GAMAN || ENHYPEN (Retomada)

Capitulo 3

El viento azotaba con fuerza su rostro, intentó cubrirse con sus manos, pero poco útil resultó, el clima parecía horrible y Sunoo por un momento extrañó el ardiente sol del verano.

"¿Qué pasa, agosto?" Se preguntó, pues para Sunoo agosto era de los meses con mejor clima del año, suponía que la madre tierra estaba molesta por algo en aquella frívola tarde.

Observó a los estudiantes ir llegando de a poco, buscando entre los grupos de chicos que llegaban, a tan extraño jóven que le atraía tanto, en un sentido poco romántico, queda aclarar, le atraía en demasía debido a la curiosidad tan inexplicable que encendía en él, le daban ganas de conocerlo de pies a cabeza para descubrir qué pasaba por su mente. Buscó por largo rato a la capucha negra que siempre cubría su cabeza, y los desgastados zapatos con los que siempre iba vestido.

Pero no lo encontró.

Su mejor amigo llegó junto a él y cubriéndose también del turbulento viento, le preguntó:

— ¿Por qué tanta urgencia de venir antes si aún no has entrado? ¿Me esperabas, acaso?

— No, claro que no. — le contestó — Solo que no ha llegado a quién espero.

— ¿Y a quién esperas?

— A Lee Heeseung. — remató.

La mirada de Jungwon lo imaginó muerto en millones de situaciones.

— Tú realmente te haz vuelto loco.

Los próximos 5 minutos Jungwon se dedicó a darle un sinfín de sermones que argumentaban el porqué relacionarse con Lee Heeseung era una pésima idea.

El mayor tenía fama de chico problemático gracias a los constantes rumores que corrían sobre él. Todo el mundo hablaba del Lee Heeseung que se pasaba las jornadas de estudio dentro de la dirección escolar, hablaban del chico que nunca entraba a clases y que a la mínima dificultad que se le presentase, estallaba en un desastre de golpes y actitudes desagradables. Todos los estudiantes hablaban del poco autocontrol sobre sí mismo.
Uno de los incidentes más recordados, es aquél en que Lee Heeseung había tenido que asistir a la enfermería por razones desconocidas, sin saber realmente lo sucedido, todos se enteraron de que el estudiante había golpeado a la enfermera hasta dejarla casi inconciente.

Desde aquel día, todos temen al nombre del misterioso, problemático e inusualmente guapo: Lee Heeseung.

Una historia digna de una novela dramática, se repetía Sunoo cada que escuchaba los mismos relatos de sus compañeros de clase.

Sin embargo, él veía mucho más allá de simples rumores, algo dentro de sí mismo le decía que Heeseung no era una mala persona, solamente era alguien que seguramente había tenido que enfrentarse a muchas cosas y eso lo llevo a tomar reacciones inesperadas para todos. No lo justificaba, por supuesto, pero le llamaba tanto la atención descubrir qué es lo que realmente sentía y pensaba su compañero escolar.

Tanto le emocionaba la idea de saber sobre él, que sus ojos brillaron cuando lo vió desapercibido entre la gente, acercándose con velocidad hasta el enorme portón.

— Debo irme, Jungwon.

— ¡Oye! ¡Kim Sunoo!

Ignoró el llamado de su mejor amigo y se alejó para encontrarse cara a cara con Heeseung, por segunda vez.
Lo observó con detenimiento; sus conocidos zapatos viejos, jeans descoloridos, un suéter negro, tan grande que le llegaba a la mitad de los muslos y su capucha cubriendo sus orejas y parte de su rostro, con ayuda de su oscuro flequillo que seguramente quitaba visibilidad a sus ojos, pero al mayor no parecía importarle.