EXTRA (I)

571 47 3
                                    




Ha pasado algunos años desde que Lee se fue , eh conseguido entrar a la universidad y estoy a mitad de mi carrera. También eh conocido personas nuevas, mi mundo se basa la mayor parte del tiempo en la escuela para no pensar en Lee. Mi vida amorosa esta por ahora estática, no eh querido conocer a alguien en ese sentido por que no quiero lastimarlo. Se que mi corazón aun no sana y hacer pasar a alguien por lo que pase yo con Lee en un inicio no me gustaría, prefiero seguir así sin lastimar a nadie.

Hoy eh tomado un vuelo sin pensarlo a Italia , nuestro mayor triunfo en la vida seria ir al coliseo y abrir una botella de vino. Seria nuestro logro por que al final logramos salir del pueblo de Maldea, pero por desgracia me tocara cumplir aquel sueño sola como muchos otros.

-Seria 4 euros Mancare - soltó el taxista dejándome frente al coliseo.

-Chiaro - le respondí entregándole los cuatro euros, para después bajar del vehículo.

Me había puesto a estudiar algunas palabras básicas de Italia en el vuelo para poder sentirme segura al llegar, seguramente Lee me diría que eso es completamente ridículo. Camine hacia una tienda de vinos y compre el mas caro que había junto con un vaso de plástico , después fui directo a un lugar libre y me senté frente a esa maravilla de vista.

El sol estaba a punto de ocultarse y aquello era simplemente la cosa mas hermosa que mis ojos pudieran admirar, abrí la botella y serví un poco de vino en el vaso de plástico. Sin previo aviso las lagrimas comenzaron a adueñarse de mi , estaba cumpliendo un sueño pero el no estaba a mi lado.

-Por nosotros Lee - solté en un susurro y después le di un trago al vaso.

Me quede mirando el lugar y aquello me hizo querer volver a escribir, no había estado escribiendo desde que Lee murió. Abrí la mochila que llevaba y aun cargaba el cuaderno junto con la pluma que Lee me dio el día que fuimos de visita a la universidad , también llevaba aquel mapa donde Italia estaba encerrado de color rojo.

Ver aquello me lleno de nostalgia , fue como si una oleada de recuerdos me invadieran por completo. No había tocado nada de lo que me había dado desde su muerte, digamos que era mi manera de sobrellevarlo. Abrí la libreta y en la primer hoja estaba escrito "Paseo a Stanford" , dios ver aquello dolió mas de lo que me gustaría aceptar.

Di un leve suspiro y cambie de hoja a una completamente en blanco , tome la pluma y comencé a escribir en aquel cuaderno.


PARA: LEE WILLSON STANDALL

Ya han pasado algunos años desde que te fuiste de mi lado y no había vuelto a escribir hasta el día de hoy, eh pasado días llorando o incluso haciéndome la fuerte, nunca creí que amar a alguien dolía tanto, extraño escuchar como me llamabas Miller o incluso cuando me llamabas parlanchina, eras el único que me hablaba de esa forma.

Aun recuerdo cuando te vi por primera vez en aquella aula del periódico escolar, ibas con tu peculiar personalidad apática que al parecer fue lo que mas me atrajo hacia ti. Quien diría que te convertirías en una persona muy especial en mi vida, en una persona que cambiaria el rumbo de mi vida por completo y en alguien que me enseño lo que se siente ser amada realmente.

Aun recuerdo las risas en tu auto, los abrazos reconfortantes, los besos cálidos y apasionados, los maratones de caricaturas, cada sonrisa que me dedicabas día a día . Se te hacían unos ligeros hoyuelos cada que sonreías, que me encantaba verlos para ser honesta.

Decidí escribirte ahora que me encuentro en Italia, pero realmente queria decirte que nunca olvidare cada momento en el que estuviste a mi lado, agradezco infinitamente que el universo te pusiera a mi lado. Aun que no acabara de la forma como hubiéramos querido no me arrepiento de nada, fuiste mas que un novio para mi, me enseñaste mas que cualquier persona y no sabes lo agradecida que estoy por eso.

Eh escuchado decir que "las peores cosas de la vida vienen a nosotros gratis" , que bueno que me costo demasiado tenerte en la mía, eso quiere decir que fuiste lo mejor de mi vida durante aquellos meses de relación.

Sabes algo Lee Willson.. , eres el adiós que jamás sabré decir.

Extraño hablar contigo antes de irme a dormir, extraño tu sarcasmo , extraño nuestras caminatas hacia la escuela o hacia un lugar sin rumbo, extraño tu aroma impregnado en mi ropa. Siento que te voy a extrañar toda la vida, un sentimiento sincero es muy difícil de olvidar.

No sabes la falta que me has hecho durante estos años, no eh parado de pensar si en algún momento volveré a sentir una conexión como la que tuvimos, o si en algún momento alguien me soportara como tu lo hacías o si simplemente me dedicara una sonrisa reconfortante como las tuyas. Tenias una forma peculiar a veces de expresar tus sentimientos pero eso era lo que mas me gustaba de ti , que eras diferente a los demás.

Creo que me detendré de recordar todos nuestro momentos juntos por que mi cara esta hecha un desastre por tantas lagrimas, esta es mi carta de despedida, esta será la primera y ultima vez que te escribiré Lee Willson, no quiero verme como una mala persona o algo por el estilo pero tengo que soltarte. Quiero avanzar , quiero dejar de llorar cada que veo algo que me recuerda a ti, preferiría sonreír. Necesito un tiempo para sanar.

No me mal entiendas, nunca te olvidare Lee pero tengo que avanzar en mi vida y no estar aferrada a tu recuerdo, todo lo que compartimos siempre estará guardado en mi corazón como el recuerdo mas bello de mi vida por que eso eres Lee Willson, mi recuerdo mas bello....

Sin mas.. , espero sanar pronto para poder recordarte sin llorar. Espera mi siguiente carta, esa te la escribiré cuando mi vida este completamente sana y te contare cada experiencia vivida, sin mas no te digo adiós Lee solo un hasta pronto..


Atentamente: Maya Miller Jones


Al terminar de escribir sentí un poco mas de alivio en mi, el viento frio comenzaba a recorrer mi cuerpo y mi rostro húmedo de tanto llorar. Tal vez es poco convencional esto pero escribir aquella carta me hizo sentir como si aun estuviera a mi lado , me estuve un tiempo mas ahí sentada mientras tomaba vino. Veía a las personas pasar con una sonrisa de oreja a oreja, a otras tomándose fotos pero sobre todo las veía felices, yo deseaba volver a estar así , tranquila y feliz..

-¿Puedo sentarme? - escuche una voz masculina y fue lo que me saco de mis pensamientos.

-Amm.. - lo mire dudosa - si supongo

El chico se sentó a mi lado y tenia un aroma a cigarrillo combinado con fresa , me quede en completo silencio y me comencé a limpiar el rostro con las mangas de mi sudadera.

-¿Te encuentras bien? - me pregunto amablemente

-Si , solo recordé a una persona - dije sin mirarlo

-A veces suele pasar , toma - me extendido un poco de papel para que me limpiara

-Gracias - solté para después tomarlo - debe ser extraño ver a alguien llorar.

-Tendré que acostumbrarme de hecho - soltó algo divertido - estoy estudiando psicología así que veré a muchas personas llorar.

-Claro... - le respondí arrastrando las palabras.

Nos volvimos a quedar en completo silencio ambos y comencé a guardar el cuaderno junto con lo demás en la mochila que llevaba, queria ya irme al hotel donde me estaba hospedando para poder descansar un poco.

-Soy Noah - soltó rompiendo el silencio , mientras me extendía su mano.

Me quede mirando su mano por algunos segundos sin saber si seguir aquella conversación o no, pero algo dentro de mi decía que si queria sanar debía abrirme caminos.

-Soy Maya - le respondí tomando su mano amablemente...

Mi LimboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora