El secreto de Draco

Castillo parte 3

La batalla fue desastrosa realmente hubo un balance de 40 muertes entré mortifagos y estudiantes.

Harry era uno de ellos lo verdaderamente difícil fue separ a Draco de el cuerpo de su ahora difunto esposo.

Narcisa estaba gravemente herida y Lucius Malfoy estaba muerto.

Tenían que llevar el cuerpo de Harry para el velorio, y los entierros de las víctimas.

Regulus estaba a salvo, eso fue un consuelo, pero estaba desesperado necesitaba una solución.

Hermione apareció ante el con olor rojos, Ron la seguía traían alguna cosas en sus manos.

La chica frente a el su varita, también la de saúco, la capa de Harry y ese monedero horrible que usaba, ahí estaba la snitch algunos objetos personales he incluso un chupón de repuesto qué siempre llevaba a todas partes.

-Harry querría qué tuvieras esto estoy segura- dijo la castaña sentandose a su lado y sobando su espalda.

-La herencia de los Black pasará directamente a ti como todas las posesiones que eran de Harry- siguió hablando

¿A quien le importaban las posesiones o las herencias en este momentó?

-Quiero estar sólo- respondió al fin parecieron entender porque no hicieron más preguntas antes de dejarlo otra vez en esa habitación de el castillo, no creía haber estado alguna vez ahí.

Miro la varita, la varita de saúco, antes perteneciente a Dumbledore, también la capa y acarició suavemente la tela de está se la acercó a la nariz aún tenía un leve aroma a su chico dorado.

Finalmente la snitch "Me abro a el cierre" ¿Que significaba eso? No habían encontrado forma de abrirla, las snitch tenían memoria en primer año cuándo le arrojó esa recordadora y el la atrapó nunca creyó verlo tan feliz.

-Deberíamos volver a esa época dónde yo arrojaba una recordara y tu volabas para atraparla- acarico la pequeña bolita dorada -Harry está muerto- dijo con su voz quebrada.

La stich se abrió y una piedra negra con una grieta salió de dentro.

La tomó y analizó esa piedra ¿Por qué una piedra? Un momentó,una capa, la varita y una piedra, Dumbledore quería que tuvieran esos 3 objetos, por algó quería eso.

El cuento lo decía 3 vueltas y podía llamarlo ¿Lo traería de vuelta? Hasta el momentó no había forma de volver el alma a el cuerpo, pero tenía que intentarlo.

Dio tres vueltas a la piedra pensando en él, se materializó una figura casi trasparente frente a él.

-Harry- pronunció viendo que al parecer era sólo un espectro.

-Hola amor- respondió viéndolo, no podía tocarlo pero estaba ahí -No deberías llamarme ¿Sabés? en el cuento eso tenía consecuencias-

-Me dejaste-

-Era necesario, para salvarnos a todos yo era el séptimo horocrux-

-No quiero vivir sin ti, quiero que vuelvas-

-No puedo dragón, no puedo volver pero tu puedes ser feliz vive por mí, cuida mucho a nuestro bebé, vuelvete a enamorar, ahora tienes las reliquias eres el mago más poderoso, destruyelas sí quieres-

-No quiero puedo tenerte así al menos- dijo con tristeza él rubio.

-No Draco es solamente una ilusión vas a perder en eso, Regulus te necesita, ya debo irme amor-

-Te amo- dejo salir algunas lágrimas.

-Te voy a amar incluso después de la muerte mí dragón, pero este es el adiós-