El Diablo Viste De GUCCI || Larry Stylinson

Capítulo 23.

Así que Rose tenía razón.

Fue toda una experiencia, si se le permite decir. Los nervios lo habían estado consumiendo mientras se colocaba los pantalones de chándal sueltos y la camiseta para dormir que Harry le había prestado. Puede que se haya tomando más tiempo de lo necesario en el baño, pero Harry jamás lo presionó ni le toco la puerta. Una vez que estuvo listo, luego de un largo suspiro y un último vistazo a su reflejo en el espejo, Louis salió con la mirada gacha, sintiéndose avergonzado de repente.

Estaba prácticamente nadando en la ropa de Harry, tuvo que atar un nudo en su cintura para que no se le cayeran al piso al caminar. La camisa le cubría mas allá de los muslos y las mangas cortas casi le llegaban a los codos. Se sentía la cosa menos atractiva del mundo.

Todo cambio cuando no vio nada más que adoración en los ojos de Harry una vez que se encontró con él.

"Me encanta", había dicho. Louis no lo entendió.

"¿El qué?"

"Tú en mi ropa. Si por mí fuera, te tendría así todas las noches."

No hace falta decir que toda inseguridad de Louis se esfumó con esa simple declaración.

Se recostaron en la gran cama después de eso, cada uno adueñándose de un lado sin decir palabra. Aún con la luz apagada de la mesita de noche, ambos permanecieron con la mirada clavada en el techo durante un tiempo. Louis sabía que Harry seguía despierto, considerando la tensión que los rodeaba. La incomodidad y una sola pregunta no dicha estaba bailando entre ellos, Louis podía sentirla.

Ni siquiera tenía sentido, ya que habían establecido que sería bueno acurrucarse mucho antes de subir a la habitación. A falta de un movimiento de parte del otro, Louis se preguntó si Harry había estado hablando en serio.

Estaba apunto de preguntarle cuando Harry bufo en medio de la oscuridad. "Ven aquí", había murmurado, abriendo los brazos para que Louis se metiera entre ellos.

No se lo tuvieron que decir dos veces.

Suspiro aliviado cuando sintió la mano de Harry recorriéndole la espalda, apenas siendo un toque suave. La cabeza de Louis se apoyo en su pecho, subiendo y bajando junto con su respiración tranquila. El movimiento ni siquiera era molesto. Se quedó dormido así y lo último que sintió ese noche fue el roce de unos labios cepillando su frente.

Así que sí, Rose definitivamente tenía razón.

(....)

El toque de la punta de un dedo deslizándose sobre la pendiente de su nariz fue lo que lo hizo despertar.

Lo primero que hace Louis es arrugar la nariz antes de abrir uno solo de sus ojos. Al hacerlo, se encuentra con el tono de verde más hermoso en la tierra.

Cursi, sí ¿y a quién le importa?

"Hola", Harry saluda, su sonrisa demasiado cerca. Considerando lo fresco que se veía, Louis podía decir que él llevaba un buen rato despierto.

"Hola", murmura con una sonrisa tirando de su boca. Se acurruca más entre la sábanas, descubriendo que sus pies están enredados con los de Harry. "¿Estabas observándome?"

"No", dice él, sonando en el borde de lo ofendido. Incluso cuando definitivamente él estaba observándolo ahora.

"Haré como si te creyera", Louis decide no presionar demasiado. Todavía no conoce lo que si y lo que no le hace sentir cómodo. "¿Dormiste bien?"