Web of Spider-Man

La nueva normalidad

Un día nuevo acaba de empezar en Nueva York.

La gente ya estaba en camino a iniciar su día de trabajo, en especial los arquitectos, quienes se encargan de vigilar y hacer trabajos de construcción en los edificios que aún no han construido.

Peter Parker, también conocido como Spider-Man, ahora mismo estaba durmiendo plácidamente.

El totem arácnido se sintió molesto al momento en el que los rayos del sol daban contra su rostro.

— Hmm…— gimió al momento de sentir el calor—. Cierren el sol y apaguen la ventana.

Peter abrió lentamente los ojos, notando que estaba en el mismo departamento de anoche. Ahora, recuperando la consciencia, comenzó a mover su mirada de un lado a otro.

Ahí pudo notar que Anya Corazón estaba a su lado. Al instante recuerda lo que pasó anoche. Alza las sábanas y puede ver que están completamente desnudos.

— Bien. ¿Qué horas es?— se pregunta así mismo, agarra el reloj que dejó en la mesita de luz y mira la hora. Dicha hora es la 9:36—. Carajo, ya llegaré tarde. 

Peter mueve con un poco de fuerza el brazo de la muchacha latina. Ella gime un poco en el momento que interrumpían su sueño.

— Oye, Anya— Peter murmura. La chica se hace a un lado y se estira. El castaño no dice nada, solo se quita la sábana y se levanta de la cama.

Al momento de hacerlo se comienza a poner su ropa para prepararse e irse al trabajo. Mientras hacia eso, Anya se encontraba despertando. Al igual que Peter, ella se despertó de forma lenta.

— ¿Peter?— Anya pregunta, ella abre los ojos y se sienta en la cama. Puede notar que Peter ahora ya tenía su ropa, a excepción de su camisa, y supuso que se iba a algún lado—. ¿A dónde vas?

— Tengo trabajo, ¿Recuerdas?— Peter contesta, poniéndose su camisa.

— ¿No puedes faltar un día?— Peter sonríe al ver esa "tristeza" en ella.

— No, además, es un trabajo que le prometí a alguien; no debo faltar.

El castaño agarra unas llaves y se las da a la latina, ella observa las llaves con confusión. Peter se acerca a ella.

— Recuerda cerrar la puerta— Peter le da un beso profundo, Anya siguió esa intensidad que el castaño estaba dando. Peter se separa y sonríe.

— Nos vemos, Sofía.

Peter sonríe para luego darse la vuelta y así buscar la salida. Anya se queda viendo la puerta, cuando finalmente Peter sale ella se desploma en la cama y sonríe contenta.

Después de todo, lo logró.

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Una persona normal iría en autobús o en su auto al trabajo.

Excepto Peter Parker.

Spider-Man vitoreó mientras se columpiaba a gran velocidad por la ciudad de Nueva York. Pasaba tan cerca de los autos que las personas temían de que se estrellara contra un auto.

Hace algunas maniobras en el aire con ayuda de semáforos, gruas de construcción, entre otras cosas.

Spidey se detiene en la orilla de un edificio. No estaba cerca de W.E.B pero se detuvo porque su sentido arácnido estaba activo. Confundido, comienza a buscar el origen de ese posible peligro cuando de pronto mira un banco.

— ¿Un banco? Es el único sitio donde hay peligro por esta área— no había nada que lo comprobara pero era muy seguro.

Después de unos segundos pudo oír que las alarmas del banco sonaban. Peter suspiro frustrado, esos ladrones saben que Spider-Man puede detenerlos pero aún así siguen cometiendo crímenes. Se levantó la máscara y comió una manzana.