Capitulo 11

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Cada pocos meses, Luthor Corp se ofrece como voluntario durante el día en un refugio local. Es una tradición que ha estado en la compañía desde que ella era una niña. Este año, se le informó que algunos de los Lakehawks se unirán a ella en People Serving People para ayudar a servir comida en el almuerzo y la cena.

Se le debería haber ocurrido que si algún Lakehawks se presentaría para lo que es, en algunas mentes más cínicas, un evento de prensa, sería Kara Danvers. Pero no había pensado mucho en eso y cuando ve a Kara en la pequeña cocina del refugio, detiene su movimiento por un breve segundo.

“Señorita Luthor”, saluda Kara cálidamente, claramente consciente de que los ojos observan y los oídos escuchan. Lena sonríe un poco.

“Kara, no sabía que estarías aquí”.

“Por supuesto”, dice Kara. “Soy voluntario aquí durante la temporada baja de todos modos. Estoy feliz de hacerlo en nombre de Lakehawks y Luthor Corp”.

La anécdota personal sorprende un poco a Lena, pero se las arregla para no reaccionar más que con un movimiento de cabeza y una sonrisa. Un destello la sobresalta al mirar a Kara y ve a un hombre con una cámara a su derecha.

“¡Sonríe para el boletín!” dice y Kara no duda antes de pasar un brazo alrededor de los hombros de Lena y sonreír.

Es bueno que Lena sonría naturalmente en reacción a una cámara que apunta en su dirección porque, de lo contrario, no está segura de cómo se vería exactamente la imagen. De repente, todo el costado de su cuerpo se pega al calor de Kara y es tan consciente de los dedos de Kara agarrando su bíceps que se siente como si no pudiera notar nada más.

Satisfecho, el fotógrafo se aleja de ellos y Kara se desprende del cuerpo de Lena. El calor persiste en el lugar donde se tocaban, pero Lena simplemente lo sacude, consciente del resto de las personas que se mueven a su alrededor.

"Entonces, ¿estás listo para servir algo de almuerzo?" Kara dice con una sonrisa peculiar que hace sonreír a Lena.

“Por supuesto”, responde Lena, pasando las palmas de las manos por la tela de sus pantalones para intentar que desaparezca la sensación de humedad.

La sonrisa de Kara se vuelve traviesa. "No estás vestido exactamente para el papel".

Confundida, Lena mira su atuendo, un par de pantalones negros muy casuales y una blusa blanca, pero cuando mira hacia atrás para protestar porque Kara no está vestida de manera muy diferente, algo se está tirando de su cabeza.

"¿Qué-"

De repente, Kara vuelve a estar muy cerca de ella y se da cuenta después de unos segundos de que está tirando una redecilla barata sobre el cabello perfectamente peinado de Lena con una risa.

“Mucho mejor”, bromea Kara cuando la pieza está resuelta y Lena logra recomponerse lo suficiente como para poner los ojos en blanco.

“Me tomó media hora arreglarme el cabello esta mañana”, dice Lena inexpresivamente, y no es del todo cierto, pero Kara no necesita saberlo.

“Y solo me tomó dos segundos perfeccionarlo”, responde Kara con una burla y una sonrisa, y Lena se esfuerza por mantener una cara seria, con los ojos entrecerrados en una mirada fulminante incluso cuando no hace nada para quitarse la redecilla de la cabeza.

“Si una foto mía con una redecilla termina en Internet mañana, me encargaré personalmente de que te cambien a los Skippers”, dice Lena en un susurro bajo. Suena amenazante, como si lo dijera en serio, pero está segura de que la forma en que sus labios se curvan al final la delata.

Quédate a pasar la nocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora