Vacaciones merecidas, parte 1

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En lo que llevaba la semana después de la discusión padre e hijo que tuvieron nuestros protagonistas, hubo mucho trabajo de parte de la familia yakuza; un líder de otra banda causó estragos cerca de su territorio y ellos tuvieron que intervenir y acabar con él, tuvieron que completar papeleo por daños materiales y reportes policiales y además tener otra reunión con otros contactos para verificar el estado de la ciudad.

No era realmente divertido hacer todo eso pero era trabajo importante que debían realizar, lo bueno de todas esas situaciones era que finalmente podrían tener un descanso del trabajo y disfrutar de su tiempo libre a todo dar.

Siendo yakuzas obviamente tenían más privilegios que otras personas y algunos de esos eran parques acuáticos, playas privadas, parques o tiendas comerciales e inclusive lugares ocultos en la ciudad. No había forma de que sus días fueran arruinados ni siquiera por el mal clima del lugar.

Midoriya: Y por eso estaba pensando que podríamos salir a pasear junto a los demás todo el día - dijo mientras se ponía su ropa para dormir.

Uraraka:  Es una maravillosa idea, no hemos tenido una salida normal desde que nuestro viaje al cine se convirtió en un tiroteo

Midoriya: Entonces está decidido, mañana disfrutaremos del mejor paseo hasta la fecha. Buenas noches - se acomodó en la cama.

Uraraka: ¿Tan cansado estás? - preguntó juguetona.

Midoriya: Algo así ¿por qué?

Uraraka: Pensé que tal vez podríamos divertirnos un rato - se subió sobre él.

Midoriya: Oh ¿y qué tienes en mente? - preguntó pícaro.

Uraraka: Creo que ya sabes lo que quiero - acarició su pecho por sobre la ropa.

Midoriya: ¿Estás segura de esto? - rodó hacia el otro lado tomando el control de la situación - porque ten por seguro que no me contendré

Uraraka: Espero que no lo hagas

1 hora después

Bakugo: Oye Deku, ¿sabes donde está mi...? - se detuvo al oír voces dentro de la habitación.

Uraraka: Izuku detente por favor

Midoriya: Tu iniciaste esto y ahora seré yo quien lo termine - dijo con seriedad.

Uraraka: Me vas a quebrar

Midoriya: Hora de terminar con esto

Bakugo: - entró sin avisar y preguntó - ¡¿Qué demonios están haciendo?!

Midoriya: Y gané - cruzó la línea de salida.

Uraraka: ¡No.... estoy en quiebra! - cayó derrotada.

Midoriya: Lo siento amor, pero en el monopolio no existen amigos o amores, sólo rivales

Bakugo: ¿Qué rayos están haciendo? - preguntó confundido.

Midoriya: Sólo jugábamos monopolio, la última vez ganó ella así que ahora cobré mi venganza. Ahora ¿qué estás haciendo aquí?

Bakugo: Ya no importa, me voy a dormir - salió de la habitación.

La esposa de un yakuzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora