CAPÍTULO 31
Leire
Entré en mi casa, cerré la puerta, y me apoyé en ella, ¿por qué el idiota de ojos azules le había de vuelto el DNI? Porque está claro, que viniendo de aquel estúpido, por hacer una buena obra no era... No hacia ni 15 minutos que lo había visto alejarse de mi casa, y quería volver a ver esos ojos azules que hechizaban... ¿Pero qué estaba diciendo? No, no podía se, tenía que sacármelo de la cabeza. Zarandee la cabeza, y me fui al comedor, allí estaban mis dos hermanos sentados en el sofá viendo la televisión.
-Hola Iván, hola Nico.-les digo poniéndome detrás del sofá y revolviéndoles el pelo.
-¡Eh!-me dice Nico apartándose al igual que Iván.
-Hermanita te arrepentirás de haberme despeinado-me dice Iván que se ha levantado y me mira con una cara asesina.
-¡Uy! Es verdad, que tardas más que yo en peinarte-le digo soltando una carcajada.
-Normal, tú ni te peinas...-me dice él cogiéndome desprevenida, y revolviéndome el pelo como se lo he hecho yo, pero a mi me despeina mucho más.
-¡Para Iván!-le digo pegándole con el puño en el pecho.
-Venga, vale...-me dice él.
-Te comportas como un chico de diez años, y no de 20 como tienes.-le digo yendo hacia la cocina para empezar a preparar la comida-¿Qué queréis para comer?
-¿Qué hay?-me pregunta Nico.
-Pues: lechuga, queso, patatas, un poco de pan...
-Creo que es mejor que pidamos una pizza ¿no creéis? –dice Iván entrando en la cocina con el teléfono en mano.
-¡Sí, sí, sí!-grita Nicolás dando saltos por toda la cocina.
-¿Hermanita?-me pregunta Iván levantando las cejas.
-Venga, Leire...-dice Nico que ya se ha parado, y hace pucheros.
-Una de jamón york, queso y champiñones, y otra boloñesa o cuatro quesos-respondo.
-¡Bien!-grita Nico.
-Oído cocina, ahora llamo a la pizzería.
A los treinta minutos llegó el encargado de las pizzas a domicilio, fui a abrirle la puerta, era un chico guapo, pelo negro, ojos azules, me recordó un poco al idiota de la discoteca, ¿pero qué estaba diciendo? Me estaba obsesionando. Me di cuenta de que llevaba un minuto observando a aquel chico, que tenía una bonita sonrisa en los labios.
-Gracias-dije cogiendo las pizzas y empezando a cerrar la puerta, pero el pie de aquel chico no dejó que la cerrara, yo lo miré preguntándome por que habría hecho eso, a lo mejor quería pedirme el número de teléfono, o pedirme para comer con él, yo estaba montándome mis posibles causas cuando el chico dijo:
-Son 19,50 euros, por favor.-me dice él sonriéndome de nuevo.
-¡Es verdad! Lo siento, voy a buscar el dinero ahora vuelvo-le digo dándome con la mano en la frente. Me doy la vuelta y voy a buscar el dinero, mientras tanto Iván se va hacia la puerta y se pone a hablar con el repartidor.
-¡Eh! ¿Qué pasa tío? ¿Qué tal todo?-pregunta Iván dándole el típico saludo entre chicos al repartidor.
-Pues nada, trabajando... ¿esa quién era? ¿Tu novia?-pregunta el repartidor, curioso.
-¡Qué va! Es mi hermana pequeña, Leire.
-Ah, vale
-¿Qué tal tu hermano?-pregunta Iván-hace mucho que no lo veo.
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Tú y yo, juntos...
Teen FictionTres amigas. Tres chicos. Tres historias de amor que cambiarán sus vidas. Amanda, Leire y Amelia, son tres chicas de 16 años,que buscan un chico especial que llene sus vidas, pero para conseguirlo, tendrán que superar varios obstáculos que la vida l...