La Asistente

Creo que me excedí

— ¿Estás bien, Sasuke? — Shikamaru le preguntó a su amigo quien se había quedado pasmado mientras llevaban a Naruto a su antiguo departamento.
— Teme... ¿te sucede algo?
— Nada, tranquilos — Dijo Sasuke — Naruto, voy a usar tu baño.

Sasuke se apoyó en la puerta del baño. Una avalancha de información y de emociones había regresado junto a la conciencia de su clon. Mientras él había tenido que consolar a Naruto y sacarlo del modo estropajo en el que estaba, su clon transformado en Saori lo había tenido muy difícil.

Cerró los ojos y pudo sentir la emoción que había tenido su clon al tomar conciencia que Naruto podría salir y acostarse con quien fuera. Se sintió tan ahogado como su clon, solo el visualizar a Naruto con otra persona... le generaba rabia y ansiedad.

Mierda y estaba lo de Sakura también.

Y hablando de ella misma. Sasuke sintió la voz de su esposa tras la puerta. Tenía tantas cosas en su cabeza en ese momento que lidiar con Sakura y su pregunta de ¿por qué no había ido a casa? no era algo que quisiera. Salió del baño, no podía quedarse encerrado ahí hasta que se fuera su esposa. ¿O si?

— ¿Querido, estabas acá en la Aldea? — preguntó Sakura al verlo.
— Si, Sakura. Vine hace un momento, sentí una perturbación en el chakra de Naruto y vine a ver qué sucedía.
— Ooh, yo me enteré por Hinata-chan — dijo Sakura, triste — Ella está muy segura de que esto no tiene vuelta atrás.
— Es lo mejor para los dos, Sakura-chan, — comentó Naruto — yo no la amo. La verdad, creo que siempre la quise por ser la madre de mis hijos... pero lo que siento por ella no es amor verdadero.
— Pero Naruto, la salvaste de ese tipo en la Luna y ahí te enamoraste de ella.

Naruto sonrió. La Luna, ese idiota había elegido la luna, y coincidentemente luego de eso, se podría dar a Hinata ese simbolismo en su vida. Él tenía solo una Luna, y se encontraba justo a su derecha, apoyado en su comedor.

— Sakura-chan, entiendo que te duela, porque tu hiciste de cupido en esta historia — sonrió Naruto.

Espera un momento, pensó Sasuke, Sakura había unido a Naruto y a Hinata... Claro que Sakura se había dado cuenta del lazo entre él y Naruto. Y peor aún, había metido a Hinata al medio.

— Que amable de tu parte, Sakura — dijo Sasuke.
— Es que los dos eran muy lentos y no se daban cuenta de lo que sentían — sonrió ella.
— Pero ahora eso ya acabó. Y ya no hay vuelta atrás — suspiró Naruto — ahora podré dedicarme a lo que amo de verdad.

¿Eso había sido lo que ella creía que había sido? Sakura se sorprendió. ¿Naruto le estaba haciendo ver que ahora iba por Sasuke? ¿Por SU Sasuke? su ojos azules tenían una mirada era firme. Miró a su esposo, quien tenía una expresión de confusión, su guapo marido aún no tenía idea de nada al parecer.

— Me hace muy feliz que puedas hacer lo que te gusta, Naruto.

El rubio sonrió.

¿Que se supone que era esto? Sasuke no podía creer lo que estaba pasando; aquello que Naruto amaba de verdad, era... ¿él? ¿O Konoha? Necesitaba aclarar todo.

— Sakura ¿eres feliz conmigo? — lanzó Sasuke sin anestesia. Provocando un atoro por parte de Naruto quien tomaba un té y la sorpresa de su esposa.
— ¿Qué quieres decir, cariño? Por supuesto que soy feliz contigo.
— Estuve analizando lo que le dijo Hinata a Naruto, y pensé que tú podrías estar pasando por algo similar —Sasuke miró a su esposa, quien negó con la cabeza — Sakura, estuve 13 años fuera de la aldea. Me he tenido que ganar el amor de nuestra hija, he sido un pésimo padre y un pésimo esposo. ¿Porque habrías de ser feliz conmigo?
— Querido... yo... — dijo Sakura con los ojos vidriosos.
— Sakura, yo te quiero, de verdad, con todo mi corazón, pero no te mereces un hijo de puta como yo en tu vida. Eres una mujer maravillosa...
— Sasuke... kun...
— Teme ... — chillo Naruto, sorprendido.

— No creas que esto se dio por lo de Naruto. Es algo que he pensado hace tiempo, solo que ahora, al saber cómo se sentía Hinata, me di cuenta de que ya no puedo seguir reteniéndote junto a mi, seguir haciéndote más daño.
— Sasuke, yo no me queiro alejar de ti... yo quiero seguir contigo...
— Sakura, hace años que no tenemos nada. — dijo Sasuke — un juez te dará la nulidad de inmediato.
— ¡¡He estado tantos años enamorada de tí, y así es como me pagas, Sasuke Uchiha!¡
— Sakura, no quiero hacerte más daño... uno de los dos debe terminar esto.
— De verdad si eres un hijo de puta, Sasuke Uchiha. ¡Crié sola a tu hija, te he sido fiel todo este tiempo!  ¿Qué te pasa?
— Por lo mismo, Sakura, piensa, he sido un esposo trofeo para tí.
— ¡Qué trofeo! — chilló Sakura — estar casada contigo o no, viene a ser lo mismo. Creo que solo me aferré a la imagen del Sasuke del que me enamoré cuando era niña.
— Lo siento, Sakura. No dudes de lo mucho que te quiero.
— Lo sé. Pero el cariño nunca fue suficiente, Sasuke. —dijo Sakura mientras caminaba hacia la puerta — Espero que estén bien, me voy, tengo mucho que pensar. Adiós.

Sakura salió como una tormenta, Sasuke sabía que se aguantaba el llanto.

— ¿Que se supone que fue eso, Teme? — dijo Naruto en shock,  levantándose de donde estaba para hacia donde estaba Uchiha.
— No quería que Sakura y yo siguiéramos viviendo una mentira.
— Según tú Hinata no te inspiró, pero...
— Pero me hizo comprender lo que sentía ella y además de un contexto para decirle esto a Sakura.

Naruto se acercó a Sasuke, y lo observó.

— ¿No estás triste?
— No. Me saqué algo que me pesaba desde hace mucho ¿porque habria de estarlo?  — dijo Sasuke, Naruto se sorprendió — tu situación es diferente, tú habías hecho tu vida con Hinata.
— Es verdad — dijo Naruto y volvió a su actitud triste.

Sasuke hizo la cena, ambos lavaron la loza y vieron un poco de televisión. A ninguno de los dos le sorprendió que en un programa de farándula se especulara la ruptura del matrimonio del Hokage.

— Eso fue rápido.
— Hinata y tú no fueron "discretos" — sonrió Sasuke.

Como era de esperarse, culpaban al Hokage de ser trabajólico y de quizás tener a otra persona. Apagaron la televisión ya era tiempo de ir a dormir.
— Esta cama es más pequeña que la del departamento de Saori — dijo Sasuke sacando una almohada y cobija y llevándola hacia el sofá.
— Duerme junto a mí — pidió el Hokage con voz ronca y llena de necesidad.

Sasuke se giró, la frase anterior de Naruto no había sido una petición sonaba como una demanda.

— Naruto, existe la frase, por favor, no se si la habías escuchado — dijo Sasuke, un poco incrédulo del tono que había usado su amigo.
— Necesito que duermas conmigo, Uchiha — dijo Naruto y vio a Sasuke elevar sus cejas — por favor. Por favor... dije por favor!

Sasuke se metió en la cama y en un segundo tenía a Naruto frente a él.
— ¿Tan solo te sientes hoy que hasta yo puedo calmar tu soledad? — dijo Sasuke, mirando a Naruto quien estaba perdido en su rostro, sin obviar cualquier  gesto de Uchiha.
— No pedí a nadie más, Sasuke, a nadie.

Sasuke tragó saliva, ese comentario...

— ¿A qué te refieres con eso? — preguntó Sasuke esperando una obvia respuesta.
—  Escuchaste lo que le dije a Sakura-chan. Que iba a dedicarme a lo que amaba — Naruto se acercó a él en la cama dejando a Sasuke apegado a la muralla con muy poquito espacio personal  —y resulta que lo que más amo... esta justo frente a

**Ding dong.

El timbre del apartamento había sonado y ambos hombres se habían sobresaltado de sobremanera.

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Hola hola hola!!
Les traigo nuevo capitulo!
No tenido tiempo de escribir, tengo un par de capítulos adelantados, pero hay que darles una vuelta.

Ojalá les guste este!

Tomatitos y Ramen para ustedes!