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Departamento de Fernando

Fernando: Le avisé a Betina que mañana abrimos la clínica nuevamente.

Valeria: Amor, yo quisiera volver también.

Fernando: Vale, tienes que cuidarte, además sabes que no necesitas trabajar.

Valeria: Si eso ya se pero me hace bien, me siento útil y me gusta el trabajo.

Fernando: Pensándolo bien me conviene.

Valeria: ¿Te conviene? ¿Porque?

Fernando: Porque te tendría todo el día conmigo.

Valeria: ¿Y no te cansarás de eso?

Fernando: ¿Cansarme de ti? Eso jamás mi amor.

Valeria: Entonces...¿Puedo regresar jefe?

Fernando: Por supuesto y además que hermosa secretaria es usted.

Valeria: No se pase jefe, porque puedo denunciarlo.

Fernando: Mhm ¿Segura? Porque yo sé que te gusta.

Valeria: Eres un tonto amor, ya vamos a dormir, que mañana "tenemos" que trabajar (cubriéndose con la sábana).

Fernando: Yo quería darte la bienvenida al trabajo (abrazándola por la espalda).

Valeria: Fer, tu nunca te cansas ¿No?

Fernando: Contigo nunca bonita (besando su cuello).

Valeria: Vamos a dormir porque mañana no te quieres levantar.

Fernando: Uffa!! Está bien pero primero le quiero dar las buenas noches a mi niño (poniendo la mano en el vientre de Valeria) y muchos besos (bajó y le dió besos en el vientre).

Valeria: ¿Que crees que sea?

Fernando: Me gustaría quizás una niñita, ya tenemos el varón.

Valeria: Si, sería lindo tener una mujercita.

Fernando: Que se parezca a ti, una mini Valeria, sería la niña mas hermosa del mundo.

Valeria: Tengo sueño ¿Me abrazas?

Fernando: Ven mi reina, descansa (le dió un pequeño beso) y tú también hijito.

Por un rato Fernando se quedó velando el sueño de Valeria, no dejaba de observarla y pensar en que era tan afortunado de tener una mujer como ella, en qué tonto había sido en engañarla, y estaba seguro de que ella fue, es y será el amor de su vida...

Fernando: Duerme bonita mía, te prometo que serás la mujer más feliz de este mundo porque de eso me encargaré, te amo mi Vale, te amo bonita.

Al día siguiente
8:30 a.m.

Valeria: Mi vida, que raro tu tan temprano aquí.

Martín: Quería verlos antes de irme a trabajar.

Valeria: ¿Quieres café?

Martín: Si porfa, y tus tostadas que tanto amo también (tomando una del plato de Fernando).

Fernando: Esa es mía, acaso quieres que tu padre muera de hambre o que.

Valeria: Como si estuvieras desnutrido amor (riendo).

Martín: Saben, anoche escuché a la tía Ana hablando por teléfono con mi tío Julián, muy acaramelados, creo que esos dos andan en algo eh.

Valeria: Eso no lo dudo, pero ya Ana me tendrá que contar.

Martín: Mamá, papá, también quería contarles algo, espero no les moleste.

Fernando: ¿Que pasa hijo?

Martín: Es que estoy conociendo a alguien y quería que lo supieran.

Valeria: Sabes que te apoyamos amor.

Martín: Si, lo sé mamá.

Valeria: ¿Y como se llama el afortunado?

Martín: Gabriel, es muy lindo y muy bueno, trabajamos juntos.

Fernando: Hijo, ya lo hablamos y sabes que ahora no tengo nada en contra de eso, se que es amor y ya y me encanta que estés feliz, sabes que te apoyo y que te amo.

Martín: Gracias papá, aunque lo sabía, necesitaba escucharte decirlo.

Valeria: ¿Que te parece si lo invitamos a comer?

Martín: ¿En serio?

Fernando: Claro que sí.

Martín: Me encantaría, yo les aviso, me tengo que ir a trabajar ahora y gracias, los amo tanto.

Valeria: Y nosotros a ti amor.

Martín: Te amo má (la abrazó) te amo bebé!! (besando el vientre de Valeria), adiós pá, te amo y gracias de nuevo (abrazándolo).

Fernando: Te quiero hijo, ya ve a trabajar.

Martín: Bye!!! (saliendo).

Valeria: Estoy tan orgullosa de ti mi amor, por haber cambiado tanto así por nuestro hijo y entenderlo.

Fernando: Es mi niño y estoy orgulloso de él.

Valeria: Y yo de ti (lo besó).

Consultorio
4:30 p.m.

Valeria: Ya no tienes más pacientes por hoy, mañana tienes 3 consultas y 2 urgentes.

Fernando: Que secretaria eficiente que tengo (se paró de su silla y la abrazó).

Valeria: Lo se.

Fernando: Uy qué ego amor (besándola).

Betina: Permiso, perdón.

Fernando: Pasa Bety, ya tendrías que acostumbrarte a esto.

Valeria: Fer!! No le hagas caso Bety.

Betina: Ya conozco a este loco doctor (riendo) quería dejarle este sobre que acaba de llegar.

Fernando: ¿Sobre de que?

Betina: Del laboratorio, es por el ADN, los dejo (saliendo).

Valeria: Ábrelo (mirándolo nerviosa).

Fernando abrió el sobre, sus manos temblaban, leía mientras Valeria moría de nervios...

Valeria: Ya dime qué!!!

Fernando: Lo sabía (sonriendo) no soy el padre de ese niño.

Valeria: Ay amor!! (lo abrazó muy fuerte) lo sabía, tenía que ser así.

Fernando: Solo quería engañarme pero esto lo tengo que resolver.

Valeria: ¿A dónde vas ?

Fernando: A resolver este asunto de una vez.

Valeria: Voy contigo.

Fernando quería que Débora sepa que él no es ningún tonto y que ella es la mentirosa más grande del universo y Valeria no pensaba dejarlo solo....

Junto a EllaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora