Había pasado una semana desde la fiesta, sin lugar a dudas no estaba en mi mejor momento, desde que Emma se enteró de mi ruptura con Marc no ha dejado de cuidarme y estar conmigo.
No había vuelto a hablar con Dereck, sé que debería de hablar con él para agradecerle todo lo que hizo por mí.
Luego tendremos una conversación, sin lugar a dudas necesitaba pedirle perdón por haberlo puesto en aquella situación.
Esta semana había sido horrible, en estos momentos era cuando de verdad extrañaba a mí familia.
Necesitaba el apoyo de mi madre, los consejos de mi padre y las risas que me echaba con mi hermana Eva.
También me dí cuenta que Marc ya había oficializado su relación con Natalia, eso no ayudó mucho a mi ejercicio mental de intentar olvidarlo, lo único que hizo fue que yo estuviera peor de lo que me encontraba.
Pensaba que al romper conmigo Marc se daría un tiempo de luto antes de iniciar una relación con ella, pero evidentemente ese luto nunca llegó.
Con todo esto que había pasado llegué a la conclusión del tipo de persona que era Marc.
Una persona fría, calculadora y falsa.
Nunca me hubiera imaginado que a una persona a la que había querido tanto podría llegar a ser así.
¿Por qué me había hecho esto?
¿Había sido una mala novia?
¿No le había dado lo suficiente?
Miles de preguntas sacudieron mi mente como un remolino, ninguna de las preguntas que me hacía tenía sentido, yo le dí a Marc todo lo que le pude dar y más, y él en vez de valorarlo lo mandó a la mierda para irse con la chica que miles de veces había criticado.
Después de un rato pensando decidí levantarme de la cama e ir a desayunar, tenía que tener mi mejor cara, ya que ni Phillip ni Melissa sabían lo que había pasado, la única persona que lo sabía era Emma.
Me lavé la cara y me cambié de ropa para no tener que llevar el pijama que llevaba desde hace días, sé que debería de lavarlo, pero sinceramente lavar el pijama era lo último en lo pensaba estos días.
Salí de la habitación para dirigirme al cuarto de Emma, que estaba cerrada, toqué la puerta para ver si me abría, pero al no haber respuesta opté por abrir la habitación, me encontré el cuarto totalmente a oscuras y a una Emma profundamente dormida.
Decidí volver a cerrar la puerta para dejarla descansar, me volví hacía las escaleras para bajar abajo, pero justo en ese momento una música sonó del cuarto de Dereck.
Estaba despierto.
Era mi oportunidad para hablar con él sobre la otra noche y así poder disculparme por todo el trabajo que le causé aquel día.
Me detuve delante de su puerta decidiendo que hacer, una parte de mí solo quería huir y no hablar del tema nunca, pero la otra decía que tenía que ser valiente y agradecerle a aquel chico todo lo que hizo por mí.
Porque ahora que lo pienso.
¿Qué hubiera pasado si Dereck se hubiera ido con Evolet y me hubiera dejado tirada en ese baño?
No me lo quería ni imaginar.
Venga Rebeca.
No seas cobarde.
Respiré profundamente unas cinco veces y me dispuse a tocar la puerta.
No sabía el porqué, pero estaba temblando.
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Storge
RomanceRebeca ha esperado toda su vida para cumplir su mayor sueño. El residir en Estados Unidos y vivir todas aquellas cosas con las que había fantaseado de niña. En la casa donde vive, conoce a Dereck, el hijo de los padres que habían acogido a Rebeca d...