Estabas sentada en uno de los sofás de tu oficina, con cigarrillo en mano, llevabas media cajetilla. Ya era tarde, pero todavía no terminaba tu turnor, y como no tenías nada que hacer, agarraste tu libro. Eran las 9:45 de la noche.
Lo único que podías hacer era mirar hacía el gran ventanal que tenías a tu lado, daba una linda vista hacía toda la ciudad. Se veía todavía más hermoso de noche, con todas las luces de las casas encendidas. Podrías admirar tal vista todo el día si querías.Soltaste un pequeño suspiro, te levantaste del cómodo sofá, te acomodaste el abrigo, tomaste tu bolso y cerraste con llave.
Caminaste lentamente por las calles de piltóver, estabas a media hora de tu casa, lamentablemente el trayecto era largo, pero lindo.
[....]
Mientras la ojiverde tomaba su desayuno, té de manzanilla acompañado de un cigarrillo, sintió unos leves golpecitos en la puerta.
–¡Adelante!–Tenía su mirada fija en el papel, eran unos documentos importantes los cuáles debía firmar.La pelicastaña levantó su mirada, era Violet. La miró mientras levantaba una ceja. Exhaló el humo y devolvió su mirada al papel.
La pelirosa se acercó para tomar asiento en una de las dos únicas sillas de la habitación.
–Qué quieres–La volvió a mirar sin interés alguno en su existencia.
La Zaunita soltó un suspiro, y luego miró a su contraria, quien estaba más que confundida ante las miradas de ella.
–Qué mierda te pas-
–¿Estás embarazada?–Preguntó.
La ojiverde se ahogó con el humo del cigarro, mirando a su compañera de trabajo con sus dos ojos bien abiertos. Quedó en silencio, la pelicastaña no sabía que decir, pero ¿Quién puta le dijo tal cosa?
–Tory.–Habló Vi, levantando una ceja.
Suspiró, a tal silencio, recibió miradas matadoras por parte de la otra chica, parecía que la golpeaba con la mirada.
–Cuántos..–
–Tres meses..–Desvío su mirada hasta la pared detrás de Violet.
Esta última volvió a soltar un suspiro, llevaban saliendo apenas dos meses. A la pelirosa le ponía triste que no tuviera la suficiente confianza para contarle.
–Por qué.. ¿Por qué no me dijiste?–Frunció su ceño en busca de alguna respuesta. La cuál no fué respondida.
–¿Solo viniste a esto? Estoy en mi horario de trabajo, violet. –Dijo casi sin importancia.
Por más que demostraba no importarle la situación. Estaba muy preocupada, sabía que tendría que haberle dicho, pero no sabía cómo reaccionaria a tal gran noticia, no se arriesgaría a perder a la persona a la cual ama. Peor estaba conciente de que quizás ya la había cagado al ocultarlo y al no darle respuestas, pero no podía, estaban en su horario de trabajo. Si quería hablarlo sería más tarde y calmadas, donde estuvieran solo ellas dos.
La pelirosa negó con su cabeza decepcionada, suspiró y se levantó del asiento. Su muñeca fué agarrada por su novia, quien intentaba aguantar las lágrimas y habló.
–Hablemos después del trabajo ¿Está bien?–Intentó mantener las lágrimas, no quería perderla, no a ella.
[....]
Y ahí estaban ambas chicas, en la pequeña terraza de la casa de Tory, llevaban ahí media hora y ningúna fué capaz de dirigirse la palabra, estaban en un silencio completamente incómodo para ellas dos.
Hasta que la mayor decidió hablar–¿Por qué no me dijiste?–La miró directamente a la cara en busca de una respuesta.
–Tenía miedo.–Se quedó callada por algunos segundos para volver a hablar–Me enteré hace menos de dos semanas de esto, créeme que ni siquiera sabía cómo reaccionar, ni mucho menos cómo iba a decírtelo. Tenía tanto miedo el pensar que te alejarías de mi lado..–Pequeñas gotas caían por su mejilla.–Lo siento tanto violet.–No pudo aguantar sus grandes ganas de llorar, cada vez lloraba más fuerte.
Violet suspiro arropando a su novia con sus brazos, entendía totalmente su preocupación y el no saber como decirle tal choqueante noticia. Acarició el cabello de la ojiverde tratando de calmar sus llantos, que poco a poco fueron cesando.
Esta la miró y violet decidió hablar–Tranquila, no te dejaría por tal cosa, sabes que siempre voy a estar para tí, ya no llores, todo va a estar bien.–Al ver como los ojos de su novi brillaron sonrió y dejó un suave y cariñoso beso en sus labios, provocando que la contraria se sonrojara.
–Gracias por llegar a mi vida, te amo tanto.–Juntó su frente con la de su novia, ambas sonreían.
–Te amo.. Entonces ¿Tendremos a una pequeña tory corriendo por la casa?–Soltó y ambas rieron.
–Puede que si.–
–Haz estado fumando y estas embarazada ¿Sabes que daños puede causar eso?–Regañó enojada.
Tory hizo un pequeño puchero amenazando con llorar, la pelirosa rodó sus ojos. Acto seguido la ojiverde se tiro sobre su novia abrazandola–Ya no lo haré más.–Fingía llorar a mares.
–Será mejor que entremos, ya está haciendo demaciado frío, no quiero que agarres un resfriado.–Tomó a su novia estilo princesa hasta dentro de la casa.
–¿Te he dicho cuánto me gustas guapetona?–Dijo coqueta para luego arrugar sus labios esperando un beso.
–Siempre me lo dices.–Ignoró por completo la acción de su novia.
–¡OYE! ¿Te atreves a ignorarme?–se quejó indignada.– Vas a dormir afuera.–
–¡¿QUÉ?!–
La pelicastaña de bajó de los fuertes brazos de la pelirosa y le cerró la puerta en la cara.
–¡Tory! ¿Amor? ¿Cupcake?–No tuvo de otra, entró por la ventana de la cocina y ahí vió a su novia, empezando a correr de la recién llegada, quien sin dudarlo fué corriendo detrás de ella para alcanzarla.
–¡Ven aquí!–
–¡Jamás!–
Y Así corretearon hasta que violet por fin la alcanzó y comenzó a hacerle cosquillas, la víctima pedía piedad, sentía que en cualquier momento moriría de la risa, le dolía en estómago de tanto reír, pero violet simplemente disfrutaba el poder vengarse, por dejarla afuera con todo el frío, ahora no tendría piedad antes su querida novia.
Tory se rindió, se estaba casi quedando sin aire, Violet paró y se acostaron en el gran sofá de la sala, ambas riendo por lo sucedido, a pesar de que solo llevaban dos meses juntas, se amaban y complementaban la una a la otra.
[FIN]
Que bonito ♡(*´ω`*)/♡
ESTÁS LEYENDO
𝗔𝗋𝖼𝖺𝗇𝖾 - [𝖮𝗻𝗲 𝖲𝗁𝗈𝘁𝗌]
Fanfiction[One-shots con los personajes de Arcane] Personaje × Fem!OC