Capitulo 08 "Dolor de cabeza"

53 3 0
                                    

Aun con los nervios de punta, mareada y con una caminata de zombi; sintiendo que me caía con cada paso que daba hacia el final del pasillo, mi mente recorría cada segundo que había pasado hace unos instantes.

-¿Jadiss, te encuentras bien? – hablo Alex caminando a mi lado.
- Sí, bueno eso creo – titubee
-Ya tranquila, ya paso.
-Es que – me pause – mis nervios no se quitan.
-Tranquila, yo estoy aquí contigo. – rodeo sus brazos por mis hombros.

Al salir por aquella puerta, mis nervios se comenzaron a calmar poco a poco hasta que estos desaparecieron por completo; Alex como fiel amigo no se separo de mi lado ni un centímetro hasta dejarme en la puerta de mi casa.
Una vez adentro de mi casa me senté en el sofá, con mi mente e ideas algo desordenadas – hechas un lio – mis pensamientos se veían como tela de araña enredada por cualquier lado, una voz me devolvió de aquel viaje de pensamientos.

-Jadiss, Jadiss – hablo mi madre
-Ah? – respondí ida de mi.
-Jadiss – insistió.
-Ah?
-Jadiss – grito mi madre con preocupación – muchachita, por dios di algo, pareces una momia: no hablas, no te mueves y te quedas así. – agito las manos.
-Ah sí, si tienes razón. 

A pasos de zombi subí las escaleras, tropezando más de 2 veces con ellas, mis pasos realmente torpes me hicieron llegar a mi cama a las justas, echándome en ella quedando dormida como roca.
Mi mente me hizo recordar lo que había pasado hace unas horas en una forma de sueño, se me hizo imposible de despertar.

*
-Yo…- y las palabras no salieron.
-¿Jadiss, que pasa? – pregunto Alex
-Este Alex, el es Zack un antiguo…
-Enamorado – concluyo Zack.
-Amigo – repuse – solo fue un amigo.
-Ah, hola me llamo Alex – ofreció su mano.
-Y que es tu nuevo noviecito. – agrego evitando el saludo de Alex.
-Perdón – me sentí confundida - ¿Qué cosas dices?
-Ya veo que no llevas más de 2 semanas y te buscaste al primero que se cruzo en tu camino, ¿verdad? 
-¿Qué? – Pregunte – Zack, ¿Por qué dices eso?
- Porque te veo bien acompañada, riendo y pasándola de lo mejor.
-Sabes y si yo hago eso a ti que te importa, es mi vida no la tuya, yo que sepa no soy nada tuyo ¿Te pertenezco?, ¿Acaso tengo tu nombre marcado en mi frente?, no verdad así que déjame en paz. 
-Wow la chica saco las ragas.
-Alex, vámonos de aquí – camine hacia la salida.
-Tú, no te vas de aquí. – me agarro del brazo.
- ¡Suéltame! – grite

Mi brazo ya n o sintió la fuerza que tenía antes, solo vi a Zack tirado en el piso sobándose la cara, siendo levantado por las manos de amigo.

-Si la vuelves a tocar - hablo con amargura – te juro que me vas a conocer. – le advirtió.
-Alex, ya déjalo – implore.
-Déjame Jadiss, el merece esto y más.
-Suéltalo, por favor piensa en mí. – suplique
-Está bien – Zack cayó al piso otra vez.
-Vámonos. – agregue

Mi cara era pálida según Alex, que me acompañaba y refunfuñaba por no dejarlo golpear a Zack.

-¿Por qué me detuviste?
-Hubiera sido peor – conteste nerviosa.
-Pero no lo iba a dejar que te hablara así. – Agrego – eres mi mejor amiga.
-Lo sé y gracias Alex por todo.
-Ya quita esa cara – hablo.
-Es que no lo conoces, como yo lo conozco; él no se va quedar tranquila va a querer seguir en este juego que según él ha empezado.

Alex prefirió callar casi todo el camino apoyando siempre y ayudándome.
*
Mi sueño o tal vez pesadilla termino con un poco de sudor en mi frente y mi voz algo agitada más de lo normal; con la luz de la luna entrando por mi ventana me cambie a mi pijama de cuadros, intentando no volver a soñar aquello.

En otoño.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora