𝐃𝐚𝐝𝐝𝐲'𝐬 𝐏𝐫𝐢𝐧𝐜𝐞𝐬𝐬 +𝟏𝟖. 𝐉𝐞𝐨𝐧 𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤

Daddy's Princess | 07.

[ INOCENCIA. ]

Tan solo tres días para que la famosa "invitada" llegara e irrumpiera en la que solía ser una vida tranquila para ______. Se había quebrado la cabeza sobrepensando todo, ¿Qué tal y la chica tuvo un amorío con Jungkook en el pasado?, ¿Qué y esos sentimientos vuelven?, ¿Qué sería de ella si eso llegase a pasar?, Tanto pensar la estaba volviendo loca.

— ¿Qué tanto piensas nena? -dijo el mayor al verla con la vista posada en algún lugar del comedor-

— Yo... No es nada.

— ¿En qué piensas? -recalcó, quería una respuesta y esa no sería una-

Ahora la menor debía ingeniarselas para crear una respuesta coherente que Jeon pudiera creer.

— De verdad Daddy... Es algo sin sentido. -intentó darse más tiempo-

En respuesta solo consiguió una mirada de desaprobación impaciente por obtener lo dicho anteriormente.

— Daddy... -tragó a duras y decidió terminar la oración- La primera vez ¿Duele? -pregunta estúpida pero tolerable, eso creía-

— Era eso, ¿Eh? -soltó una pequeña risa coqueta- ¿Te soy sincero?, Nunca he tenido sexo con una mujer virgen, normalmente las prostitutas no lo son. Pero como es tu primera vez experimentando ese tipo de acciones supongo que debe doler un poco.

Siempre tan abierto y claro referente a estos temas... Sinceramente eso no era lo que pasaba por su cabeza pero de alguna forma se interesó por la respuesta. Aunque debía admitir que el hecho de imaginar a su Daddy en la cama con otra, brindándole placer era un tanto incómodo.

Eran aproximadamente las once de la noche cuando ______ había terminado de colocar pomada en las heridas de su cuerpo para después salir a la habitación encontrándose a su Daddy recostado sobre la cama con su codo cubriendo su rostro.

Aún estaba vestido con los jeans negros acoplados a la forma de sus tonificadas piernas, y una polera negra del mismo color.

Era impresionante como aquel sujeto le podía parecer tan atractivo en todos los aspectos. Simplemente con el hecho de respirar era atractivo. Su único defecto era el casi no estar con ella y brindarle el cariño que él consideraría intolerante, así que sería caso perdido intentarlo.

Lo observó de los pies a la cabeza y se preguntó si el haberlo conocido en verdad fue suerte o tragedia.

Al cabo del tiempo pensó por unos momentos y tomó la arriesgada decisión de sentarse sobre su regazo quedando encima suyo como si la intención fuese montarlo. Al momento de sentir el tacto de sus intimidades Jungkook no dudó ni un momento en enfocar su campo de visión en su intrusa.

— Vaya atrevimiento el tuyo linda. -sonrió observando cada parte de su rostro- ¿Desde cundo eres tan descarada? -rió leve y posicionó sus manos sobre sus caderas masajeando finamente-

— No lo sé... -respondió la chica con tanta inocencia-

La posición en la que se encontraban era bastante cómoda para ambos, ese era uno de los poco momentos que podía compartir con Jungkook ya que casi siempre se encontraba en su oficina-

— Daddy, quiero helado. -hizo puchero para intentar convencer al mayor-

— De ninguna manera, es demasiado noche.

No le quedó más que resignarse, pues tenía razón, era demasiado tarde para comer helado, en la tarde lo hubiera considerado.

— Si no llevaras puesta la camisa fuera una vista mucho más hermosa, nena. Estorba. -cambió la conversación-

— ¿Y qué le impide quitarla? -sonó tan inocente al decirlo, que no dudaría en estar duro en ese momento-

Dicho comentario puso a Jeon en alerta, si seguía con esa actitud lo único que haría sería provocarlo y hacer que la tome.

— Hermosa, si comienzo no podré detenerme. -dijo en advertencia intentando sonar un tanto juguetón-

— Pero no quiero que lo haga...

El simple tacto de las manos de ella sobre las suyas fue el único impulso que necesitaba para activar sus sentidos, y por primera vez, tomarla.

Estaba siendo muy masoquista de su parte ceder ante él de una manera tan fácil, después del tremendo castigo que le había propinado hace apenas dos días, pero después de todo, después de años, Jeon la había moldeado exactamente a su gusto.

Sus más oscuros deseos se hicieron presentas al observar aquella mirada tan inocente y seductora que lanzaba la menor, probablemente sabía lo que hacía, y si lo hacía era porque quería al igual que él.

— Daddy... Baby quiere jugar, Baby quiere ser suya...

— ¿Baby quiere?, Baby lo tiene...

Y eso fue lo último que pudo salir de su boca, pues ya no esperaría ni un minuto más para reclamar lo que por derecho ya debía ser suyo.

En un movimiento ágil logró posicionarse sobre ella, dejándola aprisionada entre la cama y él. Colocó ambas manos a la cabecera y se limitó a besarla dulcemente.

Sus besos se fueron recorriendo hasta su cuello, donde lamía y succionaba cada parte de él, claramente pronto se volverían marcas. A como pudo se liberó de la camisa que llevaba ______ y la arrojó a algún lugar de la habitación, dejándola tan si quiera en sus diminutas prendas de ropa interior, que pronto no serían nada mas que una prenda más fuera de su cuerpo.

— Incluso hasta con tales heridas tu cuerpo es hermoso princesa.

Se estremeció debajo de él con tan solo recordar el mal sabor de boca de ese momento. Por otro lado, Jungkook se sentía orgulloso de que esas marcas fueran suyas, y por el simple motivo de que ella desobedeció y debía haber un castigo, demostrando una vez más que era él el que dominada, alimentando como siempre su ego.

— Sin embargo, tu cuerpo es demasiado hermoso como para que esté repleto de marcas por castigos que de marcas por mi boca, nena...

Terminó por besar lo que era su cuello y su pecho para descender hasta su feminidad, propinando pequeños y suaves besos sobre la húmeda tela de la chica bajo él. Estaba tan húmeda con tan solo unos toques, tan resbaladiza.

De a poco introdujo sus dedos dentro de ella para que se acostumbrara un poco y darle más placer del que le daría más adelante. Watson estaba al borde de la locura con tan solo sentir un poco más de su tacto, deseaba más. Ella quería sentirlo dentro.

— D-Daddy...

— ¿Dime princesa? -estiró sus labios en una sonrisa arrogante al observar su efecto sobre ella-

Se divertía con ella, en como podía provocarle tanto placer sin siquiera haber comenzado.

La idea de que era virgen y él, solamente él sería el único y el primero en probarla le hacía sentir tan bien. Por fin podría decir que ella era suya y le pertenecía en todos los sentidos.

Jungkook sacó sus dedos de su interior y ahora su ropa era la que sería desprendida de su cuerpo a algún lugar de la habitación. La observó desde cierto ángulo, verla sometida y excitada a su merced hacía que todos sus instintos despertaran y lo hicieran tomarla hasta saciar su sed de lujuria.

— Oh nena, por fin serás mía al cien por ciento. -sonrió ladino-

"Daddy's Princess. Jeon Jungkook."