YuanFen

4.

Habían pasado un par de horas desde que el alfa había dejado al chico herido con el doctor y no fue hasta después de culminar con sus labores pendientes que pudo volver para saber cuál era el estado de salud del omega que se encontró junto al camino.

—¿Cómo está? ¿Que le ha ocurrido? —dijo tras que llegó al lugar, olvidándose totalmente de sus modales y de como saludar.

El doctor que hasta ese momento había estado viendo al omega y a unos papeles en su mano de forma intermitente, se asustó un poco al oir que alguien había llegado de forma tan abrupta.

—Shownu, no hagas eso. —le pidió poniéndose una mano en el pecho. —Primero me traes a un omega moribundo con posibles signos de tortura sin darme una explicación y luego apareces de la nada... Demonios, pensé que eras otro alfa que estaba dispuesto a matar a este chico de una vez por todas o algo así.

Era verdad que Shownu había estado tan preocupado por la salud del omega que había omitido un montón de cosas pero afortunadamente ya estaba ahí y podría explicar que no sabía nada.

—No sé quien es. —admitió. —Yo volvía por la ruta de siempre, escuché quejidos de dolor y lo ayudé. Eso es todo.

El doctor que también era su amigo lo miró con sorpresa y casi molestia al mismo tiempo.

—¿Cómo puedes recoger a alguien de la calle así como así? —lo regañó. —¿Qué tal si se tratara de un mafioso o algo así?

Shownu suspiró, miró al chico en la camilla que ya estaba vestido con una bata de hospital y notó que sin toda la sangre encima se miraba todavía más joven e indefenso. No había forma de que se tratara de una persona peligrosa, más bien todo apuntaba a que había sido una víctima.

—Está claro que no es un mafioso. —dijo con seguridad. —¿Acaso tú lo habrías dejado morir?

Al recibir tal pregunta siendo un médico con una reputación impecable, se sintió ofendido pero entendió el punto de la cuestión y sólo pudo bufar molesto.

—Ya sabes que no. —dijo de forma obvia. —Y también tienes razón. Este chico es una víctima en todo su esplendor.

El alfa se sorprendió y se acercó un paso más a él, sabiendo que seguramente el médico ya se habría enterado de más cosas que él.

—¿Qué sabes? —preguntó preocupado. —Cuéntamelo todo.

El médico suspiró profundamente.

—Es realmente difícil saber qué le ocurrió exactamente o cómo llegó a esa situación, pero desde el punto de vista médico parece que fue drogado para ser dejado inconsciente. —dijo con pesar. —No había rastros de abuso sexual así que al menos podemos descartar que la finalidad fuera una violación, pero fue golpeado sin piedad por todo el cuerpo.

Shownu no pudo esconder la expresión de tristeza de su rostro.

—¿Qué tan malo fue? —dijo con el corazón adolorido.

El doctor recogió unos papeles y unas radiografías que tenía sobre una mesa cercana.

—En la examinación física descubrimos mucho daño. Habían hematomas e incluso heridas hechas por las mismas armas. —explicó. —Quien quiera que le haya hecho eso tenía la intención de dejarlo morir con mucho dolor, pero afortunadamente este omega es fuerte. —dijo extendiendo las radiografías hacia la luz. —De entre todas las zonas lastimadas solo hay una costilla rota y una fisura en la siguiente costilla. —señaló. —El resto de su cuerpo puede sanar de forma ambulatoria sin necesidad de un procedimiento más intensivo.

De alguna manera recibir una noticia más o menos buena entre un montón de malas, reconfortó al alfa.

—¿Algo más que añadir? —preguntó con la esperanza de recibir otra buena noticia.

El doctor miró a Shownu con duda.

—Bueno, de hecho hay algo importante que mencionar... —dijo bajando la voz. —Durante la examinación médica pudimos encontrar que este omega recientemente tuvo un...

Antes de que e médico pudiera acabar con su respuesta, el omega soltó un agonizante quejido más que audible y de repente una ola de feromonas se expandió por toda la habitación, agobiando al alfa a un punto extremo.

—¡¿Qué demonios ocurre?! —preguntó tratando de mantener el control sobre su cuerpo mientras miraba como el doctor corría tratando de auxiliar al menor.

El omega se retorcía en la camilla y se quejaba como si estuviera acostado sobre lava ardiente, incluso aunque no había recobrado la consciencia su expresión delataba mucho dolor.

Una enorme aguja fue a parar en una de sus piernas y el líquido contenido se vació en segundos, dándole un poco de tranquilidad al omega que paulatinamente volvió a la calma.

—¿Qué fue eso? —preguntó el alfa con la voz temblorosa, sentado en una esquina de la habitación.

El doctor se limpió el sudor de la frente después de desechar la jeringa y suspiró profundamente, yendo en dirección a su amigo.

—Justamente quería hablarte de esto. —dijo cansado. —Este omega parece que ya había sido marcado por un alfa, e incluso tiene algo llamado cierre quirúrgico que es un procedimiento muy nuevo para aligerar la dificultad de los partos en los omegas varones. Así que es probable que tenga un bebé, o que al menos haya estado embarazado antes.

El alfa se sorprendió de tal información porque a simple vista el omega no parecía ser alguien que tuviera un hijo, además la supuesta marca de alfa ni siquiera era visible.

—¿Y que tiene que ver todo eso con lo que acaba de ocurrir? —dijo confundido.

Si el omega estaba enlazado a su alfa, ¿por qué lo había abrumado dos veces con sus feromonas? ¿Cómo es que podía sentirlas entonces?

—Ruptura de lazo. —dijo con pesar. —Me temo que este omega fue simplemente desechado y reemplazado por su alfa, quien aparentemente ya rompió el lazo con él y se unió a otro omega. No hay otra manera de romper un lazo más que creando uno nuevo.

El corazón de Shownu dolió en gran manera. ¿Cómo podría alguien desechar a su omega con tanta facilidad? ¿Acaso solo quería su bebé y en cuanto lo tuvo lo desechó?

—¿Qué tal difícil es soportarlo? —preguntó acercándose a la camilla nuevamente con el corazón estrujado.

El doctor lo acompañó a observar al chico indefenso sobre la camilla.

—La ruptura de lazo afecta a ambas partes, hay desniveles hormonales, desbalance con su yo interior y un extremo dolor físico. Para los alfas es más llevadero por su capacidad de recuperación, pero para un omega el proceso puede durar hasta una semana, y muchos de ellos no lo resisten. —explicó con lástima. —Para este omega la paliza recibida es lo de menos, y sólo de trató de una fachada y un boleto de aseguranza para que no resistiera la ruptura.

De pronto la rabia invadió a Shownu, dándole un escalofrío terrible.

—¿Puedes salvarlo? —preguntó decidido. —Necesito que despierte y que me diga quien le hizo eso, así podré hacer justicia por él.

El doctor sonrió ante el gran corazón de su amigo, pero le puso una mano en el hombro y lo miró a los ojos.

—Shownu, el cuerpo de este omega ha sido lastimado en todos los ámbitos posibles. —susurró. —Su cuerpo podría resistir la paliza, pero la ruptura de lazo es tema que va más allá de la medicina convencional. —apretó su hombro en símbolo de consuelo. —Muchos omegas fuertes han muerto a causa de eso, así que no se puede decir mucho de un omega embarazado que recibió una paliza.

De entre todas las cosas que el médico dijo, sólo una retumbó en su cabeza como un rayo.

—¿Embarazado? —susurró.

De pronto la situación se volvió más delicada.