LA LLEGADA DE DEREK

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Estábamos viendo la serie Scorpion cuando de repente llamaron a la puerta. Eran las 18:32 y Derek todavía no había vuelto a casa. Michael se fue a abrir la puerta y para la sorpresa de todos apareció Louis cargando a Derek en la espalda ya que estaba lleno de golpes.¡Dios mío! ¿Qué le habrá pasado?

En ese momento de la sorpresa no pude gesticular palabra. Michael les dejó pasar y rápidamente me levanté a por el botiquín de primeros auxilios. Cuando volví a la habitación allí estaba Derek, tumbado en el sofá.

Tenía una herida bastante profunda en el abdomen. ¿Qué le ha pasado para hacerse esta herida? pensé pero no había tiempo para preguntarle. Hice presión sobre la herida y esperé a que parará la hemorragia. Alex sin dudar le preguntó:

-Oye ¿Dónde ostias te has metido?

-Eso no te importa-dijo Derek con un tono cortante ¡No parecía el mismo de siempre!

-Hey tío solo queremos ayudar-dijo Harry acercándose.

-Si lo que tú digas Harry. Solo quieres que Addison vea que eres buena persona. Admítelo, ella te gusta. Se te nota en la manera en que la miras- dijo Derek mientras le miraba con rabia. ¿Acaso le molesta que le guste a Harry? Espera ¿Le gusto a Harry? Me quedé sin palabras después de eso.

-¿Qué dices Derek? No tiene nada que ver con eso. Pero... Sí es verdad que me gustas Addison-dijo Harry mientras me miraba a los ojos. No sabía qué decir y me limité a intentar detener la hemorragia.

-Am, Harry no creo que sea el mejor momento para hablar de ello, ¿No crees?- le dije intentando esquivar el tema. No me apetecía tener que hablar de ello, menos teniendo en cuenta que me gustaba Derek desde hacía un par de semanas.

-Por si no te has dado cuenta es una forma educada de decirte. No, no me gustas vete a tomar por el culo.- soltó Derek de golpe con una gran sonrisa hasta que hice más fuerza en la herida por lo que dijo y se estremeció de dolor.

-Eh no os peleéis no es el mejor momento- dijo Louis colocando otra vez las gafas en su sitio.

-Aggh siempre igual- gruñó Alex mientras salía del salón.

-Por favor salid del salón si no no podré concentrarme en detener la hemorragia.- dije echándoles de la habitación.

La hemorragia se detuvo a las 18:47, es decir, 15 minutos después de que llegarán. Supongo que Louis intentó detenerla pero al ver que no se detenía lo trajo para que yo me ocupara. Cogí el alcohol y empecé a desinfectar la herida poquito a poco. Derek se dio cuenta y me dijo:

-Oye no tienes que ser tan delicada con la herida. Puedo aguantar el dolor-dijo Derek.

-Am está bien pero es que no quiero cagarla porque si la cago puede que se te infecte y...- dije antes de que Derek me interrumpiera.

-Oye no tienes que hacer esto y no tienes que preocuparte si sale mal, al fin y al cabo será culpa mía por no ir al hospital-dijo mirándome fijamente a los ojos.

- Vale intentaré relajarme-dije mientras le curaba la herida más bruta que antes.

Terminé de desinfectarle la herida y le puse unas vendas en el abdomen. La verdad es que, las cosas son como son. Tenía unos pedazo de abdominales que parecían de piedra, encima tenía una tableta que Dios mío.Nada más avisar a los otros entraron corriendo. Michael le preguntó a Derek:

-¿Cómo te has hecho las heridas?

-Me he metido donde no debía meterme y con quien no debía meterme eso es todo-dijo Derek intentando evitar el tema.

-Vaya, cuidado no nos des tantos detalles.- soltó Alex al ver la respuesta.

-¿Por qué has tardado tanto en venir a casa? ¿Acaso no querías volver a casa?- le dije seriamente. Él no respondió.

-¿No vas a responder o qué? -dijo Alex acercándose al chico de las vendas.

-Alex no seas así - dije mientras la agarraba intentando detenerla.

-Addison déjame- dijo Alex soltándose de mi agarre.

- Estoy harta de que siempre nos ocultes cosas Derek ¿Qué coño te pasa? ¿Quieres decirlo de una puta vez?- dijo Alex agarrándole del cuello de la camisa que llevaba puesta sin abotonar.

-ALEX SUELTALE DE UNA PUTA VEZ- dijo Harry mientras los separaba- ¿No os dais cuenta de que le estáis haciendo daño a Addison?

-Claro tu defiende a tu novia antes de a tu mejor amiga imbécil-dijo Alex yéndose de la habitación.

-QUE NO SOY SU NOVIA JODER-grité ya harta de la situación- HASTA LOS COJONES YA DE QUE DIGÁIS ESO ¿QUÉ COÑO OS PASA? VALE SÍ LE GUSTO, PERO, ESO NO SIGNIFICA QUE SEAMOS PAREJA-dicho esto salí de la habitación pegando un portazo.- Parecéis niños de 8 años, madurad de una vez.

Con la tontería me acordé de que habíamos quedado con los profesores, me arme de valor y fui a la catedral para avisarles de que no íbamos a ir. Les dije lo que había pasado y para no preocuparles les dije que si pasaba cualquier cosa les llamaríamos, de paso les pasé la dirección de la casa por si pasaba cualquier cosa. Eran las 7 de la tarde y de repente recibí una llamada de Alex. Le conteste y le dije:

-Oye si es para que vuelva a casa olvidaros de eso, voy a alquilar un piso y me quedaré allí hasta que solucionemos esto.

-No hace falta, te iba a preguntar si te querías quedar en mi casa hoy. Yo tampoco quiero estar con estos tres imbéciles, bueno, luego está Louis pero él es un caso aparte.-me dijo Alex

- Esta bien-respondí yo

-Vale ¿Sabes dónde está Dumbo?-me pregunto Alex. Me pareció una pregunta muy rara a lo que respondí:

- ¿Dumbo el elefante?

-No JAJJAJA espérame en la catedral y te llevo-dijo Alex

-Esta bien- dije sentándome en un banco.

Poco más tarde llegó Alex y nos subimos al metro y 40 minutos más tarde llegamos a la casa de Alex.

La TraiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora