San Bernardo para darle unas caricias y le diera unas olfateadas, sabiendo que también vivía con un perro, Sumo agitó su cola como si la conociera de toda la vida y se le tiró encima dándole pequeñas lamidas en su cara mientras que Cassie intentaba quitárselo de ahí. Connor mencionó que Hank estaba inconsciente por el consumo de alcohol y que estaba al borde del suicidio, esto último sorprendió a Cassie quien apartó rápidamente a Sumo y se acercó al cuerpo de Hank, pero un choque con la mesa principal de la casa hizo que mirara con cierta extrañeza una imagen de un pequeño niño, lo miró detalladamente para darse cuenta de lo que estaba pasando.
«Era su hijo»
Miles de ideas cruzaron en su mente hasta que un golpe la despabiló por completo, Connor le golpeó una cachetada en toda la cara a Hank para que despertara bien, solicitó ayuda en la agente quien dejó la imagen a un lado para levantar a Hank del suelo.
—Lárguense de mi casa. —Hank se encontró en su peor estado de embriaguez.
—Lo siento, Teniente, pero lo necesitamos. —Habló Connor mientras colocaba el brazo de Hank alrededor de su cuello. —Le agradezco de antemano su cooperación.
—¡Oye! ¡Lárguense de aquí, maldita sea! ¡Sumo, Ataca! —El can simplemente observó la escena, dándole un pequeño ladrido. —¡Buen perro! Mierda creo que vomitaré.
Cassie abre la puerta mientras que Connor metió a Hank a la bañera. Connor miró a Cassie asintiendo con la cabeza sobre la idea que tenía en mente, abrió el agua fría de la bañera y los gritos hizo que Hank volviera en sí suplicando que cerrase el paso del agua, haciendo que Connor obedeciera. Hank miró fijamente al dúo confundido con lo que pasó.
—Informaron de un homicidio hace 43 minutos, como no lo encontré en el bar de Jimmy, vine a ver si estaba en casa. —Mencionó Connor. —Cassie llegó hace muy poco.
