Emerald Feathers (Traducción) ✔️

Capitulo 17: La vida, el desenfreno y el corazón roto

Tom siempre imaginó que en el momento en que estuviera seguro de que iba a morir, sentiría algo de arrepentimiento por lo que hizo.  Pero, al ser arrastrado como un cerdo con cadenas que le magullan la piel, Tom solo puede sentir pena por no haber cazado y matado a estas personas antes de que eso sucediera.  No se habría arrepentido de haber usado sus alas para abrigos o incluso alfombras.

Hay un sentimiento de traición que se perpetúa en su pecho, casi como si la traición de Harry lo hubiera lastimado físicamente, le duele y una parte de su mente susurra que es el dolor de un corazón roto.  No entiende por qué le duele, no cree que ame a Harry, no es que sea algo que realmente pueda entender.  Tom nunca ha amado a nadie, nadie lo ha amado nunca, no sabe qué es el amor y cómo se debe sentir.  Pero una cosa que sí sabe es que se preocupa por Harry, que se preocupaba y que Harry era la persona más importante de su vida.

Ya no (al menos quiere creer que esto es cierto), sus sentimientos por Harry parecen haber sido suavizados por una capa de dolorosa traición.  Incluso sin querer, Tom puede sentir la inseguridad, la amargura que sintió cuando era solo un huérfano que vivía en un orfanato, simplemente apareciendo en su mente.  Recuerda las palabras de la matrona, cómo siempre le susurraba al oído que nadie se preocuparía realmente por un pobre huérfano como él.

Tom sigue siendo huérfano y la sangre de la Sra. Cole es solo una mancha en su pasado.  Ahora es la persona más poderosa en un reino que él mismo construyó, pero ninguno de ellos evitó que Harry lo traicionara.  Una pequeña parte débil y amarga de su mente que había ignorado durante años susurra que él es el problema, que nadie podría amar o preocuparse por alguien como él.  Esa misma parte amarga se siente increíblemente cierta cuando es arrastrado por los pasillos de Hogwarts como un maldito animal o un esclavo.

Hay sangre que brota de donde le colocaron las esposas en las muñecas y el cuello, el pesado metal perfora su piel y causa un dolor insoportable cada vez que Moody tira de las cadenas.  Harry no está presente en este momento, pero Tom no duda que el adolescente aparecerá pronto, sus hermosas alas verdes mientras todos los ojos están enfocados en los dos.  Presa y Cazador.  Se pregunta si Harry permanecerá inmóvil a su lado cuando le arranquen las alas a Tom, si esas hermosas esferas esmeralda se llenarán de dolorosas lágrimas.  Tom desea que sí, desea que Harry se arrepienta de sus acciones toda su vida.

Tom intenta aferrarse al sentimiento de ira por la traición en lugar del miedo que siente cada vez que se acerca al Gran Comedor.  Su muerte no llegará pronto, lo que no sepa si es bueno o malo, será doloroso y humillante.  Se pregunta si simplemente tirarán su ala como si fuera basura, ya que probablemente tengan una ética estúpida sobre la reutilización de plumas.  Antes, si pudiera elegir, le daría a Harry sus alas, una ofrenda de su gracia y poder, pero ahora, no sabe cuál quiere que sea el final de sus plumas rojo sangre.

Probablemente quemarán sus alas como si no fueran nada.

Tomando una respiración profunda, Tom solo se da cuenta de que ha llegado al Gran Comedor cuando se abre la gran puerta y una habitación llena de enemigos lo toma.  La propia mente retorcida de Tom los imagina a todos muertos, alas arrancadas, cuellos torcidos, piel quemada, la imagen que se forma es casi una obra de arte, los colores de las plumas y la sangre contrastan perfectamente.  Lo arrastran como un animal entre las filas de hombres y mujeres que lo miran con disgusto, algunos más violentos pateándolo cuando se acerca y escupiendo sobre su piel desprotegida.

Nunca se había sentido tan disgustado, deseando nada más que poder liberarse para matarlos a todos, pero sabe que no se correrá tan rápido.  Su magia se está recuperando mucho más rápido que la persona promedio, pero aún es demasiado lenta para que una gran oleada de poder lo elimine de inmediato.

Es un plan suicida, probablemente no podrá matar a todos con solo una violenta oleada de poder, lo que dejará su cuerpo inmóvil vulnerable para que los sobrevivientes lo maten.  Sin embargo, Tom sabe que al menos matará a todos los que están cerca de él, que se enumeran como Moody, Black y Lupin, el trío de traidores que más desea para sentir la sangre caliente en su piel.  Tomando una respiración profunda, aprovecha los pocos minutos que quedan para acumular toda la magia esparcida en su cuerpo.

Moody lo arrastra a un podio donde solían estar los maestros, y Tom trata de controlar su ira con la ronda de aplausos que recibe ese movimiento.  El viejo Auror se ve increíblemente orgulloso y Tom no quiere nada más que arrancarse la tráquea con sus propias manos.  Moody lo ubica frente a todos, y Tom trata de no notar el lugar determinado donde se encuentra Moody.  Detrás de él, la varita en su mano crujió con luces intermitentes casi como si anhelara el momento en que podría rasgar las alas de Tom.

Hay un breve momento de silencio antes de que emerja la voz atronadora de Moody.  “Arrodillándose frente a todos ustedes está el Gran Señor Oscuro en todo su poder…” La oración de Moody se interrumpe con una risa fuerte y escandalosa.  “Hoy serán testigos del despojo de sus alas y de su muerte.  No solo para vengar nuestras propias vidas perdidas, sino las de todos nuestros amigos y familiares que hemos perdido en esta lucha contra el mal”.

Moody lo patea dolorosamente en las costillas como para enfatizar sus próximas palabras y grita triunfalmente.  "¡Por Albus Dumbledore!"  Y al otro lado del gran Gran Comedor se puede ver la frase repetida cientos de veces.

Las manos de Tom se doblan en puños apretados, el movimiento hace que las esposas perforen su piel con más dolor, las gotas de sangre fresca corren por sus dedos y caen al suelo.  La respiración de Tom es corta y rápida, y su corazón se acelera cuando nota el comienzo del movimiento de la varita de Moody.  Cierra los ojos en lo que parecería normal para todos los demás, pero que en realidad es solo para ayudarlo a enfocar su magia en la superficie, listo para actuar.

La voz de Sirius Black llega a unos metros de distancia, lo suficientemente fuerte como para sobresalir por encima de todas las demás.  "¡Para James y Lily Potter!"  La mente de Tom piensa en el mismo momento en Harry, sus hermosos ojos, sus grandes y magníficas alas, su radiante sonrisa, e increíblemente, el pecho de Tom duele aún más, lágrimas traicioneras formándose en sus ojos.

Débil.  Débil.  Débil.

Una voz repite en su mente, recordándole que nunca debería haberse preocupado tanto por Harry.  Que nunca debería haber dejado entrar esos sentimientos traicioneros. Pero ahora es demasiado tarde, demasiado tarde para arrepentirse.  Está contento de que Harry no esté cerca, Tom sabe que no tendría las agallas para hacer lo que tiene que hacer si Harry estuviera allí para verlo, y posiblemente se vea afectado por sus acciones.

Justo cuando la varita de Moody libera una ráfaga de magia que le habría cortado las alas, los ojos de Tom se abren de par en par y una ola de magia salvaje y poderosa golpea la superficie.  Su piel se eriza cuando se da cuenta de lo que ha hecho.  Él morirá.  En unos segundos su vida será arrebatada de este cuerpo y llevada a hipotéticos lugares.  El miedo roe sus huesos dolorosamente y parece tener dieciséis años otra vez, un simple adolescente que busca formas de sobrevivir a la muerte.  Lo hizo durante muchos más años que un ser humano normal, pero ahora Tom morirá como cualquiera.

Lo último que ve son unos ojos verde esmeralda que se abren demasiado para estar seguros.  Lo último que sintió fue su cuerpo golpeando el suelo, el sonido de la voz de Harry de fondo, un chorro de sangre fresca en su rostro y un dolor inimaginable.  La muerte es increíblemente dolorosa, pero Tom no puede evitar pensar por última vez que Harry no debería estar allí, que su lindo y traidor pajarito no debería morir en sus manos.

Tom muere con un arrepentimiento perforando su pecho.