Capítulo 7.

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La luna puede observarse desde donde está acostado. El marco de la ventana la enfoca de manera perfecta, casi haciéndo que luzca como una pintura.

Another One Bites The Dust está reproduciéndose en el tocadiscos de segunda mano de Anna, mientras Zayn esta desparramado en el suelo mandando mensajes de texto. La melodía y el sonido de las teclas del celular se mezclan con los ladridos de Spike, que está furioso porque no logra arrebatarle una pelota a uno de sus compañeros. Una escena nada fuera de lo común.

Louis escucha un pequeño crujido proveniente de su espalda baja cuando estira una de sus piernas. Cierra su ojo izquierdo y se pregunta si su dedo gordo sería capaz de tapar la luna.

"Te ves como un estúpido", Anna lo observa desde el borde de la cama, como si creyera que Louis está loco. Arroja a su dirección la camiseta desgastada que tiene en la mano.

"Pero no tan estúpido como Zayn", Louis dice, atrapando la prenda para evitar que le golpee el rostro. Trata de reprimir las ganas de burlarse de la situación en la que su amigo se encuentra. Él de verdad trata, pero es algo casi imposible. El artista tuvo la brillante idea de confiscar la pelota y ahora ambos lo ven tratando de huir del pequeño Spike enfurecido. "Él sí que es estúpido."

"Los estoy escuchando", Zayn brinca de un pie a otro para evitar que los filosos dientes del diminuto perro lo alcancen. Estar descalzo nunca le había parecido tan mala idea. "¿Podrían ser de utilidad y ayudarme con este demonio?"

"Spike siempre fue mi favorito", Louis comenta casual, mientras se cambia de una camiseta a otra.

Anna se sienta a su lado y observa la escena con atención. "Realmente está atacando a Zayn."

"Zayn se metió con él primero."

Ellos no son malos amigos. De verdad que no lo son. Sin embargo, es inevitable estallar en una carcajada cuándo (por culpa de otro juguete) Zayn cae directamente al suelo.

"Dios", Anna se abraza el estómago con sus brazos, "Sí que es estúpido."

Zayn arroja la pelota al otro lado de la habitación antes de que el cachorro se le tire encima. "¡Ahí tienes bestia!", él bufa cuando Spike sale disparado, "Gracias, es bueno saber que puedo contar con su ayuda."

"Claro que cuentas con nuestra ayuda, amor", Anna le asegura, entre risas.

El moreno sacude su ropa cuando se pone de pie. Cara sería y labio inferior sobresaliendo. "Sí, me quedó claro."

"Tendrás nuestra ayuda solo en situaciones verdaderamente importantes, como cuando tengas que robar un banco o cuando tengas que huir del país", Anna deja caer su espalda en el colchón, con uno de sus brazos tras su cabeza. "No cuando un cachorrito quiera jugar contigo."

"Eso pudo ponerse feo, pudieron lastimar esto", Zayn extiende sus palmas con teatralidad. "Las valiosas manos de un artista."

"Por favor, Z."

"Son mi herramienta de trabajo, sin ellas no soy nada."

"Deja de llorar", Anna rosopla, rascándose el estómago. "Nunca lastimarían a alguien. Los eduque yo misma."

"Sí, eso dice mucho." Zayn murmura con sarcasmo, comenzando a levantar los juguetes dispersos en la alfombra.

"Solo quieren jugar, no es culpa de ellos que tú seas tan aburrido."

"No soy aburrido. Tus animales son una amenaza."

Anna se levanta en sus codos, ofendida. "Repite eso, remedio de pintor."

"Déjalo, Anna. Zayn tiene razón", Louis interviene, recargando la cabeza en el regazo de su amiga para evitar que se levante. La cara del artista esta tan llena de asombro por tener a alguien de su lado. "Pudieron haberlo asesinado allí abajo."

El Diablo Viste De GUCCI || Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora