𖦹➶︎☆UNA EXTRAÑA HISTORIA DE AMOR☆➶︎𖦹
- ¿Quien es usted y qué intenciones tiene con mi papi mimi?.-pregunto con el ceño fruncido.
- Eh hola pequeño , tu papi es muy bonito.
Una bola de helado de chocolate fue lanzada sobre la costosa camisa del chi...
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Era un agradable día, el clima era fresco y cálido, perfecto para que muchas personas aprovecharan en salir de paseo con sus familias o simplemente convivir un poco con la naturaleza, de esos días donde solo querrías disfrutar del tiempo y relajarte.
Lastima que pocos se podían dar esos gustos.
Un pequeño niño miraba con aburrimiento las caricaturas en la televisión. Él no entendía como el coyote en vez de comprar comida para él, pedía armas para intentar atrapar al (correcaminos) le parecía absurdo, como decía su papi mimi, suspiro y formó un puchero de molestia.
Estaba muy aburrido.
Miro a su derecha y allí se encontraba sentado un castaño, muy entretenido viendo la televisión mientras reía a carcajadas. ¿Por que él, sí lo encontraba entretenido?, se cuestionó y apartó la mirada, volteo a la izquierda y allí estaba la dulce señora Kim, profundamente dormida con su boca semi abierta de una manera un tanto graciosa, eso si le causó gracia al pequeño castaño, pero rápidamente se le pasó el gusto, él quería ver a su papi y no se quedaría quieto hasta lograr su objetivo, se demando así mismo.
Decidido se puso de pie y se acercó con cautela hacia la anciana recostada en el sillón y con su pequeña manito empezó a mover a la mujer mientras repetía el nombre de está.
— Señora Kim, despierte, despiértese, por favor, quiero ir a ver a mi papi mimi. — Insistió el menor, más la anciana ni se movió.
"¿Se habrá muerto?" pensó el niño asustado y con más existencia empezó a jalonearla.
— Señora kim, no me asuste, despierte. — Rogó entrando en pánico. Más sintió un roce en su hombro —casi como si el viento lo tocar— * y volteo a ver con preocupación al castaño detrás de él.
— ¡Ey! tranquilo pequeño, la señora Kim está bien. No te preocupes, solo está profundamente dormida ¿Para qué quieres despertarla? . — Cuestiono el chico viendo al pequeño un poco más tranquilo.
Taeyan sintió su miedo disiparse. Sabía que la señora Kim era una persona mayor y como le había enseñado su padre, él cuidaba también de la señora Kim, así que por eso se asustó mucho.
— Apá, quiero que la señora Kim me lleve a ver a papi mimi, porque yo estoy chiquito y no puedo conducir. — Dijo poniendo sus manos en su cintura y con un puchero prominente en sus pequeños labios, haciendo derretir de ternura al mayor, esté rió y se acercó a la mujer aún dormida para después chasquear sus dedos haciéndo que la mujer despertara.
