ᴍᴇ ᴄᴀᴇ ʜᴏʀʀɪʙʟᴇ, ᴘᴇʀᴏ ᴇꜱ ʟɪɴᴅᴏ

Capítulo 9

¿Me bombardearon con preguntas cuando notaron que Camilo estaba frente de la casa solo? No. Tal vez el italiano les dijo algo, pero sea lo que haya dicho, no me importa.

Quisiera decir que no quiero lidiar con él, quisiera decir que no lo volveré a ver, pero para mí mala suerte nuestras familias son muy unidas lo que implica que lo veré muchísimas veces más... y eso incluye hoy. Sí, hoy: 12 de junio. No me sorprendía que después de que nos visitaran ayer tengamos que volver a vernos hoy. Son gente de dinero; pueden festejar las veces que quieran... aunque realmente no sé cuál es la razón para verlos otra vez.

— Hola Camila — la voz de mi abuela hizo que saliera de mi trance

Me volteé en mi cama y la miré. Aun no me acostumbraba a verla más viva... pero me encantaba.

— Hola awela, ¿qué pasa? — su semblante me dejaba saber que no venía solo a saludarme

— Noté tu rostro cuando Valentino dijo que nos veríamos con los Grimaldis hoy. Mira, no tienes que ir si no quieres, ¿sabes?. Llama a las chicas y sal con ellas — llevó su mano a mis rostro para mover varios mechones de mi cabello — Festejaremos un poco con ellos, pero nos reunimos para pedirles un pequeño favor. Créeme que no causarás una mala impresión al no presentarte — se acercó a mí y besó mi frente para luego alejarse y caminar hasta la puerta — Piénsalo y nos dejas saber — se fue

¿Pedirles un favor? ¿Favor de qué?

Sabía que mis abuelos se irían de viaje dentro de dos días. Era triste ya que vine para pasarla con ellos, pero el abuelo no podía mover de día sus importantes reuniones. Sacar fechas para poder reunirse con gente igualmente ocupada era difícil, así que no me sentía desanimada o algo por el estilo. Además de que tendría a los hermanos Santoro conmigo.

La razón por la cual no quería ir era muy obvia: los hermanos Grimaldis. Si bien Camilo me sacaba por techo, los otros tres también al seguirle las bromas a ese idiota. Además de que los gemelos me ponen algo nerviosa. Aun así quería presentarme porque sé que la familia estaría a gusto de verme y no quiero que piensen que tuve una discusión con Camilo ayer, lo cual si sucedió pero a nadie le importa.

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— ¿Entonces sí irás? — preguntó Bianca desde la otra línea de llamada

— Claro que sí irá. Nuestra Vany es toda macha alfa. Que no te intimiden esos guapetones, linda — Beatrice me alentó a su manera

Reí y agarré la primera ropa que encontré en el closet: unos high rise shorts negros, una camisa blanca/corta de tirantes finos y unas blaire sandalias color negras –Dr. Martens–. Agarré mi bolso de Harry Potter, hice de mi cabello un moño y me coloqué mis queridas y redondas gafas de sol encima de mi cabeza.

— Estoy lista — les enseñé a las chicas — ¿Qué creen? — esperé por sus respuestas

— Pensé que te vestirías más formal — soltó Beatrice

Di unos pasos hacia atrás y me miré el espejo. Olvidé por completo que no iba a la casa de una amiga, sino que a la casa de los Grimaldis. Solté un sonido de queja horrible y me senté en la orilla de la cama, cuando mi abuela Carmen entró.

— Oh, ¿acaso uno de los chicos te dijo de la piscina? — mi abuela me miró de arriba abajo con emoción — Que tu traje de baño no sea muy revelador porque habrán muchos hombres — volvió a irse

Me quedé en silencio mientras le regalaba una sonrisa tonta a la nada. Sus últimas palabras resonaron varias veces por mi cabeza hasta que finalmente caí en cuenta y eso hizo que mis ganar de presentarme desaparecieran.