Once

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Capítulo 11:

Cuando me cansé de leer, noté que se hizo de noche. Me distraje de la lectura debido al cansancio de mis ojos, y el sonido de mi teléfono celular debajo de la almohada de mi cama.

Lo tomé; Edu.

Pensé un momento si debía contestar o no. Pero mi dedo fue más rápido que mi mente.

-       ¿Hola?

-       Jade. Sal fuera de tu casa, urgente.

-       ¿Qué pasa?

-       Es urgente. Estoy afuera.

Bajé las escaleras rápidamente. Mamá estaba en la cocina, papá no estaba allí.

Salí fuera de la casa, y me topé con Edu parado en la calle desolada, con las manos atrás de su espalda.

-       Me asustaste. ¿Qué pasa?

Permaneció callado, y de su espalda, extendió las manos con rosas blancas.

Sonreí. Nunca nadie me había regalado rosas, y menos Edu, que no era para nada romántico o detallista.

Las tomé, y las contemplé.

-       Avisa que saldrás

-       ¿Qué?

-       Esta noche saldremos a comer-.afirmó sin titubear-.

-       ¿Siquiera me has preguntado?

-       Sé que quieres.

Entré a casa, y subí a mi cuarto a dejar las rosas ocultas. Y me puse una chaqueta cualquiera. Eché algo de dinero guardado en mi mesita de noche, a mis bolsillos.

-       Mamá-. Dije entrando a la cocina-.

-       ¿Qué?-. dijo distraída mirando la televisión-.

-       Voy a salir

-       ¿Con quién?-. se sobresaltó-.

-       Con Edu.

-       ¿a dónde?

-       A comer

-       Anda. Pero si te llamo, debes contestar el teléfono...

-       Ok

-       Te quiero temprano en casa

-       Está bien...

-       Cuídate hija-. Me dijo con esos tonos de que algo malo pudiese pasar.

-       Sí mamá

Salí fuera.  Y encontré algo que no me esperaba en absoluto. Edu estaba sobre una moto negra, con un caso del mismo color, preparado para acelerar.

-       ¡¿Tienes una moto?!

-       Sí-. Me dijo-. Es nueva

-      !Genial! Es muy linda. ¿Tú te la has comprado?

-       Así es.

-       ¿De dónde has sacado el dinero?

-       Tengo mis ahorros... ahora, sube.

Me senté enseguida tras él, y me ayudó a ponerme el casco. La motocicleta era larga, con ruedas gruesas. Tenía un pequeño portamaletas detrás, y el manubrio  era negro con decoraciones hechas de cuero.

Etérea ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora